Dan clases en el patio porque están hartos de reclamar por un edificio educativo digno

[gallery link="file"]Los chicos de 4° A de la escuela María América Barbosa decidieron no ingresar al establecimiento educativo hasta que no estén dadas las condiciones para estudiar. Mientras tanto, los profesores les dan clases en el patio."Reclamamos por el edificio, para que de una vez por todas lo arreglen, porque anteriormente dijeron que lo iban a arreglar y eso nunca se hizo", cuestionó con total seriedad un alumno que no supera los 16 años pero que está atento a lo que ocurre con su escuela desde hace tiempo.Los casi 200 milímetros de agua que han caído en los últimos días, han hecho estragos en una escuela perjudicada por los avatares del tiempo, que tiene como únicas víctimas, a los alumnos que concurren a la escuela primaria Fray Mamerto Esquiú por la mañana y la secundaria María América Barbosa por la tarde.Desde hace tiempo que se viene informando que la situación en este edificio escolar es casi insostenible y cuando los docentes abrieron las puertas de las aulas el martes por la mañana, se encontraron con una situación límite.El agua vertía por las paredes laterales de las aulas y los cielorrasos de machimbre dejaban expuestos serios problemas de humedad, que hacen peligrar que caiga alguna madera en cuestión de tiempo."Esto lo hablamos entre todos y decidimos llegar a esto", mencionó uno de los alumnos que protestan estudiando en el patio de la escuela. "Le mandamos una notificación a la Directora donde se le explicaban las medidas que íbamos a tomar con la firma de todos los alumnos, nosotros le planteamos no entrar al aula pero seguir dando clases", comentó.Una de sus compañeras agregó que esta manifestación no la hacen solamente por ellos sino por los estudiantes de toda la escuela y los que vendrán en un futuro, porque "no se puede seguir en estas condiciones".La singular protesta se inició la semana pasada cansados por la situación que vienen arrastrando desde hace años y se acentuó con las deficiencias edilicias que dejó al descubierto la tormenta del fin de semana.