ZARATE
El horrendo final de Morena: La mató y violó su madrastra por celos
María Ludueña reconoció el Crimen y aseguró que le molestaba el "favoritismo" que su marido tenía por la víctima.
La historia parece salida del horror de una película de terror. Morena Morena Nazareth Lavin Vergara tenía 13 años cuando fue violada y asesinada por María Ludueña, su madrastra. La mujer le confesó el crimen al fiscal Alberto Gutierres.
Ludueña, aseguran fuentes del caso, reconoció su culpa de forma completa, sin incriminar a su marido. Ante Gutierres, aseguró que golpeó a Morena con “un palo”, que luego incendió, luego de que la menor orinara su cama el día de su muerte. También usó el objeto contudente para golpearla en la zona genital. No era la primera vez que lo hacía: Ludueña reconoció que sentía profundos celos de Morena ya que Lavin tenía “un favoritismo” por ella, en vez de la hija que los dos acusados tenían en común. La había azotado en ocasiones anteriores por diversos motivos.
Lavin se limitó a asegurar que no estaba en la casa al momento del crimen. Sin embargo, ante las preguntas de Gutierres, admitió que su mujer le reconoció el crimen y que reconoció que le introdujo “el palo” a Morena en sus zonas íntimas.
Si bien el cuerpo presentaba a simple vista golpes, cortes y quemaduras en varias partes, la primera versión que recibieron los efectivos de parte de su padre y su madrastra es que la joven se autoflagelaba y que cuando le avisaron que se iba a vivir con su mamá supuestamente tomó un cóctel de pastillas para quitarse la vida. La mujer le confesó el crimen al fiscal Alberto Gutierres.
La autopsia despejó cualquier duda. Según el informe forense, Morena tuvo una muerte traumática: había sido golpeada y tenía una hemorragia externa. También se descubrieron lesiones compatibles con una violación.
La calificación del caso es al menos extensa: “Homicidio calificado por el vínculo, por ser progenitor y guardadora respectivamente, y ser garantes de la vida de la víctima, por alevosía, por ser causado por un hombre a una mujer mediando violencia de género y por producir acceso carnal por vía anal y vaginal mediante el uso de objetos o partes del cuerpo que ha realizado un ascendiente y guardador, realizado por dos personas contra una menor de 18 años de edad, aprovechándose de la situación de convivencia preexistente con la misma, de lo cual resultó la muerte de la persona ofendida, en concurso ideal”.
La situación familiar de Morena era muy conflictiva. Su mamá, gravemente enferma, no había podido hacerse cargo de ella, por lo que la tenencia había quedado desde el año pasado a cargo de su papá, ahora detenido por el crimen. En esa casa, según el relato de otros parientes, vivían además de Morena y los dos sospechosos, otras dos menores: R., de 16, y A., de 5, sus hermanastras.
Según explican desde su familia, Lavin había formado pareja hace ya varios años con Ludueña y había decidido cortar lazos no solo con sus hijos sino con toda la familia de sus mujeres anteriores.
Fuente: Infobae