Chau invicto Rojo: Lanús lo dejó afuera de la Copa Argentina
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Lanús fue mucho más inteligente que Independiente y lo derrotó merecidamente con goles de Román Martínez y Castellani. El Rojo había ganado sus seis partidos con Pellegrino.
Algún día se le iba a terminar el invicto con Pellegrino a Independiente y el final no tiene reparos ni justificaciones. Sólo que cuando se enfrentó al rival más complicado de todo el ciclo con el entrenador estuvo muy lejos de dar la talla ante un adversario inteligente y de una estrategia mucho mejor desarrollada.Hubo lapsos del primer tiempo en los que el Rojo tuvo más la pelota. ¿Para qué? Para algún remate de afuera de Martín Benítez. Nada más. Si los volantes de Lanús, apoyados por el retroceso de González y el Laucha Acosta, presionaban lo sufienciente para evitar eficiencia en el último pase y las pocas veces que Vera y Albertengo recibieron en el área rival lo hicieron con dos o tres futbolistas respirándoles en la nuca.Mientras, Lanús sabía que con una mínima aceleración iba a encontrar con mayor facilidad el camino. Y nadie del Rojo bloqueó ni rechazó una habilitación de Araujo a Román Martínez, quien tuvo tiempo de girar en el área rival antes de someter al Rusito Rodríguez.La intención de Pellegrino para el arranque del segundo tiempo fue buena: Pisano por Jesús Méndez, que había estado impreciso y perdido en el medio. Aunque Longaniza no previó que el Melli Guillermo iba a mandar al frente al Grana, dispuesto a liquidar, siendo que el Rojo no esperaba esa presión. El 2 a 0 de Castellani fue la conclusión de una muy buena jugada colectica, con participación de Román Martínez, cerebro no permanente pero sí inteligente para el Mellizo.El Rojo se decidió a arriesgar pero la solidez del fondo de Lanús estaba lo suficientemente instalada como para pasar sobresaltos. Aun cuando Benítez y Pisano lograron acelerar con pelota dominada no hubo manera de dejar expuesto a Ibáñez. Otra apuesta de Pellegrino fue Aquino, quien ingresó por Albertengo. Aunque el Godoy Cruz volvió a desperdiciar la chance. Flojo y, a veces, torpe con la pelota.Ahora, Lanús esperará al que pase de la llave Gimnasia-Vélez. Lo tiene ampliamente merecido.Fuente: Olé
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