
En menos de un mes comienza la construcción del nuevo nosocomio y algunas salas del actual hospital serán las primeras en ser destruidas, debiendo trasladar a los pacientes a otro sector. Esta medida trajo malestar en la Jefa de Servicio de Salud Mental. Por Carlos Riera La novela del Hospital Bicentenario parece no tener fin. Primero fueron los vaivenes del inicio de su construcción, luego fue el comerciante ubicado en calle Urquiza, que ocupaba una porción del predio donde se emplazará el nosocomio. Ahora la noticia es la demolición del sector oeste del actual edificio, donde se ubican las salas de Salud Mental, Urología, Traumatología e Infecciosas.Esta información les fue transmitida por el Director Hugo Gorla a los Jefes de Servicio, de dichas áreas, el lunes en una reunión. De este encuentro, la responsable de Salud Mental Luisa Schmidt, salió molesta y escribió un mail a sus contactos para que difundan los "costos que tendrá el nuevo hospital".Ese malestar se debió a que en la reunión no obtuvo respuesta sobre el lugar a dónde se trasladarían sus actuales 12 pacientes de la Sala 6 una vez que se demuela dentro de 30 días. "Parece ser que tirar abajo salas de internación es lo mismo que sacar al verdulero de calle Urquiza", manifestó en el mail.Consultada Schmidt explicó su claro razonamiento: "El área más complicada es Salud Mental porque las otras son quirúrgicas y las que no son de orden clínico, pero el problema es que nosotros tenemos pacientes especiales, de características y cuidados diferentes, a dónde van a ir estos pacientes".La mujer comentó que en la reunión donde se le informó sobre la demolición de la sala donde ella trabaja, el Director no supo contestarle sobre el lugar a dónde se trasladarían aunque le advirtió que en poco se lo informaría. Schmidt destacó el trabajo de Gorla y aclaró que jamás ha tenido un problema, "Gorla como Director es excelente"."De la reunión salí impactada, con miles de interrogantes, a dónde íbamos, acá hay 12 camas, 12 pacientes, hay talleres de música, de arte, de literatura, hay psicólogos, psiquiatras, hay gente que viene ad honorem a trabajar, hay una huerta, enfermeros", manifestó la médica antes de saber cuál sería el paradero de la nueva sala 6.Una vez publicado el mail, Gorla le trajo una solución, trasladar Salud Mental a un espacio ubicado más al este del nosocomio que la mujer no quiso brindar más detalles porque todavía no está plenamente confirmado y podría ser el lugar definitivo para la sala de Salud Mental.Uno de los planteos que ha hecho esta área para el futuro es que Salud Mental no puede estar en una sala de clínica médica, en ningún hospital del país está mezclada con los pacientes clínicos o quirúrgicos, por una cuestión de seguridad hacia los pacientes mentales y hacia el resto de los internados. "Nosotros trabajamos con pacientes violentos, agresivos, tenemos custodia policial en la sala de espera", explicó la Jefa de Servicio. ¿Traumatología corre la misma suerte?- No, porque hay una diferencia, la sala de Urología y Traumatología son salas quirúrgicas y pueden ocupar camas de Cirugía que todavía no va a ser demolida, hay pasos de la demolición, el primer paso es este. ¿Se achican las camas del Hospital?-Si, nosotros nos achicamos, tenemos 12 camas y cuando pasemos transitoriamente a hacia otro servicio vamos a tener 8, se achican las camas y por lo tanto no vamos a poder recibir derivaciones de ciudades aledañas. "NO SE DEJARÁ A NADIE SIN ATENDER" Adaptación a una crisis de crecimiento La construcción del Hospital Bicentenario acarrea perjuicios necesarios al actual nosocomio, el cual tendrá que adaptarse a convivir a con demoliciones, por ende menos espacios para los enfermos.El director del Hospital Centenario, Hugo Gorla, comentó que "la construcción del hospital va a ser de todos los días y se va a ir solucionando con gestión, se está trabajando en esto y no se va a dejar a nadie sin atender pero hay determinadas problemáticas que uno tiene que entender, nosotros vamos a tener que adaptarnos a un funcionamiento para una crisis de crecimiento, la gestión no va a dejar en descubierto al enfermo que es nuestra preocupación".También le dedicó un espacio a la Jefa de Servicio de Salud Mental, Luisa Schmidt, al decir que "esos planteos se deben hacer en otro ámbito" y además dijo que no se hará nada traumático en el traslado.El Hospital Centenario recibe pacientes de distintos puntos del sur entrerriano y por ello con el inicio de las obras y la reducción de espacios del actual edificio, los profesionales deberán adaptarse a una nueva forma de trabajo. Gorla aseguró que "los pacientes de Gualeguaychú se atenderán en Gualeguaychú, lo único que hay que adaptar es la estructura, nos haremos cargo de los que tenemos que hacernos cargo, con la responsabilidad que siempre tuvimos, esto tiene un hecho final y es el Bicentenario".