Andrés Passadore: “Entre Ríos tiene una gran fortaleza que es la de elaborar distintas calidades de vinos”

El profesional, una eminencia en vinos, con una maestría en vitivinicultura y enología en Francia donde hizo la carrera de enólogo, dialogó con AHORA ElDia y señaló que “Entre Ríos tiene una gran fortaleza, que es la de elaborar distintas calidades de vinos. En el mismo departamento de Gualeguaychú, encontrás diferencias entre lo que se hace en El Potrero, en Urdinarrain, en los alrededores de Gualeguaychú y en Larroque. Y si recorrés la provincia, también vas a ver diferencias, entre lo que es Gualeguaychú con Colón y desde esta a Concordia, también la diferencia de los suelos de la costa del Uruguay con los de Paraná”.

El especialista detalló que “la vitivinicultura tiene una gran ventaja, que es adaptarse a una amplia gama de variabilidad de suelos. Es una planta que a no ser que haya una gran limitante en los suelos, se adapta sin problemas, aunque hay que tratar de aplicar un manejo diferenciado dependiendo de las características de los suelos”.

Dijo que “en la provincia se encuentran distintas variedades, tales como Tannat, Merlot, Cabernet Sauvignon, además se está plantando Marselan, mientras que en variedades blancas nos encontramos con Sauvignon Blanc y Chardonnay, que son las mayoritarias, aunque también se está trabajando con otras variedades”.

Sostuvo que “el enoturismo es la gran llave, la salida que van a tener y están teniendo los vinos entrerrianos. Generalmente en la provincia tenemos emprendimientos de bodegas chicas que se encuentran en lugares para que el turismo pueda degustar y comprar vinos entrerrianos. Lo otro bueno que tienen estas bodegas, es de que están muy cerca de Buenos Aires, Rosario y de grandes centros urbanos, con un público potencial bastante grande y ese público es el que hay que tratar de atraer a este tipo de emprendimientos”.

Dijo que el promedio de los emprendimientos en la provincia “es de una hectárea, si bien hay de más y menos superficies todos son productores de carácter familiar en donde trabajan todos los integrantes en lo que es una fortaleza porque el nivel de involucramiento es muy grande”.

Sobre la calidad de los vinos entrerrianos, Passadore sostuvo que “se ha dado una evolución lógica luego de un período de aprendizaje. Hoy, los vinos tienen muy buena calidad, diferentes a los de las regiones cuyanas. Se trata de vinos más afrutados, menos alcohólicos, más tomables, además ofrece una paleta de variedades muy amplias”.

Consultado sobre en qué difieren los vinos entrerrianos de los de altura como los cordobeses y los salteños, respondió que “en Cafayatte (Salta) y en las altas cumbres (Córdoba), encontramos diferencias por la altura y las temperaturas que se dan en esas zonas con una marcada diferencia entre el día y la noche. Además se trata de regiones semiáridas. Es muy diferente a lo que hacemos en nuestra zona. Nosotros tenemos una vitivinicultura que todos los años tienen un vino diferente en lo que es también un permanente desafío”.

Sobre la posibilidad de exportar dijo que “es cuestión de buscar un nicho de mercado donde se pueda colocar el producto, tratando de vender en volúmenes menores a buen precio y no buscar los consumos masivos”.

Sobre la graduación alcohólica, dijo que “dependiendo de la época del año oscilan entre los 12 y los 14 grados. Es una graduación media. Por ejemplo, en Mendoza los Malbec están a 14 grados y hoy día tenemos una tendencia mundial de bajar la graduación alcohólica de los vinos para que sea un producto más tomable y un vino de 12 grados tiene buena complejidad”.

Finalmente, calificó al segundo encuentro Entre Ríos, Entre Viñas, como “un evento muy importante para dar a conocer lo que es la realidad vitivinícola de la provincia. Estoy sorprendido por la cantidad de etiquetas que se han presentado”.