PERROS, GATOS Y CABALLOS
Las otras víctimas del desborde del río: Al rescate de los que no tienen voz
Durante la semana, organizaciones proteccionistas coordinaron esfuerzos para asistir a perros, gatos y caballos de las zonas inundadas. Les llevaron alimento y los rescataron del abandono. Una ayuda necesaria que, también, contó con el apoyo y la colaboración de la comunidad.
Soledad Mangiavillano y Fernando Pieroni son dos referentes de la Fundación Planeta Vivo que durante esta semana estuvieron en la ciudad ayudando a los animales varados -o incluso abandonados- en muchas zonas inundadas. Soledad explicó que “uno de los roles que tiene la fundación es asistir a los animales en situación de desastres, de emergencias”, y que al tomar conocimiento de lo que estaba pasando en Entre Ríos acudieron a Gualeguay primero y a Gualeguaychú después. Su acción fue posible gracias al trabajo conjunto con otras ONG’s locales: “Somos Rescataditos, el grupo Güaba y ProVoIn fueron las organizaciones en las que nos apoyamos para hacer todo el trabajo”, indicó.
“Nos encontramos con perros, gatos y caballos que estaban abandonados en las casas inundadas. También con gatos y perros que estaban con la gente en estas casas. Una gran cantidad de animales”, describió Soledad, y explicó que su ayuda consistió, por un lado, en rescatar a aquellos animales que se encontraban en situación de abandono, y por otro, en distribuir alimento: “2.500 kilos de alimento para perros y gatos y 2.000 kilos de alfalfa para caballos”, detalló. “Estuvimos en el Munilla, en el Camino de la Costa, en Los Espinillos, en la Isla; en esos barrios, principalmente. Casa por casa, verificando que haya animales y distribuyendo alimento”.
Por su parte, Mauro García Rodríguez, activista de Güaba, comentó que desde su organización decidieron poner el foco en la situación de los caballos, dado que existe “una red de proteccionistas y refugios que se ocupan principalmente de perros”. “Lo que notamos fue que empezó a haber una cantidad de caballos en la ciudad mucho más grande y que eso tenía que ver con que eran los animales desplazados de los campos bajos; y que ya habían pasado varios días y quizás había animales encerrados en pedacitos de tierra donde no hay comida. Y, entendiendo que muchas veces son animales carreros, que pertenecen a una población muy vulnerable que también está inundada, obviamente eran animales que quedaban sin recibir ningún tipo de asistencia”, señaló. Y añadió: “Nos acercamos a algunos de estos lugares y nos dimos cuenta de que estaban con hambre. Entonces se nos ocurrió iniciar una campaña para juntar fondos para comprar fardos. Por suerte tenemos mucho apoyo, hay una comunidad solidaria y cada vez con más conciencia del cuidado animal. Enseguida surgió el apoyar la campaña y en menos de cuatro horas juntamos para comprar 20 fardos. En el mismo momento, nos enteramos de que estaba viniendo Pieroni. Nos pusimos en contacto y empezamos a trabajar en colaboración. Ellos pusieron una cantidad todavía más grande de fardos. Nos reunimos esa misma noche para diagramar el operativo. Al otro día salimos a las 7 de la mañana: fuimos a La Tablita, después a Los Espinillos, llevando alimento para perros y también registrando si había necesidades para los caballos. Ahí se rescataron algunos perritos y gatitos; después se fue a buscar fardos, se hizo la alimentación de algunos caballos y después una recorrida por agua en la parte baja del Camino de la Costa”.
Concluida la parte más ardua de su labor, Mauro señaló que ahora continúan monitoreando la situación de los caballos y administrando los fardos alimentar a los que haga falta. “Sobre todo porque si bien el agua se retiró de la ciudad no lo hizo de los campos y hasta que vuelva a haber pasto para estos animales que no reciben alimento obviamente que enflaquecen”, agregó.
Por otro lado, la referente de la organización Patitas, Viviana “Coqui” Carbó, describió la situación que le tocó afrontar a su refugio canino. “Cuando hay un repunte importante del río, el agua llega a varios caniles. Empezamos a publicar en las redes para conseguir hogares transitorios. Los vecinos son muy solidarios con Patitas así que pudimos encontrar lugares para los perritos”, contó.
En cuanto a sus necesidades inmediatas, mencionó que lo que más precisan en estos momentos “es poder comprar arena de segunda para rellenar los caniles así podemos empezar con el traslado”, indicó, agregando que quienes deseen colaborar pueden hacerlo mediante una transferencia al alias refu.pati.tas.mp o llevando donaciones de alimento.