La macabra historia del árbol que se cayó en una plaza de Paraná

Este martes a las 5.15 se quebró uno de los árboles más históricos de Paraná. Se trata de un ejemplar de Encina, ubicado en la Plaza 1° de Mayo, en inmediaciones a la esquina de Peatonal San Martín y calle 25 de Mayo.

Según supo AHORA, la Encina es uno de los tres ejemplares que quedaron originarios de la plaza, cuando fue creada en el siglo XIX. Estiman que debe tener casi 200 años y de allí se explica su deterioro y "proceso de pudrición".

Tras los daños parciales en el árbol, desde la Municipalidad de Paraná indicaron que se presentará un ingeniero especializado que definirá si se puede retirar sólo la parte quebrada o si debe ser retirado en su totalidad. Dependerá ello de la estabilidad con la que quede.

Según las primeras observaciones, el árbol ya se presentaba ahuecado por dentro, deteriorado por el paso de los años.

La macabra historia de los árboles de la plaza

La Encina es parte de la historia de Paraná. Innumerables acontecimientos han sucedido durante décadas en la Plaza 1° de Mayo, con diferentes generaciones que han disfrutado de la sombra o se han sacado fotos por ser una de las postales de la ciudad.

Pero además, este árbol ha sido testigo de macabras historias. A principios y mediados del siglo XIX, la Plaza 1° de Mayo fue escenario de ejecuciones. Los árboles eran utilizados para los ahorcamientos, que luego se continuaron en la Plaza Sáenz Peña.

Uno de los hechos más recordados fue la ejecución del Comandante Gregorio Piris, soldado y patriota entrerriano iniciado en la milicia al lado del general Francisco Ramírez. Por resistirse al Gobernador de Entre Ríos Sargento Mayor Lucio Mansilla, éste dispuso tal "escarmiento" para sofocar la reacción de muchos sectores del pueblo entrerriano.

La Plaza sufrió con el paso de los daños diferentes modificaciones, con la plantación de distintas especies, algunas de las cuales crecieron desde semillas.