AHORA EN GUALEGUAYCHÚ
Condenaron a Sebastián Sire por el feroz intento de asesinato a Rocío Barrozo: cuántos años estará preso

En la audiencia del juicio abreviado que se desarrolló en la mañana de este viernes, la Justicia dio a conocer la pena que deberá cumplir el violento.
Esta mañana en los Tribunales de Gualeguaychú, se realizó la audiencia contra Sebastián Sire, el hombre de 42 años que en junio pasado apuñaló 15 veces a Rocío Barrozo mientras dormía. La mujer se salvó porque su hija intervino y eso ahuyentó al atacante.
En la audiencia, el acusado aceptó su culpabilidad, por lo que tuvo un juicio abreviado y evitó de esta manera ser sometido a un juicio por jurado.
De esta manera, Sebastián Sire fue juzgado por “Homicidio en grado de tentativa agravado triplemente, por haber sido cometido contra quien mantuvo una relación de pareja, por violencia de género y por alevosía”, además de haber sido acusado de los delitos de “violación de domicilio” y “desobediencia judicial”.
En la misma, la justicia dictaminó que el violento deberá pasar 12 años en prisión.
El feroz ataque
Hace cinco meses atrás, Sebastián Sire se metió por la ventana a la casa de su ex pareja, Rocío Barrozo el miércoles por la madrugada, irrumpió en su dormitorio y la sorprendió mientras dormía, aplicándole 15 puñaladas.
La mujer de 39 años no murió de milagro, pero sólo porque se dieron tres detalles.
La primera clave para que la víctima haya podido contar lo padecido es que su hija de 15 años se encontraba en la vivienda. Sin su presencia, otro habría sido el destino. La adolescente fue vital para que Sire no siga apuñalando a su mamá, y además para pedir ayuda rápidamente.
Eso dio paso a otro hecho determinante para que la gualeguaychuense no muera: la inmediata asistencia médica que recibió. De haberse dado la agresión en un lugar lejano a un hospital, o de haberse demorado la ambulancia, el intento de femicidio habría sido tal.
Y finalmente, la tercera circunstancia que permitió que la mujer continúe con vida fue el azar de la ubicación de los cortes y los puntazos que recibió. Si bien las puñaladas recibidas en el pecho le produjeron dos neumotórax que pusieron en riesgo seriamente su vida, sólo por una cuestión de centímetros no se comprometieron más órganos vitales, lo que habría sido imposible de soportar para la víctima.