PLAN INTEGRAL PARA REDUCIR SINIESTROS
Gualeguaychú recibirá fondos de Naciones Unidas para mejorar la seguridad vial

El proyecto apunta a reducir la siniestralidad en la ciudad mediante intervenciones urbanas, campañas de concientización y medidas de inclusión para personas con discapacidad. De su implementación, que comenzará con las primeras acciones a partir del mes que viene, participarán instituciones públicas, académicas y sociales.
La ciudad de Gualeguaychú fue seleccionada para recibir financiamiento del Fondo de las Naciones Unidas para la Seguridad Vial (UNRSF) con el objetivo de llevar adelante un plan integral de ordenamiento territorial orientado a mejorar la seguridad vial. El proyecto, ya aprobado por la ONU, fue diseñado por la Licenciada en Ciencias Sociales y especialista en desarrollo territorial y urbano Silvina Cabrera. Fue en el marco de su trabajo final para la Maestría en Desarrollo Territorial y Urbano de la Universidad Nacional de Quilmes.
El plan contempla una serie de intervenciones orientadas a reducir la siniestralidad en el tránsito urbano. Entre otras medidas, incluye el rediseño de zonas de alto riesgo, la incorporación de señalética adaptada, la creación de ciclovías y zonas de baja velocidad, la adaptación de espacios para personas con discapacidad, y la implementación de campañas de concientización. También se prevé la creación de un Observatorio Vial Municipal, que permitirá recolectar y analizar datos actualizados para planificar políticas públicas más eficaces.
“La financiación efectiva se va a hacer a través de la Universidad de Quilmes, como institución que respalda mi trabajo. Existe en este momento una nueva revisión de las condiciones y los fondos, que debían estar disponibles para fin de año o principios del 2026, pueden ser que se demoren unos meses más hasta que la situación se destrabe. De igual manera, la idea es ir avanzando en la articulación de las instituciones locales. Ya teniendo la aprobación del proyecto podemos trabajar a partir de julio, así que se va a empezar a trabajar con las reuniones con el diagnóstico efectivo. Si bien ya hay un diagnóstico prioritario, también se va a trabajar ahora con las distintas instituciones, entonces vamos a tener un segundo diagnóstico real”, explicó Cabrera.
Asimismo, adelantó que, debido a las complejidades de la planificación y la participación entre distintas instituciones, se conocerán detalles sobre el monto específico que será invertido en la ciudad una vez que el proyecto se encuentre en etapas más avanzadas.
La ejecución del proyecto requerirá una articulación amplia entre organismos públicos, académicos y sociales: “Estarán involucrados la Universidad, la Agencia Nacional de Seguridad Vial, el Observatorio Vial y el Ministerio de Transporte de la provincia, la Dirección de Tránsito municipal e instituciones que trabajan en esta temática: Aciverjus, familiares de víctimas, la Asamblea CERR 20 y otras entidades que ya aportan estadísticas. También se prevé el involucramiento del sistema judicial, la policía y el Hospital Centenario. La convocatoria a todas estas instituciones se formalizará a fines de junio mediante un evento en la ciudad, en el que se presentará el proyecto y se definirán los mecanismos de cooperación”, explicó Cabrera.
Una dimensión destacada del proyecto será la inclusión de personas con discapacidad. “Va a haber una especial intervención de las escuelas técnicas a través de fabricación de dispositivos para la discapacidad que tengan que ver con la seguridad vial”, afirmó. Esta tarea se realizará en articulación con el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), que capacitará a estudiantes y docentes. Entre los dispositivos a desarrollar figuran señalética en braille para cruces peatonales, cartelería con alto contraste visual y semáforos con sistemas auditivos.
El plan tendrá una duración estimada de dos años, desde julio de 2025 hasta 2027. Durante ese período se elaborarán tres informes de avance que serán remitidos a la ONU, a la Agencia Nacional de Seguridad Vial y a la Municipalidad. Finalizado el proyecto, se entregará un informe conclusivo con el análisis de los datos estadísticos relevados antes y después de la implementación de las medidas.
El proyecto aprobado busca responder a los desafíos de una ciudad que ha visto crecer su parque automotor en un contexto de urbanización desordenada e infraestructura vial deficiente. A través de la articulación interinstitucional y la implementación de políticas públicas sostenidas, la propuesta apunta a reducir la siniestralidad en al menos un 20%, alineándose con los Objetivos de Desarrollo Sostenible promovidos por Naciones Unidas.