COPA LIBERTADORES
Chiquito Romero volvió a ser gigante, atajó dos penales y Boca jugará la final

Tras el 0-0 en la Bombonera, el equipo de Almirón igualó 1-1 contra Palmeiras en San Pablo y ganó desde los doce pasos por 4-2 para acceder a la definición continental ante Fluminense el 4 de noviembre en el Maracaná. El arquero Xeneize fue la gran figura, en un partido donde fue expulsado Marcos Rojo.
Pasadas las 21.30 horas, el árbitro Andrés Matonte dio la orden y se comenzó a jugar en San Pablo el partido de vuelta de la segunda semifinal de la Copa Libertadores entre Palmeiras y Boca Juniors. En la previa, la polémica estuvo focalizada en el césped sintético del estadio, algo que los argentinos argumentaron que era tener una ventaja deportiva para el local.
Los primeros minutos del partido transcurrieron con los dos equipos midiéndose y avanzando con cuidado, siendo los más penetrantes los de los brasileños, aunque Boca no perdió la calma en ningún momento.
A los 7 minutos sucedió el primer intento del Palmeiras: Remate lejano y desviado de Gabriel Menino. En esa jugada, Miguel Merentiel reclamó un golpe de Zé Rafael. Y unos minutos más tarde, hubo un remate de Gabriel Menino que tapó muy bien Sergio Romero. En el rebote, el jugador de Palmeiras Rony impactó con el arquero de Boca, que quedó sentido. De esta manera, el árbitro le sacó amarilla al delantero del local.
Finalmente, y sin perder jamás la paciencia, llegó la recompensa para Boca: a los 23 minutos apareció Edinson Cavani, quien empujó al fondo del arco un balón enviado por Miguel Merentiel tras un gran desborde por la banda izquierda. El Xeneize se imponía de esta manera 1-0 en Brasil.
La ventaja para el xeneize comenzó a desesperar a los locales: a los 31 minutos, Palmeiras lateraliza el juego sin profundidad frente a una férrea defensa de Boca Juniors; y cinco minutos más tarde Rony conectó un cabezazo a la salida de un tiro de esquina, pero su intento se marchó por encima del travesaño.
Finalmente, a los 39 minutos, Gustavo Gómez fue amonestado tras una dura infracción a Miguel Merentiel y se transformaba en el segundo de Palmeiras después de Rony.
Poco antes del final de la primera etapa, Raphael Veiga le cometió una falta a Luis Advíncula y se llevó la tercera amonestación de su equipo.
Pero aún quedaba para una más para Boca Juniors: a los 44 minutos Barco forzó a Weverton con un disparo a distancia retenido por el guardameta del Verdão.
Lo cierto es que Boca Juniors maniató a Palmeiras durante los primeros 45 minutos. Con una intensidad similar al cruce de ida, los dirigidos por Jorge Almirón afrontaron el encuentro como una verdadera final. Incomodaron al Verdão en toda la cancha, presionaron la salida, lograron recuperar pelotas en la primera línea rival y aprovecharon el único avance certero contra el área de Weverton para el 1-0 marcado por Edinson Cavani.
El segundo tiempo comenzó con una gran jugada de Valentín Barco. El juvenil sorteó la marca de dos rivales y cedió un pase en profundidad a la llegada de Merentiel. El punta realizó un tiro a las manos de Wevertón.
Sin embargo, Palmeiras rearmó su juego y durante la segunda etapa atacó a Boca por todos lados. Definitivamente, los brasileños no se iban a rendir en su propia casa.
A los 54 minutos fue el primer cambio en Boca con el ingreso de Bruno Valdez en lugar de Miguel Merentiel.
A los 58 minutos, Chiquito Romero se comenzó a vestir de héroe cuando apareció de manera milagrosa con una doble tapada a Mayke y Zé Rafael para evitar el empate, y minutos más tarde Valentín Barco intentó sorprender a Weverton con un córner olímpico, aunque su ejecución pegó en la parte externa de la red.
Las complicaciones del Xeneize comenzaron a los 66 minutos, cuando Boca se quedó con 10 jugadores: Marcos Rojo vio la segunda amonestación tras una entrada contra Kevin Macedo. Inmediatamente, Jorge Almirón dispuso la retirada de Valentín Barco por Nicolás Valentini.
Y a los 72 minutos llegó el empate con el gol de Palmeiras: Joaquín Piquerez realizó un remate de larga distancia que alcanzó Romero, pero el arquero no llegó a desviar el tiro.
La polémica del partido sucedió a los 81 minutos, cuando Boca se quedó sin ventanas para hacer cambios cuando se preparaba Campuzano. Lo cierto es que luego de que Saracchi hubiera ingresado por Fabra, Palmeiras adelantó a la reanudación del juego e impidió la realización del cuarto ingreso, que implicaba al volante colombiano en lugar de Medina. De esta forma, el Xeneize agotó las tres posibilidades que tenía para realizar modificaciones.
Finalmente, los 90 minutos terminaron en empate –otro más para Boca en esta Copa Libertadores– y se dispuso a ir a los pernales, esa instancia que parece fabricada para el Xeneize.
Comenzó pateando Boca, y le tocó sufrir ya que Edinson Cavani erró el primero, pero Romero lo rescató: le atajó el primero a Raphael Veiga y Bruno Valdez hizo el segundo para el Xeneize. Y a la hora de exhibirse, Romero atajó otro penal del Palmeiras a Gustavo Gómez.
Con la conversión de Nicolás Valentini, Jorge Nicolás Figal y Pol Fernández –que había quedado como capitán luego de la expulsión de Marcos Rojo–, Boca Juniors consiguió su ansiado pase a la final de la Copa Libertadores.
El partido fue el broche de oro de una serie soñada, a la altura de lo que hay en juego. Deberá sostener este rendimiento en la final del ante Fluminense. Podrán decir mucho, podrán decir de todo, pero lo único cierto es que Boca es finalista de la Copa Libertadores.