Berisso en Gualeguaychú

El próximo viernes 4 de septiembre a las 18,30 se inaugurará en Casa de la Cultura una muestra fotográfica que sus organizadores de la "Asociación 1871, Museo de Berisso" han denominado: "Berisso, Historia de Inmigrantes y Trabajo".A través de 40 fotografías, se aprecia en la misma la intensa historia de aquella ciudad. La muestra fue presentada en 2007 en la Embajada Argentina de Estados Unidos con gran éxito.En su contenido se pueden observar fotos de un pasado pleno de trabajo, tareas en los Frigoríficos, entre otros temas. De inmigrantes que mezclaron su cultura artística y musical, y la muy importante la cultura política, que cada uno trajo desde la lejana Europa. Estas fuertes influencias hicieron que el ciudadano berissense adquiriera un rasgo muy particular. Esas corrientes migratorias tan importantes a principio del siglo pasado, alertaron a muchos personajes que como Aristóteles Onasis, María Barrientos, Joseph Broz o Brozovich (Mariscal Tito), Eugene O¨Neill y Josephine Baker, pasaron por esta ciudad con visiones diferentes.Su puerto natural en el Río Santiago, afluente del Río de La Plata ya era conocido para los ingleses. Allí desembarcaron en su primera invasión al virreynato. Pero un hecho desgraciado, como fue la epidemia de fiebre amarilla -1871- motivó que Juan Berisso tuviera que trasladar su saladero establecido sobre la costa del Riachuelo en Bs Aires, a la costa de un arroyo que a pesar de ser tierras bajas ofrecía la combinación de llanura y río para su establecimiento.Lejos estaba Juan Berisso de pensar que con su decisión estaba fundando una ciudad. Hace pocos años por, Ley provincial se fijó como fecha fundacional el día que inició operaciones el saladero de Berisso, nombre de la actual Ciudad, lo que el uso y costumbre ya le había impuesto.La historia, se inicia en 1871 al instalar el saladero, 138 años después, es el número que da nombre a este Museo. Es un homenaje a los inmigrantes, a los obreros que se sobrepusieron al cierre de los saladeros primero (1890) y los frigoríficos (que llegaron a dar trabajo a 12 mil personas), (1983) casi cien años después, y ante una igual situación no abandonaron su lugar, su ciudad. Probablemente los inmigrantes ya sabían lo que era o significaba el desarraigo. Y el tiempo les dio la razón: hoy plena de historia no para de crecer, su pasado reflejado en estas fotos merecen ser contempladas y reflexionar sobre tiempos que no fueron fáciles pero que se superaron a fuerza de voluntad. Como reconocimiento a sus sacrificios las autoridades la declararon Capital Provincial de Inmigrante Y desde hace 38 años sus 20 colectividades celebran su Fiesta anual en Septiembre.La cultura del trabajo tuvo tremendo desarrollo y con ella nuevas concepciones políticas se arraigaron en las masas y dieron lugar a la creación de sindicatos y partidos políticos que con el tiempo estallara en la imparable pueblada del 17 de Octubre de 1945, una singular experiencia que todavía es motivo para que estudiantes e historiadores de lejanos centros de estudio, investiguen causas y efectos de aquel estallido social, que gestó Cipriano Reyes. Hoy aquel esplendor industrial que le dio vida ha ido esfumándose, pero no es motivo de alarma en sus habitantes, no deja de crecer y ese crecimiento se ve reflejado en las fuertes inversiones inmobiliarias que apuestan a un reverdecer industrial que por ahora está en promesas.Parte importante de esta historia y sus protagonistas son especial motivo de esta muestra que trata de eternizar en imágenes el esfuerzo de varias generaciones por salvar del olvido y aún de su desaparición a esta particular comunidad.La muestra cuenta con el auspicio de la Municipalidad de Gualeguaychú y su Dirección de Cultura y permanecerá abierta hasta el 14 de septiembre.