
La semana pasada alertábamos sobre los peligros a los que estamos expuestos en los espacios públicos. Enumeramos algunos a los que durante meses no se les ha dado solución, entre los que estaban dos "estacas" en punta de señales de tránsito rotas: una frente a la escuela Caseros y la otra frente a una juguetería.Ambos casos constituían un peligro inminente. Y decimos "constituían" porque afortunadamente el municipio tomó nota y a mediados de semana realizó las tareas correspondientes quitando las peligrosas maderas en punta.Hoy se puede observar que la estaca frente a la escuela no existe más y en el caso de la juguetería -a la vuelta del municipio- no solo se quitó, sino que además colocaron una nueva señal que indica la proximidad a la rotonda.