La gualeguaychuense María Laura Broggi llegó a la cumbre de la montaña más alta de África

María Laura Broggi cumplió otro de sus grandes desafíos como montañista y -junto a un grupo de nueve argentinos, más tres guías locales- llegó a la cumbre del Volcán Kilimanjaro, la montaña más grande de África, que se halla a 5.895 metros sobre el nivel del mar y está ubicada al Noroeste de Tanzania, cerca de la frontera con Kenia.

La travesía comenzó el sábado 30 de agosto y culminó este jueves 4 de septiembre a las 7.25 (hora local, 1.25 en nuestro país), cuando la gualeguaychuense y sus compañeros de aventura llegaron al pico más alto del continente africano.

En comunicación con Ahora ElDía, Broggi compartió su vivencia en el Monte Kilimanjaro y expresó sus sensaciones de lograr el ascenso a una nueva cumbre, como lo hizo en febrero cuando escaló los 6.962 metros del Cerro Aconcagua en Mendoza.

“Fue experiencia de seis días increíbles y emocionantes. Las personas de África son muy humildes y serviciales, porque en todo momento se preocuparon en que estemos bien y disfrutemos el ascenso. Su idioma es el suajili, pero hablan perfectamente inglés, así que nos comunicábamos por esa lengua. Sin el acompañamiento de ellos, los guías, y de todo el equipo, hubiese sido difícil lograrlo”, describió.

Sobre los sentimientos que le produjo llegar a la cima del Kilimanjaro, expresó: “Fue una emoción muy grande, una sensación de gratitud por todo lo que vivimos los cinco días previos. Había montañistas de todo el mundo, más de cien personas nos cruzamos en todo el ascenso. Me siento una bendecida de poder vivir esta experiencia, como así también disfrutarla y compartirla con la familia y amigos, que desde Gualeguaychú me apoyaron y me brindaron su mensaje de aliento”.

María Laura Broggi cumplió con los dos objetivos que se propuso como aventurera extrema para este 2025: escalar el Cerro Aconcagua y el volcán Kilimanjaro. “La diferencia está en los ecosistemas y en los climas. En el Kilimanjaro arrancamos en una selva y terminamos en un glaciar. Atravesás experiencias muchas más intensas en comparación con el Aconcagua. Son dos montañas hermosas, pero de esta me llevo la calidez y la humanidad con la que vivimos el ascenso”, comparó a modo de cierre.