Destrozos en el estadio de Central Larroque

Culminado el partido que Larroque le ganó a Defensores en el fortín se sucedieron una serie de hechos en la parcialidad visitante que terminaron con destrozos en las instalaciones del local.Esto ocurría instantes después de culminado el cotejo entre Central Larroque y Defensores del Oeste. Rostros desencajados rompiendo todo, tumbando la tribuna, prendiendo fuego.Nos preguntamos, ¿sirve invertir en mejoras de un estadio cuando ocurren este tipo de desmanes?, ¿quién pagará los gastos?, ¿qué se debe hacer en estos casos?.Hay que seguir dándole lugar a estos mal llamados "hinchas" que esperan cualquier oportunidad para romper si total no es de ellos y como seguramente lo harán en su cancha.No les importa nada de nada. Nada del esfuerzo por mantener un club, nada por colaborar con el espectáculo. La bola se sigue y los disturbios también y si gritamos para que nos escuchen rápidamente salen las voces al por mayor "¡ah, no sabíamos nada..." "o yo lo mencioné en mi programa pero viste no nos dan bolilla...".No será hora de empezar a ajustar las cinchas de una vez por todas. Mantener un club cuesta mucho dinero para que vengan dos o tres "mal arreados" y te hagan pelota todo.Perdón pero debía decirlo no puedo dejar pasar esto. Quiero al club y lo defiendo como defendería a cualquier institución si veo como se destroza.N.de R.:  Al término del partido se lo vio muy ofuscado al presidente de Central Larroque, Walter Paul, debido al daño que sufrieran las instalaciones del club. Dialogó con su par de Defensores a quien le informó que en la reunión (se celebra hoy) de tablas en la liga, elevará una nota con los gastos que demande dejar en condiciones el sector destinado a la parcialidad visitante "Ni un peso más, ni un peso menos. Lo que tengamos que reponer en alambrada y demás, será lo que elevaremos "dijo el presidente "rojo" muy molesto, y hasta dejando a un costado el triunfo de Central Larroque que le permitía arribar a la punta en soledad".Según se supo un móvil policial (camioneta  del grupo operacional especial) sufrió la rotura de la luneta, espejo retrovisor y daños en el lateral izquierdo, por efectos de la pedrada que arrojara un sector minúsculo de la hinchada de Defensores (los menos) cuando se retiraban del estadio. Acorde a informes dignos de crédito  la policía  habría actuado preventivamente y no utilizaron  postas de goma.Los daños en las instalaciones fueron varios. Se comenta que desaparecieron sillas del vestuarios y que otras fueron incendiadas y hasta la cuna en donde se coloca la leña para hacer asados habría desaparecido. En definitiva actos de vandalismos, de los cuales tendría que hacerse cargo la dirigencia de Defensores, por culpa de un grupo que no entiende lo que es el deporte. Se habla que inclusive algunos de ellos tendrían antecedentes judiciales.Ricardo Elena