En un insólito hecho detienen a un presunto violador en una casa
Una persona imputada en un hecho de violación ocurrido en la ciudad de Gualeguay, fue detenida ayer por un gran despliegue policial en un insólito hecho que alteró la tranquilidad de una familia del barrio Cover.
En horas de la tarde, alrededor de las 15, se realizó un allanamiento con resultado negativo en una vivienda ubicada en calle Tropas y Fleming, en busca de un hombre acusado de violación.Tras este acto, los uniformados fueron alertados por los vecinos que la persona buscada merodeaba barrios aledaños. Enterados de esto se dirigieron hacia una vivienda ubicada en calle Marcos Iroz en el barrio Cover, porque el delincuente se encontraba escondido debajo de la cama en la que duermen los dueños de la propiedad.Según relató Horacio González, propietario de la vivienda, su mujer se encontró con el delincuente en la puerta de su hogar, donde le pidió "por favor que lo escondieran porque lo perseguía una veintena de vecinos para lincharlo". La mujer se asustó al verlo y corrió hacia la casa de su vecino mientras el fugitivo se metió dentro de la vivienda ingresando por el fondo.Los vecinos que lo buscaban intensamente recorrieron la periferia del hogar y las casas aledañas, mientras González miraba televisión en su habitación ignorando lo que ocurría en el exterior.Según la hipótesis del dueño de casa, el delincuente ingresó sin ser percatado por ninguno de sus dos hijos que se encontraban en el interior de la vivienda, y se escondió en el baño. Cuando su mujer vuelve a la casa y lo alerta de lo que ocurría afuera, ignorando la posible presencia del delincuente en el interior, González sale de la habitación para observar lo que sucedía, momento en que el delincuente aprovechó para cambiar su escondite: se acurrucó debajo de la cama matrimonial.Uno de sus hijos se percató sobre la posible presencia del fugitivo dentro de la vivienda y lo buscó debajo de la cama. Al verlo dio aviso inmediatamente a su padre y este a la Policía que ingresó a la casa y detuvo al hombre de 36 años que quedó a disposición de la Justicia.Un gran susto se llevó esta familia que el pasado martes también volvió a sufrir un episodio de inseguridad. Delincuentes quisieron robar su lavarropas pero debieron desestimar el hecho al ser oídos por los dueños de casa que rápidamente dieron aviso a la policía.
En horas de la tarde, alrededor de las 15, se realizó un allanamiento con resultado negativo en una vivienda ubicada en calle Tropas y Fleming, en busca de un hombre acusado de violación.Tras este acto, los uniformados fueron alertados por los vecinos que la persona buscada merodeaba barrios aledaños. Enterados de esto se dirigieron hacia una vivienda ubicada en calle Marcos Iroz en el barrio Cover, porque el delincuente se encontraba escondido debajo de la cama en la que duermen los dueños de la propiedad.Según relató Horacio González, propietario de la vivienda, su mujer se encontró con el delincuente en la puerta de su hogar, donde le pidió "por favor que lo escondieran porque lo perseguía una veintena de vecinos para lincharlo". La mujer se asustó al verlo y corrió hacia la casa de su vecino mientras el fugitivo se metió dentro de la vivienda ingresando por el fondo.Los vecinos que lo buscaban intensamente recorrieron la periferia del hogar y las casas aledañas, mientras González miraba televisión en su habitación ignorando lo que ocurría en el exterior.Según la hipótesis del dueño de casa, el delincuente ingresó sin ser percatado por ninguno de sus dos hijos que se encontraban en el interior de la vivienda, y se escondió en el baño. Cuando su mujer vuelve a la casa y lo alerta de lo que ocurría afuera, ignorando la posible presencia del delincuente en el interior, González sale de la habitación para observar lo que sucedía, momento en que el delincuente aprovechó para cambiar su escondite: se acurrucó debajo de la cama matrimonial.Uno de sus hijos se percató sobre la posible presencia del fugitivo dentro de la vivienda y lo buscó debajo de la cama. Al verlo dio aviso inmediatamente a su padre y este a la Policía que ingresó a la casa y detuvo al hombre de 36 años que quedó a disposición de la Justicia.Un gran susto se llevó esta familia que el pasado martes también volvió a sufrir un episodio de inseguridad. Delincuentes quisieron robar su lavarropas pero debieron desestimar el hecho al ser oídos por los dueños de casa que rápidamente dieron aviso a la policía.
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