En abril lo atraparon por robar un celular y ahora lo condenaron por golpear a su hija de 12 años

Luis María Zapata violó reiteradamente las medidas de exclusión del hogar que le dictó el Juez de Familia luego de golpear y lesionar a una de sus siete hijos. Fue llevado a juicio y recibió 7 meses de prisión efectiva, pero esta condena se sumó a otra en vigencia y se unificó todo en 1 año y dos meses de cárcel.Zapata ya había recibido una condena de prisión condicional a principios de mayo por el tiempo de un año. El 1 de abril, un joven de 23 años estacionó su Citroën Berlingo en Teresa Margalot y Boulevard Daneri, y bajó unos segundos hasta un kiosco sin pensar que por dejar la ventanilla baja le iban a hurtar su teléfono celular.El damnificado alcanzó a observar que un hombre en una moto tipo cross y con la camiseta de Boca Juniors se introdujo en la camioneta y sacó su teléfono. La víctima se dirigió a su casa a fin de activar el rastreador satelital del teléfono y con la ayuda del personal policial de la Comisaría Cuarta, se inició la búsqueda del delincuente. La Policía llegó hasta la playa de estacionamiento del hipermercado Carrefour, pero el sistema de rastreo marcaba una nueva posición, en la zona de Lapalma y San José, a donde concurrió el móvil policial y detuvo a Luis María Zapata, con el celular en su poder.Para ese momento, Zapata registraba una probation en vigencia porque el 2 de enero de 2015, junto a otros dos sujetos, ingresó al predio donde funcionó el Cabaret 63, ubicado en calle boulevard Daneri 563. Allí sustrajeron tres cabreadas de hierro de unos 6, otra de 3 metros y dos hierros de 9 metros, cuando fueron sorprendidos por la Policía.Pero ahora fue nuevamente condenado y debido a sus antecedentes la pena fue de cumplimiento efectivo, que ya cumple en la Colonia Penal El Potrero. El hombre de 35 años fue imputado de lesiones leves agravadas por el vínculo, violación de domicilio en grado de tentativa, violación de domicilio (2 hechos), amenazas simples y desobediencia judicial (5 hechos).El más grave de todos ocurrió el 13 de mayo, cuando acudió al domicilio en el que convivió con la madre de sus hijos por 18 años, en el barrio 21 de Septiembre, y tras mantener una discusión con su ex pareja, le propinó golpes en el rostro a su hija de 12 años, la tomó del cuello y la empujó, y luego continuó golpeándola hasta ocasionarle una lesión en la nariz y un hematoma en la frente.Se le dictó la exclusión del hogar, pero Zapata siempre volvió y trató de ejercer su fuerza por encima de las mujeres que habitaban en la casa. Pero el 26 de junio pasado, mientras su ex pareja estaba en la vivienda, Zapata llamó por teléfono y le preguntó a la mujer si se encontraba sola. Ella le respondió que no, pero dos minutos después se apareció en la casa. Entró de improviso, la abrazó y con fuerza la alzó y la llevó hasta la habitación de los hijos, donde se desabrochó el pantalón, sin llegar a tocarla, gracias a la llegada oportuna de su ex cuñada. Cuando llegó la Policía, Zapata ya no estaba, pero fue bien detallado en la denuncia todo lo ocurrido y esto logró que fuera llevado nuevamente ante la Justicia.
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