Por el impulso de un grupo de vecinos, la Casa declarada Monumento Histórico Nacional, será restaurada. El jueves pasado se realizó una limpieza del lugar y trabajarán en modificar el anteproyecto. Resta la adjudicación del dinero y el llamado a licitación.
Mónica FarabelloEl estado de abandono es absoluto. La Casa donde nació José Álvarez, conocido como Fray Mocho, es la obsesión de un grupo de vecinos que siguen de cerca las gestiones municipales, frente a la Comisión Nacional de Monumentos y Museos Históricos.Con los cambios en la Dirección de Cultura, surgieron las dudas acerca de cómo seguirían los trámites, con el fin de un inminente comienzo de las obras.ElDía consultó al subsecretario de Planeamiento Municipal, Pablo Bugnone, quien informó que había mantenido reuniones con el ex director de Cultura, Martín Ayala y que hasta el momento no se ha encontrado con el nuevo funcionario a cargo, Francisco Melchiori.De todos modos, explicó que el jueves pasado "se comenzó con la limpieza del lugar y se cortó el pasto. Estuvo presente el arquitecto Gustavo Pirovani -que pertenece a Planeamiento- y con la arquitecta Nancy Rodríguez, asesora de la Comisión Nacional de Monumentos y Museos Históricos".Además, de la puesta en marcha de la limpieza de la antigua casa, Bugnone indicó que "lo que se acordó fue ajustar el presupuesto de la obra a realizar, para poder elevarlo a la provincia y pedir los fondos".Al ser un monumento histórico, cada paso debe ser supervisado por la arquitecta Rodríguez, informado y aprobado por la Comisión Nacional. "El dinero no pasa por el Municipio"Los vecinos "amigos de la Casa Fray Mocho", se preguntaron dónde había quedado una suma de 900 mil pesos que había sido autorizada en la gestión del ex intendente, Juan José Bahillo.Al respecto, el Subsecretario de Planeamiento, aclaró que esos "900 mil pesos se habían anunciado pero nunca fueron adjudicados" e indicó que "en la Casa Fray Mocho se va a trabajar como se trabajó en el Teatro Gualeguaychú".En este sentido, contó que "cuando los fondos están disponibles, se empiezan a realizar las obras. A medida que se van logrando los avances, hay que sacar alrededor de 20 fotos y enviarlas para que se constate el trabajo realizado"."Luego de certificada la obra, los fondos se destinan directamente a la empresa adjudicataria y a cargo de la obra, pero nunca pasan por el Municipio. El dinero no lo implementa la Municipalidad, va directamente a la empresa", aclaró Pablo Bugnone.Por otra parte, el funcionario informó que los arquitectos, Pirovani y Rodríguez, estuvieron hablando del anteproyecto, porque ya había algo armado, pero nosotros consideramos que hay que agregarle algunas cosas más a ese trabajo para que quede mejor. Después, esas ideas van a ser enviadas a Nación para que la Comisión Nacional las apruebe", concluyó.Asimismo, fue prudente con los plazos a cumplimentar y aclaró que no se puede dar una fecha "porque no depende del Municipio, sino que tenemos que tener los permisos y los fondos de la Provincia" y agregó: "para la mano de obra hay que hacer una licitación y la empresa ganadora es la que va a estar a cargo de la obra. Son todos pasos que hay que cumplir". RECUADRITOLos últimos avancesA mediados de junio pasado, el intendente, Esteban Martín Piaggio, recibió en su despacho al secretario de Cultura de la provincia, Faustino Schiavonni y al director de la Editorial de Entre Ríos, José María Blanco.El motivo del encuentro fue analizar alternativas que permitan viabilizar la restauración y puesta en valor de la casa donde naciera, el 26 de agosto de 1858, José Álvarez, conocido como Fray Mocho.Piaggio aseguró que "restaurar y poner en valor a esta casa, es recuperar un símbolo imprescindible para nuestra identidad y no hablo sólo de los gualeguaychuenses, sino de todos los entrerrianos. Pero ese símbolo también significa un puente que vincula a las nuevas generaciones con la fantástica estirpe de aquellos hombres. Fray Mocho fue para muchos el más popular de los escritores de fines del siglo XIX".
