Cautela, optimismo y no atender reclamos sectoriales
Los tres planteos centrales que expresó ayer el gobernador Urribarri en su mensaje a los legisladores entrerrianos. Fue enfático al desalentar cualquier reclamo de incremento salarial y llamó a legisladores a no encaramarse en planteos sectoriales.o
Una tras otra, sin prólogo, pasó lista Sergio Urribarri a las obras en marcha en la provincia. En su repaso, dio cuenta de la marcha de los trabajos y del monto invertido, fundamentalmente en lo que llamó “caminos productivos”.
“Así podría seguir, con obras, obras y obras”, cerró el listado Urribarri en su mensaje a la Legislatura, ayer de mañana, en el Teatro 3 de Febrero, donde dejó inaugurado el 130º período de sesiones ordinarias.
“Nombrarlas a todas nos demandaría muchísimo tiempo. La verdad es que la lectura aburre pero no hay como explicarlas: son obras hechas sobre la base de un trabajo político y económico de magnitud, que consideramos que será valorado en su justo momento por los ciudadanos de las ciudades y el campo”, relató Urribarri que, luego, someramente, en un discurso de 30 minutos, dio cuenta de lo realizado en materia de infraestructura y tecnología educativa y en políticas de asistencia social, entre otros aspectos de la tarea del Estado.
“Todo esto en el peor año que nuestra generación tenga memoria, con un conflicto con el campo que nos paralizó durante seis meses, con conflictos salariales y con una sequía que da espanto”, contextualizó el mandatario.
Luego repasó algunas imágenes de lo que significa la crisis internacional en los países del primer mundo: “El mundo está tambaleando y en ese mundo estamos los entrerrianos”, advirtió.
Pero llamó a ver “el vaso medio lleno”, a tener “actitudes constructivas”, a ser “responsables, no mentir ni hacer demagogia”, enfatizó. En este marco, llamó a tener “paciencia” por cuanto “la magia no existe ni en Entre Ríos ni en el mundo”.
“No todos son problemas”, continuó Urribarri en su mensaje a los legisladores para, luego, repasar aspectos más desconocidos de las áreas del Estado, sobre todo aspectos vinculados a las áreas culturales, educativa y de formación.
Recién entonces, cuando promediaba el discurso, Urribarri se desvivió en elogios a la era kirchnerista en la Argentina. Dio cuenta de indicadores sociales y de su apoyo “incondicional” a la gestión de Cristina Fernández.
Oídos sordos a lo sectorial
Volvió, de inmediato, a dar cuenta de su gestión: “Gracias a la buena administración del gobierno entrerriano pudimos otorgar aumentos salariales muy por encima de la inflación, a los trabajadores estatales y principalmente a los sectores docentes. Entre Ríos dio un 77 por ciento de aumento del básico en un solo año”, subrayó Urribarri abriendo el paraguas ante los anunciados reclamos del sector docente.
“Seguramente no pagamos los sueldos que quisiéramos pero estamos muchísimo mejor en ese aspecto”, añadió. Se dedicó luego a atacar otro frente de conflicto, el planteado con el campo, para lo cual dio detalles de las decisiones que irían a dar respuestas a este sector.
“Son pinceladas, fotos de lo que hacemos los entrerrianos. La película es mucho más larga. No niego los problemas que surgen de la crisis internacional”, dijo el mandatario que, en este marco, insistió con la necesidad de una “actitud prudente pero preactiva, ser positivos, no detener el trabajo ni la inversión. Los problemas no se solucionan agravándolos”, definió.
Fue más lejos, en su descalificación al reclamo sectorial, cuando caracterizó la etapa que atraviesa el conflicto con los empleados del Registro Civil: “Estamos en proceso de intimidación pública por incremento salarial en un sector del Estado. Estamos en un momento muy complicado para la provincia y ante la negativa del gobernador adoptan actitudes intimidatorias”, denunció.
“Son momentos de privilegiar los puestos de trabajo antes que el aumento, es la realidad del mundo que vivimos. Ni los violentos ni las expresiones facciosas van a doblegar a este gobernador”, advirtió Urribarri que convocó a “cooperar y mantener la tranquilidad porque las circunstancias particulares quedan en segundo plano”.
Claramente, desalentó la posibilidad de aumentos de consideración en el salario del Estado: “Trabajadores y funcionarios deben asumir que durante un tiempo deberán trabajar por salarios similares a los actuales y quien no trabaje no cobrará”, dijo sin vueltas que le habló a la dirigencia política para decir que “son momentos de conducir más que de reclamar”. Página Política
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