
Corredores inmobiliarios, ingenieros, agrimensores, arquitectos, maestros mayores de obras y escribanos se reunieron en el Colegio de Arquitectos para seguir analizando el proyecto del banco de tierras que propicia el Municipio. Sumaron a un letrado de un estudio jurídico de Paraná que es asesor legal del Colegio.
Guillermo Bibel, integrante del Colegio de Corredores Inmobiliarios, delegación Gualeguaychú, indicó que la reunión fue "una de las tantas que se realiza a nivel inter colegios donde participaron escribanos, ingenieros, maestros mayores de obras y agrimensores".
Recordó que han sido citados en reiteradas oportunidades por concejales y destacó a título personal que le da la sensación de que los han escuchado. Sin embargo "no hemos tenido eco en una serie de reclamos que hemos efectuado". Indicó que se "corre el riesgo de que esto termine generando un efecto inverso al buscado. El objetivo lo compartimos todos y es que la gente acceda a la tierra, pero esto no garantiza que se pueda construir una vivienda, teniendo en cuenta el faltante de créditos accesibles y a tasas razonables".
Por otro lado comentó habrá un aumento en las tasas que "pegará fuerte en personas que han heredado terrenos grandes en superficie, pero de ninguna manera locaciones caras, a los cuales hoy ya está costando pagar la tasa".
Bibel presupone que "seguramente se dará una sobreoferta de personas propietarias que se verá obligada a vender para no endeudarse; y puede pasar que tenedores de tierras terminen adquiriendo una mayor superficie de terreno. El tema del banco de tierras es muy extenso y tiene varios puntos para debatir".
Por otra parte, señaló que en la reunión del martes participó José María Armándola Follonier, presidente del Colegio de Corredores Inmobiliarios de la provincia de Entre Ríos, junto a dos miembros de la Comisión Directiva. También estuvo presente el doctor Julio Budasoff, integrante del estudio jurídico de Paraná que es asesor legal del Colegio.
El integrante del Colegio de Corredores Inmobiliarios mencionó que el estudio jurídico analiza el "marco de legalidad de la propuesta que quiere llevar adelante el Ejecutivo Municipal".
Opino que "las intenciones del municipio son valederas, siempre y cuando no perjudique a la actividad en su conjunto. Es por eso que nos juntamos todos los Colegios, más allá que las caras más visibles son la de los corredores". Agregó que "de las operaciones inmobiliarias surgen tareas para diferentes rubros como el de los agrimensores, escribanos, arquitectos, maestros mayores de obra y gente que trabaja en la construcción".
Adelantó que se está elaborando un "documento con una postura tomada por todos los colegios de profesionales de la ciudad; en un lenguaje claro, sin tecnicismos para que lo entienda toda la gente".
Ley de alquileres
Respecto a este tema adelantaron que se está tratando de dar "un marco para evitar abusos, aunque no es el momento para aplicar ciertos conceptos en el marco de inestabilidad económica que vivimos. Se está planteando un contrato mínimo de tres años, y si uno se pone en los zapatos del inquilino está bárbaro, pero al poner un precio fijo -que luego va a tener un ajuste por una combinación de la inflación y el índice de incrementos salariales- el propietario perdería en todos los casos".
Si se plantea este escenario, opinaron que es factible que el dueño del inmueble trate de arrancar con un valor más alto. En cambio, si se hacen contratos a dos años la operación sería menos riesgosa, teniendo en cuenta las variables de la economía, los cambios bruscos en la cotización del dólar, y la inflación.