En primera persona: "Levanté con mis manos lo que hoy es mi hogar”
En sus horas libres las mujeres trabajaron duramente en la construcción de lo que hoy es su hogar. Levantaron cimientos y paredes, revocaron, pintaron, colocaron las cerámicas en los pisos de cocina, baños y piezas, colocaron techos, machimbre y demás.En síntesis todos los trabajos inherentes a una construcción que demandó poco más de dos años. La mayoría no tenía idea de lo que era una cuchara de albañil, una pala, una plomada, un balde, pero con el correr del tiempo se fueron familiarizando con los elementos de trabajo y pueden decir con orgullo "Levanté con mis manos lo que hoy es mi hogar".Ivana Reyes, vecina del barrio, una de la que autoconstruyó su casa dijo que se trató de una "experiencia única, y si bien nunca había trabajado en tareas relacionadas con la construcción, aprendí y acá está el producto de un esfuerzo que nos demandó mucho tiempo". Destacó que "cuándo podíamos trabajábamos 8 horas y cuando no entre 3 y 5 horas".Recordó que la obra arrancó en "abril del 2016" y que lo hicieron con "muchas ilusiones, la de contar con la llave de nuestra casa, sueño que hoy- por ayer- se hizo realidad".Ivana vivía en la casa de su suegra en una "habitación y un baño que hicimos en lugar". Agregó que se anotó en el año 99 "cuando estaba embarazada de mi hijo mayor".Por su parte María José Morán, alquilaba en Villa María, destacó que es una "bendición contar con un techo propio y no pagar más una renta que me demandaba $5000 al mes ". Comentó que tiene cinco chicos, el menor de "tres años.Norma González, vecina del barrio, recordó que "vivía en una casa prestada". Expresó que no pagaba alquiler y que ahora tiene que abonar una cuota por la vivienda, algo que "haré con gusto porque no hay nada igual que vivir en tu casa, máxime si la levantaste con tus manos. Fue algo que nunca olvidaré, porque todas aprendimos a hacer un pozo, colocar un ladrillo, el techo con las piernas temblando arriba de un tablón".Silvina Núñez, fue la encargada de " armar los hierros, tarea que aprendí muy bien", señala y agrega que junto a Silvia "hicimos la instalación eléctrica".Marta Rébora, alquilaba en la zona del Hipódromo contó que en la "construcción de las casas hacía de todo un poco, fundamentalmente levantar paredes".Paula Altamirano señaló que "por suerte llegamos al día que tantos anhelábamos". Agregó que trabajó en "distintas tareas, dado que arranqué como la mayoría de cero. Era lo que se dice "peón de albañil", nada de tareas de terminación de obra".Marina Martínez se crió en el barrio donde hoy están las viviendas, pero habitaba una casa que le prestaban en el barrio de la Cuchilla. Por fortuna "puedo dejar de pagar el alquiler que cada día se me hacía más costoso".Silvia Doello, madres de dos varones, abuela de dos nietos y una nuera, dejará el barrio Fiorotto donde habitaba para "vivir en mi casa y cumplir el sueño de toda persona".Barrio "12 de abril"El nombre elegido para el barrio, por ser la fecha en la que comenzaron con las obras, en 2016.
ESTE CONTENIDO COMPLETO ES SOLO PARA SUSCRIPTORES
ACCEDÉ A ÉSTE Y A TODOS LOS CONTENIDOS EXCLUSIVOSSuscribite y empezá a disfrutar de todos los beneficios
Este contenido no está abierto a comentarios