Habrán volcados de agua por la purga y mantenimiento de los pozos de cara al verano

En esta etapa, la empresa contratista Hornus S.A. ejecuta la construcción de dos cámaras de inspección en la intersección de calles Urquiza y Lavalle, un punto donde confluyen el caño de impulsión de 700 milímetros ya existente y el nuevo conducto de 500 milímetros que se extiende por Lavalle hasta el Corsódromo.

La instalación de este nuevo caño, conocido como “Caño Lavalle”, permitió aumentar el caudal y la presión de agua, lo que mejoró el servicio en los barrios Villa María, Zabalet, San Cayetano, Pueblo Nuevo, Yapeyú, Trinidad y otras zonas aledañas

Las cámaras en ejecución son estructuras de gran tamaño, con tres compartimientos cada una y una profundidad superior a los tres metros. Estas permitirán acceder a la cañería ante eventuales inconvenientes sin necesidad de romper el asfalto. El diseño posibilitará intervenciones rápidas en caso de movimientos de suelo o fallas en las uniones, lo que reducirá el impacto sobre vecinos y transeúntes.

Durante la construcción podría producirse pérdidas temporales de agua, previstas dentro del desarrollo de la obra y solucionadas una vez finalizados los trabajos. Las excavaciones se realizan de manera manual para evitar daños en las piezas ya instaladas. 

La obra del Caño Lavalle representó un desafío técnico y logístico en su inicio y hoy se consolida como una infraestructura clave para el abastecimiento de agua potable en la zona sur de la ciudad.

Además del beneficio directo en los hogares, el incremento de caudal y presión permite mejorar el suministro a instituciones y comercios de los barrios alcanzados, lo que facilita el desarrollo de actividades comunitarias y productivas que dependen del acceso a un servicio de agua estable.