Gesto para destacar

Sr. DirectorEste sábado 22 por la noche, 11 egresados del Colegio Nacional Luis Clavarino recibidos en el año 1974 pudimos reecontrarnos. 40 años han pasado y como no los había visto desde entonces, me costó reconocer a algunos y a otros sincerarme y decirles que no me acordaba su nombre. ¿Vos quién sos?, tuve que con vergüenza que preguntar. También me tocó escuchar "¿Vos sos Mario Roscher?".  El domingo al medio día, luego de sacar algunas fotos del querido Colegio y de visitar otros lugares significativos, fuimos con mi esposa a la costanera para almorzar. En un local pedimos una pizza. Luego de hacer el pedido y calcular lo que tendría que abonar, me di cuenta que no tenía conmigo la billetera. Le pregunté a mi esposa si ella tenía dinero, así me evitaría tener que ir al auto para buscar mi billetera.Mientras disfrutábamos lo pedido, se acercó directamente a nuestra mesa una joven y me preguntó: ¿Ud. es Roscher? La miré sorprendido y en centésimas de segundo concluí que no podría ser una ex compañera. Tal vez alguna hija de algún condiscípulo, o quien sabe... "Sí", le dije, y en ese instante colocó sobre la mesa mi billetera. Tamaña sorpresa sólo me permitió preguntar: "Donde estaba?", "Al lado de un auto estacionado", contestó. "Muchas gracias" alcancé a decir pues ya se alejaba rápidamente como había llegado.Ella supo de quién era por la foto del DNI que estaba en la billetera, pero se tomó el esfuerzo y la cortesía de buscarme por los locales de la costanera para asegurarse de entregarla en mano del descuidado dueño.Yo sabía bien cuánto dinero había en mi billetera y qué documentos están en su interior. Todo estaba allí.Mi agradecimiento a esta joven desconocida es grande, en especial por ahorrarme las muchas molestias que conllevan tener que reeditar todas la tarjetas. Ha sido un fin de semana de hermosos reecuentros.Mario Eugenio Roscher