Femicidio de Daiana Mendieta: a un mes de su asesinato, amigas reclaman justicia y alertan sobre el miedo

Se cumplió un mes del femicidio de Daiana Mendieta, la joven de 22 años de Gobernador Mansilla, cuyo asesinato conmocionó a la comunidad. Mientras el dolor persiste, sus amigas y seres queridos sostienen los pedidos de justicia y lanzan un llamado de alerta a otras mujeres de la región.

El único imputado por el crimen es Gustavo Pino Brondino, también vecino de Gobernador Mansilla. Brondino se encuentra cumpliendo prisión preventiva. Canal 9 Litoral visitó la ciudad y habló con las amigas de la víctima.

Daiana desapareció el viernes 3 de octubre. Al día siguiente se comenzó una intensa búsqueda y el domingo 5 se allanó la casa de Brondino, el imputado se resistió a la autoridad policial durante un allanamiento en su domicilio, llegando a apuntar a los uniformados con un arma e intentando quitarse la vida.

El martes 7 recién se halló el cuerpo de Daiana en un aljibe en la zona rural de Mansilla. Hasta el día de hoy el celular de la joven no ha sido hallado.

La fiscal Emilce Reynoso de Rosario del Tala recibió los informes de autopsia que demostraron que la joven murió de un golpe y que fue asesinada el mismo viernes que despareció y que se cruzó con Brondino.

El dolor y la fe en la justicia

Para el círculo íntimo de Daiana, este mes transcurrido ha sido “muy duro”. Cecilia y Naira aseguraron a Canal 9 Litoral que todavía no logran asimilar ni entender por qué le ocurrió el suceso. La familia directa de Daiana ha decidido reservarse y no aparecer en los medios, pero mantiene un contacto constante con sus allegados.

A pesar del profundo dolor, los familiares confían “mucho en la justicia”. Están seguros de que las autoridades condenarán al culpable con todo el peso de la ley, una esperanza compartida por las amigas de la víctima.

“Yo nunca [la vi con el imputado]. Creo que es por el hecho de que uno como persona hay ciertas cosas que no les cuenta a sus amigos por miedo a que lo van a juzgar. Hay cosas que se las guarda para uno solo”, dijo Cecilia.

“Tal vez [lo conocía] porque por lo que tengo entendido alquilaba un galpón ahí atrás de la casa de Daiana. Ella nunca nos lo nombró”, señaló Naira. 

El mensaje final de sus amigas está dirigido a la sociedad y a las mujeres, instándolas a la precaución y a la comunicación: “Que se cuiden y que hablen. Si ven indicios raros con personas cercanas, una mínima amenaza, una intensidad, una obsesión, que lo agarren y lo hablen, así sea con una amiga, con una hermana, con quien sea. Si un día pasa algo, es por donde se empieza”.