TEMPORADA COMPLEJA
El repunte del río Gualeguaychú dejó a familias rodeadas de agua y a prestadores turísticos sin poder trabajar
La sudestada constante que se experimentó en la jornada del domingo, hizo que el nivel del río ascendiera estrepitosamente y de forma continua, lo que lo posicionó en 3,88 metros según informó la página de la Municipalidad. Cristian Magne, responsable de Defensa Civil informó en Ahora Cero que no hay evacuados y que la semana se presenta “con un descenso mantenido”.
Desde el área de Defensa Civil habían advertido de esta situación y la posibilidad de que el río llegara a los 4 metros. Sin embargo, si bien en pocas horas el nivel creció significativamente, no llegó a la altura esperada.
Cristian Magne adelantó que “El panorama para esta semana es un poco más alentador, sabíamos que el viento nos iba a llevar a los 4 metros, pero era factible que cuando cambiaran los vientos fuera descendiendo un poco. Salto Grande comunicó que va a empezar a erogar menos agua, unos 19 mil mm por segundo, por lo que va a haber un descenso mantenido en la semana”.
Es imposible hacer futurología con respecto a qué pasará con el río, pero lo que sí se tiene por cierto es el gran impacto que produce en los vecinos y prestadores ubicados en sus cercanías.
“En el Camino de la Península el 100% de los prestadores están afectados, y en el de la Costa, si bien por el frente el agua no ha llegado, si por los fondos y los termina inundando. Hay un porcentaje pequeño que ha trabajado. Muchos manifiestan que han tenido que devolver reservas”, indicó el responsable de Defensa Civil.
“Va a ser una temporada compleja en cuanto a los prestadores, porque algunos ya han hecho una erogación económica muy grande, 10 centímetros para los prestadores es mucho.
Y uno quiere ser alentador y respetuoso, porque las condiciones no son las mejores. Y con un panorama a corto plazo, no descendería más allá de los 3,40, sigue siendo un panorama complejo para quienes trabajan con la prestación de playas también”, amplió sobre los efectos de la creciente el responsable de Defensa Civil.
Por otra parte, hay personas del Camino de la Costa que están rodeadas por el agua, algunas incluso la tienen dentro de sus hogares pero todavía no se quieren evacuar mencionó Magne. No obstante, ni bien alguna de las 16 familias que se encuentran en estado crítico quiera evacuarse debe armarse rápidamente el centro de evacuación.
“La posibilidad está latente siempre y cuando ello lo soliciten. Por el momento, nosotros les estamos llevando asistencia en salud, algunos medicamentos que necesitan y en alimentos”, mencionó.
Dentro de una semana asumirá el presidente electo y junto con ello se reorganizará el organigrama municipal. Hasta el momento, Magne manifestó que no le afirmaron que seguirá al frente de Defensa Civil pero tampoco le manifestaron lo contrario.
“Nosotros somos empleados de planta y seguimos trabajando, el intendente electo no me ha transmitido nada, lo he cruzado en los pasillos y me ha felicitado por la labor que venimos haciendo. Para sacarnos tendrían que desafectarnos del área y mandarnos a otra. Y si viniera otro jefe, me tocaría secundarlo”, explicó Cristian Magne.
En tanto, el lunes el río amaneció por debajo de la línea de evacuación, y a las 8 de la mañana se posicionó en 3,76 metros. Mientras que se mantuvo estable durante toda la mañana, y en horas de la tarde se ubicó en los 3,77 mts.
La opción que proponen los privados
Uno de los sectores más afectados por la crecida es el Camino de la Península, el cual está conformado en su gran mayoría por prestadores turísticos que ven restringida su actividad.
De hecho, una propietaria de un complejo contó a Ahora ElDía que desde el 13 de noviembre que no puede trabajar.
En medio de este contexto, Eduardo Rubel, dueño de uno de los complejos turísticos del Camino mencionó que “yo vengo insistiendo hace mucho con la temática porque si tuviéramos el nivel del camino que venimos reclamando hace muchos años, nosotros podríamos trabajar, seríamos operables. La Península es un valle de inundación, hicimos la charla con Hidráulica y la Municipalidad, entra más agua que la que sale por el Puente Méndez Casariego. Por lo que tendría que haber un canal aliviador, eso evitaría las crecidas dela cuenca del Gualeguaychú, no así del Uruguay. Nosotros con 30 o 40 cm de relleno en el camino podríamos ser operables, esa es la realidad, esa es la diferencia que no nos deja trabajar”.
En este sentido, Rubel manifestó que estuvieron reunidos con el nuevo intendente electo al cual le presentaron un temario para trabajar en una solución definitiva a esta problemática: “Tenemos que ir a un escenario compartido entre el privado y la política y los técnicos de hidráulica para dar una respuesta de mediano y largo plazo, porque las inversiones se degradan y tampoco entra dinero a la ciudad. Esto hay que ponerlo sobre la mesa, nosotros hemos hecho tres presentaciones en años anteriores y algunas reuniones hubo pero no pasó de eso. Yo creo que la nueva administración debe tener esto presente, y trabajar todos dentro de la cuenca. Con 20 centímetros menos podríamos trabajar”.
Y concluyó: “No hay turismo si no hay hoteles, si no hay restaurantes, si no hay cabañas, entonces hay que tenerlo como uno de los puntos fundamentales de desarrollo”.