LLUVIAS Y SUDESTADA
El río Gualeguaychú podría crecer aún más: qué altura alcanzaría y a cuántas familias afectará
Durante las primeras horas del viernes se espera que llegue un aluvión de agua que hará repuntar de golpe la altura del río. Se trata de las precipitaciones que acontecieron en el centro de la provincia, más específicamente en la zona de Villaguay. Por el momento, son diez las familias evacuadas en el Regimiento, pero este repunte podría afectar a unas 100. Por último, el Ejército analizó el estado del puente del arroyo “La Capilla”, camino a Ñandubaysal, y determinaron que su estado no es bueno.
Siguen los dolores de cabeza con la creciente del río Gualeguaychú: a la sudestada sufrida estos últimos días, que hizo subir considerablemente la altura de las aguas, los expertos ahora advierten que durante la jornada del viernes llegaría a la ciudad las precipitaciones caídas en el centro de la provincia, más específicamente en Villaguay, que es donde está la parte alta de la cuenca.
Para complicar más el escenario, se suma el crecimiento del río Uruguay, la lluvia caída en los afluentes del río y la posibilidad de una nueva sudestada, además del estado actual del cauce. Son todos indicios de un escenario complejo para Gualeguaychú y sus habitantes.
Es por esto que fuentes municipales informaron a Ahora ElDía, a más tardar la mañana del viernes, el río podría llegar a una altura de, por lo menos, 4,70 metros, lo que podría obligar a que muchas familias que viven en el Camino de la Costa, en el de la Península y en el barrio Munilla –además de otras zonas aledañas al río– tengan que ser evacuadas.
El que tampoco es optimista es el intendente Mauricio Davico. "Tenemos 10 familias evacuadas y calculamos que en las próximas 36 horas tendremos 100 como mínimo. Hoy el río está en 4,20 metros, pero esperamos que llegue a los 5 metros. Cayó mucha agua en la cuenca, pero a eso también hay que sumarle la sudestada, que no deja desembocar. A eso también se le suma que el río no se ha dragado en los últimos 30 años y hay un tapón de arena".
En conclusión, este repunte de como mínimo 4,70 metros –y que el intendente calcula que podría llegar a los 5 metros– que se espera para el viernes podría complicar en demasía la situación de emergencia que se vive en la ciudad, ya que podrían comenzar a ser afectadas unas 100 familias –entre 500 y 600 personas–, por lo que desde la Municipalidad trabajan para tener todos los mecanismos posibles de contención y ayuda en caso del peor escenario.
Actualmente, son diez las familias evacuadas en el Regimiento siendo asistidas por el personal del Ejército. Para asegurar su estado y ofrecer una contención adecuada, todos los evacuados están siendo asistidos por personal de salud del Municipio.
"Ya hicimos un centro de evacuación en el Regimiento. Estamos haciendo gestiones a nivel nacional y provincial, porque en la Municipalidad no encontramos nada, ni un kilo de arroz. Y luego lo que quedará cuando baje el agua, que destruye todo. Son muchos barrios afectados", concluyó Davico.
Acciones del Ejecutivo
El martes al mediodía, en el salón del Honorable Concejo Deliberante (HCD), se realizó una reunión entre funcionarios, concejales y especialistas para abordar el comportamiento del río Gualeguaychú y la probabilidad del aumento de su caudal.
Durante el encuentro, Defensa Civil remarcó la complejidad de la situación del río a partir del relevamiento de los parámetros de estudio.
En la reunión, los especialistas hicieron un análisis de las distintas situaciones que pueden ocurrir y dejaron en claro que es difícil establecer una relación progresiva de evacuación por la falta de relevamiento en los últimos seis años.
Por otra parte, desde la subsecretaría de Salud se realizó un análisis de la situación epidemiológica actual y se definió el abordaje que se debe realizar a partir del crecimiento del caudal para evitar enfermedades.
El puente camino a Ñandubaysal
Por otra parte, personal del Ejército Argentino realizó una evaluación técnica al puente que pasa por encima del arroyo “La Capilla”, en el camino que lleva a Ñandubaysal, y el pronóstico no fue el mejor ya que consideran que no está en buen estado, a tal punto que hace unos días debieron interrumpir el tránsito por el riesgo de que suceda un accidente o, lo que hubiera sido peor, una tragedia.
El personal del Ejército había sido alertado por los prestadores turísticos que están en la zona, quienes reclaman una solución para poder trabajar este verano.