Cooperativistas del Ecoparque respondieron a las críticas opositoras tras el robo
La presidenta de Eco-Gualeguaychú, la cooperativa que desde octubre de 2015 recupera, acondiciona y comercializa los desechos domiciliarios de la ciudad, habló del impacto que les significa el robo de $250 mil y del uso político que se le dio al tema. "No es lindo trabajar en la basura, y no es oro en polvo como escuché por ahí", expresó Celeste Bredle, y agregó: "hay un alto grado de irresponsabilidad con lo que se dice".
Todos los días llegan entre 15 y 18 camiones al Ecopaque, cargados con 70 mil kilos de desechos, tanto domiciliarios -que son los recuperables- como escombros, ramas y mucha basura que es imposible tratar. El promedio marca que del total se recuperan para su comercialización alrededor de 3500 kilos. De este trabajo se encarga, desde octubre del 2015, cuando se inauguró este dispositivo, la cooperativa Eco-Gualeguaychú, que pasó de 28 integrantes en sus inicios a los 55 que tiene en la actualidad.
Desde el 1° de agosto del año pasado, cuando empezó a regir la campaña oficial, impulsada por el Municipio, de separación de residuos domiciliarios, el rol de Eco-Gualeguaychú ganó mucha visibilidad.
El 30 de abril pasado de las oficinas del Ecoparque robaron cerca de 250 mil pesos, pero el hecho trascendió recién el último martes. Esto generó diverso cuestionamientos de parte de la oposición política local. La primera en expresarse fue la ex candidata a vice intendente de Cambiemos Estela Miño, quien lo hizo a través de su cuenta de Facebook y habló del "robo de fondos públicos en la Municipalidad", y de "la basura financiando a la política". Luego, desde el bloque de concejales de Cambiemos hicieron un pedido de informes al Ejecutivo para conocer los pormenores del funcionamiento, tanto del Ecoparque como el de la cooperativa que trabaja allí.
En este marco, ElDía dialogó con Celeste Bredle, quien es hace poco más de un año y medio la presidente de Eco-Gualeguaychú, conformada por la mitad de hombres y la mitad de mujeres. Ajena a las disputas políticas, que en plena campaña electoral terminan sobredimensionando tanto problemas como soluciones, Bredle explicó el funcionamiento de la cooperativa que preside, la cantidad de basura que reciben a diario y también contó por qué ese dinero estaba en el Ecoparque al momento del robo.
"No es lindo trabajar en la basura, y no es oro en polvo como escuché por ahí. Es un recurso que tenemos hasta que los compañeros consiguen algo mejor, y cuando pasa lo celebramos", aclaró, en referencia a algunas voces que se pronunciaron sobre "el negocio de la basura".
"Si bien fluctúa por las posibilidades de venta de cada mes, cada cooperativista recibe entre 9 y 12 mil pesos, nunca pasa de eso. Y estamos hablando de un trabajo insalubre, de lunes a sábado, en turnos de seis horas", aclaró.
Como todas las cooperativas de la ciudad, Eco-Gualeguaychú está contratada por la Municipalidad. Se trata de un contrato de prestación de servicios que se renueva cada seis meses. Por un lado, el Ejecutivo garantiza lo equivalente a cerca de 8 mil pesos por cada una de las 55 persona, mientras que el resto equivale a las ventas del material, que previamente es recuperado, puesto en condiciones y prensado.
¿Por qué la plata en Ecoparque?
Fue uno de los blancos de las críticas de Cambiemos. ¿Qué hacía esa cantidad de dinero en una dependencia municipal? Bredle contó que si bien la cooperativa tiene una cuenta bancaria, a ésta no va todo el dinero, sólo "el de las ventas grandes". Otra parte queda en el Ecoparque para asumir el pago a los propios trabajadores o para los gastos generales.
"La plata es nuestra, eso tiene que quedar claro. Y hace más o menos un año y medio compramos las cajas fuertes para que el tesorero, yo misma, o algún otro compañero no tenga que llevársela a su casa, para que no corra ese riesgo. Pero somos nosotros, como empresa, los que premiamos a los compañeros cuando se produce de más o cuando se cumple con el presentismo, por ejemplo", explicó Bredle, haciendo hincapié en la autonomía que tiene su cooperativa sobre las decisiones que toma.
Los 250 mil pesos que fueron robados de las dos cajas fuertes del lugar "corresponde al trabajo de casi dos meses" y "son casi 4 mil pesos por persona, que puede no parecer mucho, pero sirve para el día a día y si no está se siente fuerte", lamentó.
Por último, la cooperativista aseguró que "la organización (de Eco-Gualeguaychú) es la que corresponde: tenemos los libros al día, contador, balance, las cuentas están claras". Y "eso es lo que nos permite prestar servicio a la comunidad a través de un contrato con el Estado. Porque no lo podríamos hacer si no tendríamos todo ordenado como tenemos", remarcó. Al tiempo que invitó "a todos los que quieran saber cómo funciona la cooperativa, a que se acerquen, que nos visiten y con todo gusto les contamos".
Los $3 mil de la caja chica
Cada área municipal cuenta con una cierta cantidad de dinero en efectivo para asumir gastos corrientes menores. En el robo del 30 de abril se llevaron $3 mil que pertenecían a la "caja chica" del Ecoparque. Emilio Benetti, responsable municipal del lugar, explicó por qué ese dinero estaba en las cajas robadas.
"La mayor cantidad de dinero que se puede tener en caja chica es $3 mil, depende de las necesidades de cada área. Lo que te permite salvar alguna rotura o imprevisto, siempre y cuando el comerciante que realiza la venta expida un comprobante, una factura de tipo B o C que no supere los $700. De superarlos, hasta los $1400, tenemos que presentar tres presupuestos y la factura correspondientes", explicó.
Con respecto al robo, Benetti contó que si bien "la plata la debería tener yo encima, les pedí a los chicos dejarla en las cajas en un sobre, separada del resto", al tiempo que asumió la responsabilidad de suplir esa falta.
ESTE CONTENIDO COMPLETO ES SOLO PARA SUSCRIPTORES
ACCEDÉ A ÉSTE Y A TODOS LOS CONTENIDOS EXCLUSIVOSSuscribite y empezá a disfrutar de todos los beneficios