Le ganó a Tiro Federal por la mínima diferencia y se ubicó como único escolta de la Zona Norte, a dos puntos de Guaraní Antonio Franco. A los 16 minutos del segundo tiempo Joaquín Cabral le dio la victoria al equipo del Beto Acosta.Juventud tenía que ganar y ganó. Hace cuatro fechas que el Decano no festejaba un triunfo y, para la alegría de su gente, recuperó la memoria en el momento justo. Enfrente estuvo Tiro Federal de Rosario, uno de los que están prendidos al pelotón de la clasificación.Acosta paró los mismos once que trajeron un valioso punto la semana pasada desde Tucumán y, al igual que ante el Santo, fueron la determinación y la actitud de los de Gualeguaychú -más que el vistoso juego asociado de otros partidos- las que inclinaron la balanza a su favor.Otra vez, la columna vertebral del equipo fue la última línea decana. El trabajo de López y Hereñú por las bandas fue prácticamente impecable. Contuvieron los ataques del visitante, que por momentos mostró buen juego asociado pero sin inquietar el arco de Rébora, y cuando vieron el blanco se mandaron por sus bandas para mandar el centro al área.Las dos torres de atrás, Marchesini y Wernly, fueron los dueños del fondo. Anularon al lungo Armani durante todo el partido y obligaron Tiro Federal a probar desde lejos. Por el lado de Rébora, aunque suene repetitivo, hay que decir que el número uno tuvo una tarde perfecta. Los rosarinos tuvieron dos o tres oportunidades clarísimas de gol, pero se chocaron siempre con la seguridad de quien se perfila para ser el mejor de la categoría.Como en cualquier estructura, los cimientos firmes dan tranquilidad y confianza. Y la defensa decana fue soporte de un medio campo que tuvo en Cristian Fornillo a la gran figura del partido, y de una delantera que aprovechó la única jugada realmente clara que tuvo para convertir: tras una habilitación deliciosa de Juan Domingo Sánchez, Cabral la paró dentro del área, se sacó a un defensor de encima y, con la parte interna del botín derecho, puso el 1 a 0 que iba a ser definitivo para hacer estallar en un grito a toda la cancha.Después de varios intentos truncados, el 9 la mandó a guardar, se descargó y gritó el gol, por primera vez, junto a la parcialidad decana. Nunca más oportuno el tanto del ex Flandria.Después de la apertura del marcador el encuentro ganó en intensidad. Tiro Federal no se resignaba a irse de Gualeguaychú con las manos vacías, pero tropezaba una y otra vez con el bueno de Rébora. Primero, tras un tiro libre en la puerta del área que Zárate ejecutó con precisión maradoniana, el uno atenazó la redonda sin dar rebote. Después lo tuvo Galvaliz, pero otra vez Rébora se quedó con el empate de los rosarinos.A medida que pasaban los minutos la temperatura aumentaba, dentro y fuera de la cancha. A 15 del final Cabral se dejó caer en medio del círculo central acusando una lesión, pero Tiro continuó con la pelota. La jugada terminó en una fuerte infracción de Hereñú en el borde el área decana y un tumulto entre jugadores de uno y otro lado. Una imagen repetidísima en las canchas del fútbol argentino. Tan repetida como la determinación de Lobo Medina: el juez amonestó al lateral por la patada y expulsó a un jugador por bando. Dos que habían tenido un buen partido, Pereyra del lado local y Zárate del visitante, dejaron a sus equipos con diez.Los últimos minutos del encuentro mostraron a Tiro Federal yendo sin demasiadas ideas y a Juventud buscando de contra. El pitazo final del tucumano fue celebrado por todo el estadio. Es que el Decano volvió a ganar después de cuatro partidos y se prendió a lo más alto de la zona.Son nueve los puntos que quedan en disputa y con el triunfo de ayer los de Acota se metieron al bolsillo tres puntos clave para la clasificación.
