MUNDO
Egipto, el don del Nilo
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Esta afirmación surgió hace un tiempo en los libros de historiadores o cuentacuentos. Es que claramente lo que permitió a Egipto convertirse en el Imperio que resultó ser por muchísimos años, fue el poder del río que lo atravesaba. Sirvió como fuente inagotable de recursos y como centro comunicativo entre las distintas regiones del país. Sus crecidas y sequías marcaron las épocas de gloria del país hasta que se supo de verdad como sacar su provecho. De Dios incontenible a medio controlable; esta es la historia del Nilo y de cómo afectó el camino de una nación desde sus inicios.
Si piensas en un viaje a Egipto, debes saber que el Nilo es el mayor río de África y uno de los más largos del mundo. Sus 6600 kilómetros atraviesan más de diez países. Aunque la fuente de cómo se originó sigue siendo un misterio para la comunidad científica, lo que nos queda son los resultados que generó a lo largo de los años, para el desarrollo de ciudades y para el desenvolvimiento geográfico de toda la región. Desde las primeras épocas faraónicas hasta mediados de los ‘60, las crecidas anuales marcaban las buenas épocas, para los habitantes vecinos del Nilo. El ritmo de sus riquezas era llevado por el caudal de agua inconsistente de tal río. Cuenta la leyenda antigua, que un famoso faraón soñó con el Dios Jnum. Este le pedía que le construyera monumentos, templos y que realice sacrificios; y que de esta manera las graves sequías culminaron. El faraón se propuso a juntar los materiales para la estructura de sus edificios y cuando terminó con su levantamiento, el río creció de repente brindándole años de buena fé al pueblo egipcio. Todo este folclore o desarrollo religioso terminó cuando en 1970 se construyó la gran presa de Asuán. Con esta arquitectura modernísima para la época, se acabó con las inundaciones y las sequías para siempre. La agricultura de toda la región se volvió mucho más fértil. Fue en este momento categórico, que el río pasó de ser el Dios Hapy a un engranaje más en el progreso de una nación.
Ya conociendo un poco más la historia del antiguo Egipto, sus vivencias religiosas y su actualidad más secularizada, nos podemos adentrar en el hoy por hoy de esta gran nación. Es verdad, que años atrás el río servía simplemente para conectar distintos lugares del planeta, facilitar mercados y controlar los cultivos de la región. Hoy ese servicio del río para con la sociedad, se potencia un poco más. La cultura egipcia es muy reconocida a nivel mundial. Las películas de Hollywood llevaron las historias de Tutankamón y de Cleopatra a convertirse en saberes populares. El interés turístico fue creciendo de allí en más. Fue tal ese fenómeno, que ahora una de las principales actividades e ingresos de dinero para la nación, es gracias al desarrollo turístico. Asimismo, se ha apostado y se han realizado inversiones para mantener la infraestructura de los monumentos milenarios y para establecer una estructura social que pueda aguantar la cantidad de pasajeros y visitantes que llegan al país año tras año. Así se inauguraron nuevos hoteles, alojamientos alternativos y agencias comerciales que bancan el movimiento constante de recién llegados. Es una plataforma muy extensa, pero solo de esta manera se logra satisfacer toda la demanda insistente. Cada vez existen más puestos de trabajo en relación a esta renovación.
Así como se empezó a ver a Egipto como una fuente inagotable de recursos turísticos, el Nilo también cumplió con su tajada. Se modificaron los antiguos puertos y se embellecieron las fronteras del río para establecer ciertos márgenes de nivel internacional. Los cruceros por el Nilo, se han transformado en una recomendación segura de los hogareños para con los turistas. Son muy demandados y las reservas deben hacerse con muchos meses de anticipación.
Los viajes comienzan y terminan en la capital, El Cairo. Algunos cruceros duran un par de días, otros suceden por semanas. Lo cierto es que los itinerarios comienzan en el Cairo pues el inicio se destaca por el recorrido de lugares emblemáticos para la historia del país; y eso se encuentra en la capital. Allí se explora el barrio antiguo, la ciudadela, la metrópolis y las mezquitas más famosas. Una vez culminado nuestro recorrido inicial, nos subimos al buque y comenzamos a navegar. Más información acerca de un crucero por el Nilo aquí.
Para comenzar, los cruceros tienen distintos rangos de precios, pero la mayoría cuentan con un lujo exuberante en su interior. La gastronomía es de primera clase, elaborada en cada zona que se visita con ingredientes particulares y frescos de origen local. Los chefs suelen preparar hígado de ternera u otros platos típicos egipcios. Siempre acompañados por vinos egipcios, que son de los más finos del planeta.
La primera parada suele ser en la ciudad de Luxor. Allí encontraremos el Templo de Karnak, uno de los monumentos mejor conservados de esta zona. Bordeando el río, recorriendo ciudades, avistando aves y distintas faunas locales, nos balanceamos por el Nilo, visitando Asuán, la Gran Esfinge y las pirámides de Guiza. Durante todo el camino, recibirás clases de historia sobre la Primavera Árabe y la presidencia de los Hermanos Musulmanes. Poco a poco te irás adentrando en la cultura egipcia. Para cuando vuelvas a El Cairo, hablarás como un local prácticamente.
El cine fue nuestro primer educador en cuanto a la historicidad de esta gran nación. Las novelas de Agatha Christie han marcado a muchas generaciones. Desde la primera versión hasta la nueva, donde Kenneth Branagh encarna el mítico papel del detective Hercule Poirot. Pero así como la vida cinematográfica nos enseña, la muerte también lo hace. La concepción egipcia de la muerte, distinta a la occidental que tenemos, nos da en qué pensar. Las tumbas que vemos durante este viaje, los restos momificados de Tutankamón, las tumbas faraónicas del Valle de los Reyes, la tumba de la reina Nefertari y los paisajes que rodean a las mismas, tal vez terminen con nuestro adoctrinamiento fanático. Más allá de las vistas y el tiempo de relajamiento, no hay nada más preciado que volvernos de unas vacaciones con preguntas por responder y enseñanzas por aplicar. Egipto, seguramente nos dará ambas.
