HABÍA UNA VEZ…
El Circo Rodas llegó a Gualeguaychú con un espectáculo cargado de magia, alegría y color

Es uno de los espectáculos circenses más tradicionales del país y están en la tura hace casi 40 años. El martes pasado debutaron en nuestra ciudad con un show premiado en tres categorías de los Estrellas de Mar 2020. Una oportunidad única para volver a ser un niño y disfrutar como si no hubiera un mañana.
Desde esta semana, el paisaje en la Costanera del Tiempo tiene un nuevo elemento que alegra a todos los nostálgicos de los buenos tiempos. Es que en el ingreso a esa zona, detrás de lo que será el Mercado Municipal del Munilla, la carpa más grande de la Argentina anuncia que a Gualeguaychú llegó el Circo Rodas, una verdadera institución del mundo circense que está a punto de cumplir 40 años de recorrido itinerante por todo el país.
“Nos hemos sentido muy bienvenidos a la ciudad. El mundo del circo sigue teniendo esa magia que hace que todos se vuelvan a ilusionar. Tenemos un espectáculo que no sólo asombra a los niños, sino que es para todas las edades. Son muchos los adultos que vienen a presenciar las funciones y se van felices con el espectáculo”, relató a ElDía el productor del Circo Rodas, Marcelo López Lanza.

Lo cierto es que los que vayan al circo vivirán durante dos horas 14 números artísticos de primer nivel. A los tradicionales equilibristas, trapecistas y magos, se le suma uno de los números que es una marca registrada del Rodas: “El círculo de la muerte”. En esta estructura metálica cinco motociclistas desafían a la muerte con acrobacias en dos ruedas, mezclando las piruetas dentro del globo metálico con saltos temerarios en rampas gigantes. Un número donde acróbatas y público viven con la adrenalina al 100%.
En el debut en Gualeguaychú, el Circo Rodas vendió más de 1600 entradas, un número nada despreciable teniendo en cuenta que fue un martes, al mismo tiempo en el que Boca debutaba en la Copa Libertadores de América. “Dicen que Dios es argentino y cirquero, así que nos debe estar acompañando”, aseguró risorio López Lanza.
El espectáculo que se presenta ahora en nuestra ciudad obtuvo tres nominaciones para los Premios Estrella de Mar 2020, que otorga la ciudad de Mar del Plata tras su temporada de verano. Por supuesto, se quedaron con el premio mayor en las tres categorías. Las ternas fueron: Mejor espectáculo variedades, Mejor Vestuario (Isabel Díaz), y Revelación, por el trabajo del Payaso Cachipuchi.

Son precisamente los momentos en los que ingresa a la arena el Payaso Cachipuchi en los cuales conviven las risas estridentes y la emisión a flor de piel. Con sus números, que oscilan entre lo inocentón y lo picarón, genera una química inmediata con los espectadores. Con 19 años, Cachipuchi es una persona que sabe que nació para ser payaso, y el disfrute en su interpretación denota que encontró su lugar en el mundo en la carpa del Circo Rodas.
Una vida itinerante
Cuando pasás la vida en el camino, viviendo un tiempo en cada lado, la troupe del circo deja de serlo para transformarse en una familia. Los que viajan a tu lado son tus amigos, cómplices y todo. Aun así, esto no quiere decir que vivan aislados.
“Cada vez que llegamos a un lugar estamos dispuestos a ser parte de la comunidad. Y en este sentido, Gualeguaychú nos recibió con las puertas abiertas. Hay que tener en cuenta que con nosotros viajan niños y adolescentes, y jamás dejan de ir a la escuela. El tiempo que estemos en una ciudad, ellos se integran a la vida escolar, generando nuevos amigos, que ahora con las redes sociales pueden seguir manteniendo un vínculo aunque sea virtual”, contó el productor del Circo Rodas a ElDía.

El tiempo que tuvieron que parar por culpa de la pandemia fue muy duro: acostumbrados a estar siempre en movimiento, finalmente había llegado un freno que no pudieron evitar.
“Cada uno de nosotros nos pusimos a trabajar de lo que pudimos. Hemos vendido pochoclos por los barrios, usamos los camiones y camionetas para hacer fletes, hemos hecho de todo. Inclusive, algunos han hecho más plata trabajando fuera del circo que adentro. Sin embargo, cuando pudimos volver a armar la carpa y a montar el espectáculo, ninguno eligió seguir su propio camino y todos volvimos al circo”, confesó.

“Ese es el espíritu de la familia circense. Estamos todos comprometidos a dar el mejor espectáculo, de hacer felices a todos los espectadores, regalarles un momento inolvidable. Y es por eso que decidimos venir a Gualeguaychú, porque queremos no sólo ofrecer un show único, sino que queremos también disfrutar de esta comunidad”, concluyó Marcelo López Lanza.
Horarios
- De lunes a jueves a las 21 horas
- Viernes y sábado: a las 18.30 y a las 21
- Domingo: a las 16, a las 18.30 y a las 21