
El oficialismo cuenta con mayoría automática en el Concejo Deliberante de la Histórica. Sin embargo, ya comienza a sentir los cimbronazos de la interna del peronismo. Del otro lado, una oposición atomizada lentamente comienza a reagruparse y unir fuerzas. Por Adrián Pino El Día de Uruguay La dispersión política que muestra el Concejo Deliberante de Concepción del Uruguay es el fiel reflejo de la crisis de representatividad que se vive en Entre Ríos y el país. Los 12 concejales están divididos en 5 bloques diferentes, lo que muestra a las claras la profundidad que alcanza la crisis de los partidos políticos y el reacomodamiento de fuerzas de este presente.Un oficialismo con mayoría automática -incluso para aquellos temas que requieren mayoría especial- y una oposición atomizada que lentamente comienza a reagruparse, conforman la postal actual del Concejo Deliberante de La Histórica.El reparto en 2007La elección de 2007 arrojó como resultado la victoria del Frente Justicialista para la Victoria en concepción del Uruguay que permitió la reelección del intendente Marcelo Bisogni y la obtención de siete bancas en el Concejo Deliberante.La segunda fuerza fue la Concertación Cívica Uruguayense que obtuvo tres bancas y le siguió el Frente para la Victoria (la denominada Lista 100 que encabezó Julio Solanas a nivel provincial) que se quedó con las dos bancas restantes. Hasta entonces, el Concejo Deliberante mostraba un escenario dividido, con un oficialismo que mantenía la mayoría en el cuerpo deliberativo pero enfrente se organizaba una oposición que tenía fuerza suficiente para hacer valer sus votos en los temas más delicados de la administración municipal, que exigían mayoría especial.Una ruptura prematuraSin embargo, a poco de andar comenzaron las fracturas que, con el tiempo, se fueron profundizando. La Concertación Cívica Uruguayense no llegó a asumir siquiera con los aliados políticos unidos, y el Encuentro Amplio Entrerriano (sector que conduce el ex diputado nacional Juan Carlos Lucio Godoy) rompió relaciones con la UCR y conformó su propio bloque unipersonal a cargo de la contadora María Elena Gile. Así, antes de empezar la actividad legislativa se terminaba la primera alianza electoral con dos bancas en manos de la UCR y una banca para el Encuentro Amplio.El segundo cimbronazo para la oposición vino con el reacomodamiento del peronismo, aunque la primera ruptura se originó por cuestiones más domésticas que partidarias: las diferencias de Fernán Galotto con su jefe político Fidel Baldoni, lo llevaron a cerrar filas con el oficialismo, tentado por el Scelzismo que quería tener quórum propio y mayoría especial para los asuntos más vidriosos. Así fue como cooptaron una de las bancas del sector opositor dentro del peronismo local y desde entonces, en vez de siete, cuentan con los votos de ocho concejales.La escribaníaLa borocotización del concejal Galotto (como lo catalogó la prensa local) dejó desmembrada a la oposición que, además de sus problemas domésticos, perdía peso al momento de las votaciones ya que el oficialismo contaba con su propia mayoría automática para aprobar sin debate las ordenanzas y proyectos.Desde entonces, el Concejo Deliberante de Concepción del Uruguay se ha convertido en una suerte de "escribanía" -para emular la expresión sobre el rol del Congreso en tiempos de mayoría del oficialismo K- que trabaja al ritmo de las necesidades del Departamento Ejecutivo, demorando meses enteros para debatir proyectos presentados por la oposición y unas pocas horas para sancionar las ordenanzas que vienen con pedido expreso del oficialismo.El único escenario que puede romper este vacío de discusión, deberá provenir de la propia crisis del peronismo entrerriano: la división Urribarri - Busti promete cambiar la nomenclatura del bloque que el peronismo opositor mantiene en el Concejo, para pegar en la banca el nombre de "Peronismo Federal". A ello puede sumarse el alejamiento de algunos concejales del oficialismo que hoy intentan esperar todo lo que puedan antes de definirse, a sabiendas que, más tarde o más temprano, deberán "retornar a las fuentes" o jugarse a todo o nada con el tándem Bisogni/Scelzi-Urribarri-Kirchner.Mientras tanto, la oposición local parece comprender más que nunca la necesidad de mantenerse unidos y comienzan a reconstruir lo dañados lazos que permitieron conformar la Concertación Cívica Uruguayense en 2007, una versión local anticipada de lo que más tarde fue el Acuerdo Cívico y Social
La presidencia del Concejo y la dinastía Scelzi La asunción de los nuevos miembros del Concejo Deliberante de Concepción del Uruguay trajeron, como novedad, la aparición en la escena política local de Carlos María Scelzi, el último de la dinastía que controla el PJ uruguayense desde los años 70.A pesar de la dinámica inicial que prometió imprimir al Cuerpo, el nuevo presidente del Concejo Deliberante, Carlos María Scelzi junior (nieto de quien fuera tres veces intendente e hijo del actual caudillo del PJ uruguayense) no hizo más que repetir el esquema de trabajo que ha sostenido el oficialismo en la última década: un ritmo frenético que no admite dilaciones ni debates cuando la urgencia viene de la mano del gobierno, y un letargo que desespera a la oposición y los ciudadanos más comprometidos cuando los asuntos resultan inconvenientes para el oficialismo.Sus chances de convertirse en candidato a intendente para 2011, si bien no han sido descartadas oficialmente, han quedado truncas ante los yerros cometidos al frente del Concejo Deliberante, lo que ha llevado a su padre, Carlos "Teta" Scelzi a preservar a su último exponente de la familia. El actual reparto de las bancasPJ: siete bancasLealtad Peronista: una banca (aliado del oficialismo)UCR: dos bancasEncuentro Amplio: una bancaFrente para la Victoria: una banca (aliado de la oposición)