Bonzi: "Basta de cábalas...vamos a ascender"

El micro que trajo al plantel a Formosa tuvo que atravesar la misma ruta que hace dos semanas atrás: la intransitable 123 que cruza la provincia de Corrientes. Esta vez Chaco quedó en el camino; Formosa, la parada obligada.Enviados EspecialesEl plantel, después de doce horas de viaje, llegó al Hotel Gran Turismo de la capital norteña. El inmejorable clima que los recibió abonó al buen humor que muestra el grupo conducido por Acosta. A veces, estos jugadores que tuvieron que luchar contra todo y todos para llegar a donde  están, parecen demasiado consientes del lugar en donde están parados. Desde las 15, el equipo de Gualeguaychú volverá a jugar una nueva final. Enfrenta a San Martín de Formosa en el estadio municipal de la ciudad: equipo aguerrido que viene de caer en Morteros y necesita ganar o ganar para no despedirse de la lucha por el ascenso.Los dirigidos por Acosta saben el calibre del rival con que se enfrentan: ninguna de las dos veces que se vieron las caras, Juventud pudo sonreír: fue empate en Entre Ríos y derrota cuando vino a Formosa. Aquel día el árbitro fue Rodrigo Rivero, el mismo de esta tarde.El plantel decano está ansioso, pero tranquilo;  seguro de lo que quiere y de que eso que quiere depende solamente de ellos. Mientras un grupo de los más jóvenes del equipo escucha cumbia y canta en uno de los cuartos del hotel, ElDía habló con Iván Bonzi, el único que estuvo en todas los torneos desde que Juventud juega el Argentino BSeguro de sus palabras, tranquilo y de buen ánimo. Conciente de que están a horas de entrar en la historia grande de la provincia. Iván Nicolás Bonzi se sabe referente y asume esa responsabilidad: entiende que es uno de los pilares del grupo que fue creciendo junto a su propia carrera: "Pase por todos los momentos; me tocó vivir la inexperiencia de nunca haber jugado una categoría como ésta. Por dar un ejemplo: cuando venía un jugador que no eran de Gualeguaychú se generaba recelo. Son cosas propias de la inexperiencia y las vas entendiendo una vez que van pasando los años".La autocrítica es propia de la madurez que supo construir el diez: "el grupo fue madurando a medida que iban llegando jugadores de experiencia y se empezaban a integrar con los de Gualeguaychú; pero el buen clima no es de ahora.  Hay una base de cinco o seis años atrás que  viene en proceso de formación, hoy vemos los buenos resultados de todo eso", expresó.Pocas veces se los ha visto a los jugadores tan tranquilos antes de un encuentro de la magnitud del que hoy disputarán.  Y más allá de lo que pase esta tarde, y del resultado que Juventud se lleve a Gualeguaychú, todos y cada uno de los jugadores tienen presente que el juego de hoy será la llave que les abra la puerta a la finalísima, el domingo en cancha decana. El diez lo reconoce y no le esquiva a la pregunta: "Vamos a tratar de conseguir un buen resultado para el domingo poder ganar de local y llegar al objetivo; sabemos que la cancha va a estar rebalsada de gente y será una jornada especial: este equipo está a la altura de la historia".La entrevista se extiende más de lo esperado. Bonzi se muestra con mucha confianza, seguro de sí mismo y del grupo del que forma parte; con la tranquilidad que le dan los años.-Con el pasar del tiempo te has convertido en un jugador que cuando no puede jugar, lucha y mucho en el medio ¿eso lo aporta la experiencia?- Si, claro. A veces a uno no le salen las cosas, ya sea porque tenés una mala tarde o porque te están marcando muy bien; ahí es cuando te juega la cabeza, porque no podés aportarle lo que sabés al equipo, y ahí no te queda otra que ir a todas las pelotas, correr, meter e ir para adelante.-Cuando arrancaste eras resistida por mucha gente del club, ¿sentis que hoy, a fuerza de esa entrega, sos un jugador querido?-Yo empecé jugando en Unión, equipo del que soy hincha; después jugué en Pueblo Nuevo, Central y llegué a Juventud. Es lógico que la gente sea reticente a mi llegada, pero pasaron muchos años y el aprecio que tengo a esta camiseta es incomparable, me siento hincha del club también. Es la institución que me dio la posibilidad de mostrarme, de jugar un torneo nacional, de crecer en lo futbolístico y de muchas otras cosas que en el fútbol local no hubiese conseguido. Voy a terminar mi carrera en Juventud, porque es el club en donde me siento muy bien y donde quiero seguir jugando.-Dejando de lado todo lo que ya consiguieron, decime tres cosas, más allá del grupo, por las que Juventud tiene que ascender...-Por la gente y el fútbol de la ciudad, para estar a un paso de jugar el Nacional B; por el club también, que es el que ha bancado todos estos nueve años un torneo que es muy caro, y hasta el día de hoy lo banco como pudo siempre, en las buenas y las malas. Y... ¿me falta una? Por la familia, que es la que siempre acompaña. Uno a veces llega con la peor cara después de un partido y es la familia la que siempre te banca todas y te recibe con una sonrisa-Entonces basta de cábalas... ¿Podés decir que van a ascender?- Sí!!! Basta de cábalas, el domingo vamos a ascender. Hoy vamos a sacar un buen resultado y en Gualeguaychú seremos protagonistas de un partido que quedará en la historia. Pero antes está el choque contra San MartínLa charla con el diez termina cuando golpean la puerta de uno de los cuartos del hotel. Lo vienen a buscar para comer junto a sus compañeros. Seguro y confiado en sus palabras responde por última vez a la pregunta de ElDía:-¿Juventud asciende el domingo?- Que la gente se quede tranquila, este equipo tiene todo para ser campeón. El 21 en Gualeguaychú este equipo asciende al Argentino A.