CASO LAURTA
Confirmaron que el cuerpo hallado decapitado pertenece al chofer Martín Palacio
Las investigaciones sobre el macabro “plan criminal” de Pablo Rodríguez Laurta, principal sospechoso del doble femicidio en Córdoba y del secuestro del hijo de una de las víctimas, trajeron una nueva confirmación: el cuerpo hallado en una zona rural de Concordia, Entre Ríos, pertenece al chofer Martín Palacio, quien estaba desaparecido desde principios de octubre.
La Justicia confirmó que el cuerpo que la policía encontró en Entre Ríos es de Martín Sebastián Palacio, el remisero que llevó a Pablo Laurta el miércoles pasado.
“En un 99% el cuerpo hallado corresponde a Martín Palacios”, había adelantado más temprano el ministro de Seguridad local, Néstor Roncaglia.
Según explicó, la Policía Científica trabajó en el cotejo de los tatuajes del torso, ya que el cuerpo fue encontrado desmembrado en la zona de Yerua, a unos 35 kilómetros de Concordia.
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Laurta fue interceptado en Gualeguaychú cuando se preparaba para cruzar a Uruguay con su hijo de 5 años. La captura se produjo tras un intenso seguimiento policial y el análisis de cámaras de seguridad, que permitieron reconstruir el recorrido del Toyota en el que se movía el sospechoso. Ese vehículo luego apareció incendiado, un dato clave para la investigación.
La autopsia y los estudios de ADN serán determinantes para cerrar el círculo sobre la identidad del cuerpo hallado y avanzar en la imputación formal del detenido.
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Palacios es el remisero que fue contactado por Laurta para que lo llevara desde Entre Ríos hasta Córdoba. Vecinos de la zona contaron que vieron al acusado bajarse solo del vehículo, rociarlo con nafta, prenderlo fuego y luego alejarse caminando por un campo privado.
Un video que se conoció en las últimas horas muestra el momento en que se encontraron Laurta y Palacios. En la imagen, que pertenece a la cámara de seguridad de un local de Concordia, se ve cómo el acusado llegó con un bolso en la mano hasta el auto que estaba estacionado en la puerta del comercio.
Hubo una secuencia que llamó la atención de los investigadores: Laurta y Palacios se saludaron con un beso. Esto plantea la sospecha de que el presunto asesino y el hombre desaparecido se conocían de antemano. Ese vínculo es investigado por estas horas.