
Foto: Joaquín García
Cuando cayó el sol se prendieron las luces y de esta forma se encendió lo que se dio a llamar "La llama de la Democracia". El monumento está emplazado en la Costanera, y del acto participaron referentes de todo el arco político de Gualeguaychú.
Por Amílcar Nani
Por un momento, en Gualeguaychú sucedió algo que se había transformado en impensado: durante un lapso de tiempo y en un mismo lugar, referentes políticos de todos los partidos de la ciudad convivieron sin reproches y dejando de lado todo tipo de grieta. La excusa no fue para menos: ayer se inauguró el Monumento a la Democracia, un monolito diseñado para homenajear al sistema político que puso fin a la dictadura más sangrienta y genocida de la historia argentina.
Todo comenzó pasada las 19 en Costanera, donde está emplazada la construcción. Aún era de día y tras leerse los saludos de parte de los ausentes -entre ellos el gobernador Gustavo Bordet, el Diputado nacional Juan José Bahillo y el intendente de Pueblo Belgrano Mauricio Davico- comenzó formalmente el acto.
El intendente Martín Piaggio se refirió a la Democracia como algo valioso que hay que aprender a cuidar: "Este monumento significa que esta historia fundamental esté siempre viva, que no se pueda olvidar. Es todo un privilegio tener un sistema político como la Democracia, que ya lleva 35 años consolidándose. A los más jóvenes les cuesta mucho imaginar que el sistema político sea otro, y eso es el producto más fuerte que la Democracia nos ha dejado".

Foto: Joaquín García
El viceintendente Jorge Maradey no sólo recordó en su discurso lo difícil que fue la recuperación de la Democracia sino que puso énfasis al rol que tuvo la Multipartidaria Nacional, una acción política conjunta integrada por la Unión Cívica Radical, el Partido Justicialista, el Intransigente, el Demócrata Cristiano y el Movimiento de Integración y Desarrollo, que tuvo como objetivo presionar a la dictadura militar.
El mismo concepto rescató el presidente del comité local de la Unión Cívica Radical, Dario Carrazza: "Posiblemente, la Multipartidaria haya sido la única política de estado que ha tenido este país, porque si algo nos caracteriza a todos los políticos de este país, sin importar el partido, es la necesidad de que nunca más alguien nos robe la Democracia".
Además de Maradey y Carrazza, entre los oradores estuvo también Leonardo Posadas, referente de la juventud radical; Osvaldo Fernández, presidente del Partido Generación para un Encuentro Nacional (GEN); Omar Sosa, de Unidad Ciudadana y Ricardo Rodríguez, presidente del Ateneo de Gualeguaychú.

Foto: Joaquín García
Y entre los presentes, además de prácticamente todo el Gabinete municipal y los ediles oficialistas, también estuvieron presentes al comienzo de la Costanera del Tiempo el concejal del bloque Cambiemos Pablo Echandi y Micaela Rodríguez y los integrantes del bloque UNA Andrés Sobredo y Marcela Yedro.
Las palabras de todos los que hablaron tuvieron un común denominador, el rescate, el recuerdo y la exaltación de la figura de Raúl Ricardo Alfonsín, el primer presidente electo tras la dictadura y al cual varios llamaron con el sobrenombre más reconocido del caudillo radical: "El padre de la Democracia".
El presidente Alfonsín fue un personaje clave para que la época más oscura de la historia argentina llegara a su fin, y fue el que supo entender mejor que nadie la necesidad de esa sociedad argentina cansada de opresión: el volver a las urnas e introducir un concepto que fue inflexible: juicio por tribunales civiles a los militares, verdad y justicia.

Foto: Joaquín García
El acto concluyó con el encendido de la luminaria, la cual representó la llamada "Llama de la Democracia", y todo el arco político multipartidario de la ciudad descubrió la plaqueta que explica el motivo del monumento con una frase simple, conocida por muchos y que nunca más debe ser olvidada: "Con la Democracia se come, con la Democracia se educa, con la Democracia se cura", la promesa de campaña de Alfonsín que lo llevó a la presidencia en 1983.