El responsable del área de Derechos Humanos del Municipio repudió el fallo de Corte Suprema que dejaría libre a varios criminales de lesa humanidad. Habló tanto por su rol como funcionario como por su rol como hijo de desaparecido."La verdad es que si bien no debería sorprendernos, porque se inscribe en una forma de fallar de esta Corte, que está de acuerdo a los vientos que soplan, no creímos que podían llegar tan lejos", afirmó Matías Ayastuy, con su voz calma pero cargada de bronca, sobre el fallo de la Corte Suprema de Justicia que beneficia a los genocidas condenados con la polémica ley conocida como 2 x 1.Es que el responsable del área de Derechos Humanos del municipio habla desde un doble rol: además de funcionario, es hijo de desaparecidos durante la última dictadura cívico militar que aterrorizó a nuestro país entre 1976 y 1983."Se supone que tiene que haber un arrepentimiento para que haya perdón, y a nosotros nos quieren hacer sentar con los responsables de la desaparición, de la tortura, del asesinato, las violaciones y el robo de bebés de nuestros familiares con personas que dicen que lo volverían hacer. Todo eso es una provocación", sostuvo con firmeza en declaraciones a ElDía desde Cero.
Nota relacionada: La Corte le puso un límite a las indemnizaciones por la dictadura Por mayoría, la Corte Suprema declaró esta semana aplicable la ley 24.390 (conocida como 2 x 1), que estuvo vigente entre los años 1994 y 2001, hoy derogada, que reduce el cómputo de la prisión, porque se trata de la ley más benigna, en el caso de Luis Muiña, condenado por ser parte de un grupo paramilitar que actuaba en el centro de detención clandestina dentro del hospital Posadas, conocido como "El Chalet".
Nota relacionada: Estela de Carlotto dará una charla en el Teatro Gualeguaychú "Si un organismo como la Suprema Corte manipula la interpretación, como lo está haciendo, de una ley que sólo estuvo vigente entre 1994 y 2001, y la aplica a delitos de lesa humanidad, que no prescriben, es para preocuparnos todos", advierte Ayastuy, quién afirma que el avance de la derecha en la región -como el gobierno del presidente Macri- propician este tipo de interpretación aberrante de la ley."Tengo una preocupación general sobre qué puede pasar de nuestro país de acá en adelante. Me preocupan los tiempos que se vienen, porque se pone en cuestión la vigencia del Estado de derecho", concluyó.
