CONSECUENCIA DEL COVID-19
La ciudad, sin cigarrillos: La emergencia de los fumadores
La entrega de cartones de cigarrillos a despensas, almacenes y kioscos disminuyó considerablemente en los últimos días. Desde que comenzó la cuarentena, las empresas tabacaleras no trabajan y, en consecuencia, la falta de oferta se comenzó a sentir fuerte luego de vendido el stock. Esta mañana, en un kiosco del centro una distribuidora llegó con unas pocas cajas que se vendieron en pocos minutos.
“Hola, tiene cigarrillos”. Es, sin dudas, la pregunta más frecuente en los kioscos de Gualeguaychú por estos días. Los fumadores recorren los negocios de la ciudad en búsqueda de “algo”, ya sin preferencias respecto a marcas. “Las tabacaleras no están trabajando”, explicó a ElDía un kiosquero, y enseguida tuvo que dar la misma respuesta a una persona que ingresó en búsqueda del tan preciado producto. Cerca de las 10.30 de este martes, el empleado de una distribuidora llegó con unas cajas de cigarrillos. No muchas. Enseguida la gente comenzó a preguntar nuevamente. “Recién recibimos algunos cartones, tenemos que actualizar los precios para luego ponerlos a la venta, con la particularidad de que se comercializará un paquete por persona”, explicaron en el comercio de 25de Mayo y Rocamora, que en un par de horas se volvió a quedar sin cigarrillos.
“De cada 10 personas que ingresan, 8 preguntan por puchos”, contó Alejandro Morali, propietario del kiosco, y señaló que “el viernes, cuando se nos acabó el poco stock que teníamos comenzamos a vender tabaco suelto y habanos”. “Es posible que en el transcurso de la semana llegue tabaco suelto, pero respecto a los cigarrillos no sabemos cuándo va a volver todo a la normalidad. Se dice que en las tabacaleras están adelantando vacaciones, suspendiendo personal, debido que hasta mediados de junio no se reanudaría la actividad”, comentó. Es posible que en el transcurso de la semana llegue tabaco suelto, pero respecto a los cigarrillos no sabemos cuándo va a volver todo a la normalidad Como cada vez que hay escasez, la situación es “especial”. Marcas que estaban “relativamente baratas llegan a cualquier precio”, contó el kiosquero. Las cigarreras tienen una lista de precios que en la ciudad, como en tantas otras, no se respeta por el bajo margen –un 4%, aproximadamente– de ganancia. “Con ese escueto porcentaje hay que tributar y esperar que no haya una suba en el precio final que, normalmente, como me pasó en esta última entrega, anda entre el 8 y el 10%, porcentaje que supera al magro 4%. Cada tres meses sube el precio, razón por la que es imposible trabajar como las cigarreras quieren”, indicó. Ante esta situación, en la ciudad se conformó un grupo de kiosqueros que tiene su propia lista.ESTE CONTENIDO COMPLETO ES SOLO PARA SUSCRIPTORES
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