
El metro cuadrado está en $18 mil, pero sube si el trabajo está alejado. Pegó fuerte el recorte en obras públicas por parte de Nación. Cal, cemento, cerámicas y pintura se incrementaron en un 30%. Ante este panorama, nadie quiere construir y esperan tiempos mejores.
Tras la devaluación y la escalada del dólar, la comercialización en corralones y casas dedicadas a la construcción sufrió una merma considerable. Esto repercutió con fuerza en el sector, que termina el año con uno de los peores números negativos en las últimas épocas, y no es un único factor el que afecta la situación, sino que son varios, al punto tal que el metro cuadrado cotiza actualmente, como mínimo, en los $ 18 mil.
Según un relevamiento realizado por ElDía, las ventas se estancaron en los corralones de la ciudad. "Los que pensaban agrandar su casa, hacer alguna reforma o construir desde cero decidieron esperar a que pase este momento económico", señaló una persona allegada al rubro.
Otro de los factores que golpeó a la construcción fue la decisión del Gobierno nacional de recortar las obras públicas, pero también la incertidumbre que genera el presente con respecto a la toma de deuda. "El vecino tiene cierto temor a tomar créditos, como el UVA, especialmente por las tasas que en esto momento son muy elevadas. El que tiene algún dinero prefiere ponerlo en el banco y aguardar a que la tormenta pase. La situación que vivimos los argentinos no seduce demasiado como para meterse en un crédito, que se sabe es prácticamente imposible afrontar, salvo que una familia tenga tres o cuatro ingresos para sostener ese compromiso de pago mensual", sostuvieron en uno de los corralones de la ciudad.
Gualeguaychú supo tener hasta 15 comercios dedicados a los materiales de construcción, pero en lo que va del año dos corralones decidieron cerrar sus puertas; todo producto de la crisis y del profundo ajuste en el desarrollo de la obra pública.
Otro de los materiales que más se han incrementado es el hierro, que aumenta a la par de la suba del dólar; mientras que la cal, el cemento, las cerámicas y la pintura experimentaron una suba del 30% aproximadamente en los últimos meses.
Por otra parte, se ha resentido la cadena de pago: "Se prioriza el abono de servicios y la compra de alimentos antes que hacer frente a deudas en casas que venden materiales", se quejaron los vendedores de corralones.
Por su parte, David Pereyra, maestro mayor de obras, señaló que "el momento que vive el sector es complejo, pero tengo la esperanza de que esto se reactive. A mi entender, los motivos de la crisis son varios: la caída en el poder adquisitivo y la falta de dinero hace que la gente priorice lo básico en una casa y postergue algunas refacciones o ampliaciones que tenía pensado realizar".
"Algún trabajo menor se hace, pero en lo que refiere a construcciones mayores muchas obras se han detenido por la falta de dinero, por el aumento de los materiales y de la mano de obra", detalló.
Otra de las quejas de los constructores es que en las casas de venta de materiales de construcción también especulan con la crisis actual: "Hoy vas a comprar una varilla de hierro y está al mismo precio que cuando el dólar trepó a los 42 pesos, pero ya no está más a ese precio, sino a $37, pero el precio es el mismo: si sube un material por la escalada del dólar, entonces aumenta, pero cuando la moneda estadounidense baja, no acomodan los precios como debería", se quejó.
Por su parte, los albañiles y los peones (los que llevan el balde, hacen la mezcla y usualmente cobran por semana según los días que pudieron trabajar) decidieron unirse a las cooperativas de trabajo impulsadas por el municipio local. Gracias a estas iniciativas, muchos pudieron tener trabajo estable como el que realizaron en la construcción de la Comisaría Novena o las recuperaciones que se hacen de los diferentes espacios públicos de la ciudad.
"Es difícil hacer un presupuesto hoy en día para determinada obra, sobre todo porque por la inflación es constante el aumento de los materiales. Hoy en día, el metro cuadrado no baja de los 18.000 pesos, pero este precio depende de la zona. Si la obra se encuentra en una zona alejada, los costos se incrementan por el traslado de los materiales y del personal", señalaron desde los corralones locales, quienes luego concluyeron: "La construcción mueve mucho la economía y cualquier obra demanda contratar tres o cuatro personas".