María es una de las tantas víctimas de la violencia machista. Sólo quiere vivir en paz junto a sus hijos y dejar de ser hostigada por su expareja. "Primero es un grito, un empujón, hasta que me agarró del cuello". Tiene dos hijos y una vida complicada y atravesada por la violencia. Denunció a su ex pareja por las constantes agresiones y ahora vive un calvario.María conversó con ElDía desde Cero y dijo que "vive angustiada, preocupada porque durante el día puedo hacer la vida normal pero de noche este muchacho se alcoholiza. Estás con las antenas paradas esperando lo peor: que te pateen la puerta, que te vengan a abrir las ventanas, que genere violencia en la casa".Ella vive junto a sus dos hijas en Pueblo Belgrano. Las pequeñas tienen 4 y 7 años y ya han vivido más de un episodio de gritos y golpes.La víctima contó que a sus hijas "medianamente se le explica para que sepan de la situación que estoy viviendo; yo trato de protegerlas porque es mi prioridad en este momento. No puedo permitir que él le haga vivir la vida que me está haciendo vivir a mí". ¿Cuándo cambió la relación con tu pareja? -Supuestamente él es alcohólico; fue incrementando esa situación a partir de hechos sucedieron a él y a toda la familia, pero él tampoco se deja por su familia porque no se acepta como enfermo. Entonces uno lucha con eso y no hay forma. Si el enfermo no se quiere curar, no tiene sentido. ¿Cuáles son los primeros momentos en que te das cuenta que debés cortar la relación?-Cuando la situación se va a las manos y hay violencia. Primero es una discusión, un empujón, pero después me agarró del cuello, me dio una trompada y no podés seguir viviendo así. Se fue incrementando. Hace 4 años que viene esta situación, no es de ahora que me pongo a denunciar: ya tiene muchas denuncias y causas en el Juzgado de Familia.Medianamente llevo esta situación, pero hay momentos que me siento sola, no tengo ayuda de nadie. Ahora me metí en la asociación sin fines de lucro Las Juanitas. Ellos me ayudan bastante mediante pedagogos, psicólogos, el abogado. Te dan una mano. Te abren diferentes formas tratar la situación en la que estás viviendo. Mientras tanto estoy sola: mi familia vive en Concepción del Uruguay. Y bueno, estoy sola. ¿Estuviste mucho tiempo soportando esa violencia?-Sí. Yo pensaba que la situación iba a cambiar y le seguía dando oportunidades. Yo traté, hice lo posible, pero ahora me siento culpable. Él no está en sus cabales. Uno que está razonando trata de llevar la situación, pero si él tampoco acompaña no podés llegar a ningún lado. ¿En esos momentos de lucidez o de no alcohol que tu ex pareja tiene qué te dice?-Estuve yendo dos años a Alcohólicos Anónimos para ayudarlo a él. Él no asistió a una sola reunión. Me decía que "sí, voy a ir, me voy a curar, me voy a hacer el tratamiento".Miente, uno cree porque está pensando en la familia y que va a cambiar y no es así. Él se miente y está enfermo. Entonces se cree su misma mentira.Por eso aguanté y le di la oportunidad, pero ya no se puede porque las criaturas son más grandes y se dan cuenta: no es lógico que ellas vivan esa vida. ¿Cómo es una noche en tu vida y en la de tus hijas? -Estoy preparando la tarea a las nenas o estoy en la cocina y si escucho el ruido de la camioneta -que lo conozco a las 20 cuadras- se me sube la presión, me anulo, me pongo nerviosa, me agarra pánico y no sé qué hacer.Él tiene restricción perimetral, por lo que no se puede acercar a mi casa. Sin embargo hace dos noches que está en esa situación: me hace la pasada, yo me angustio, me pongo nerviosa y pienso lo peor. No espero que venga y hable bien. Él se viene borracho. La justicia le habló, le dijo que él no puede acercarse a mí, ni a la casa, ni llamar, ni nada y que ante esta situación apriete el botón antipánico para que venga el patrullero. Es angustiante. Tampoco puedo pedir tener la custodia en la puerta. ¿Si tiene una restricción que incumple supongo que debería tener algún castigo? -Estuvo preso dos veces por violar la perimetral que le impuso el Juez. Lo meten preso por violar lo que pide el Juez, no porque levantó la ventana, me gritó, me rompió el vidrio o me tiró con algo no, por eso no fue. Por violar solamente la restricción que puso el Juez.A veces las leyes están un poco dormidas y no es de ahora. Hace rato vengo caminando este tema. Es como que le dejan un marcha a que él haga lo que él quiera. ¿Con quién tenés contacto en la justicia? ¿Se acercó alguien para darte algún tipo de contención?-Solamente me contacté con Las Juanitas y los psicólogoss. Nadie vino a decirme "señora vamos a tratar esto y vamos a tratar que ese muchacho entre en razón. Nada". ¿Cómo les explicas eso a tus hijas?-Las alejo. Papá está enfermo. Hay que esperar que papá se mejore. No va a venir a casa. Ellas necesitan saber la verdad, están angustiadas. La nena hace tres días que la tengo con fiebre; la llevo al médico y le hacen un análisis y no tiene nada. Exteriorizan de esa manera y para mí no es fácil. Me tengo que ir a trabajar y me voy preocupada porque las nenas se quedaron con fiebre. La chica que me las cuida puede reaccionar, llevársela. No es fácil. ¿Cómo son las horas posteriores después de un episodio de violencia?-Una vez tuve que ir a hacer la denuncia a la Comisaría de la Mujer porque él no se quería ir. Tuve que llamar al patrullero, y él me denunció porque le había pegado y lo había echado de la casa. Borracho como estaba le tomaron denuncia a la Comisaría Quinta. Les digo "cómo van a tomar a una persona así una denuncia" y me contestaron: "Lo que pasa que viene a exponer y nosotros señora tenemos que hacer lo nuestro". Mientras voy a denunciar me dicen: "señora, pero la culpa es suya". También tenés que vivir esa parte de que la gente te dice lo que vos tenés que hacer. ¿Quién te dijo que la culpa es tuya? -En la Comisaría, los muchachos que te toman la denuncia. Los que están ahí trabajando para nosotros. Te humillan y te tratan de aconsejar. De la vereda de enfrente es fácil aconsejar. ¿Por qué decían la culpa es tuya?-No me dan argumentos. Pero sí pueden opinar de lo que vos hacés. Le digo: "me tomas la denuncia o me voy a la Comisaría de la Mujer". Por obligación me tomaron la denuncia.Es un tema que lo he pasado, donde en las comisarías no hay mujeres, solo hay hombres que no tienen un roce especial, que no te tratan bien. No es lo mismo tratar con una mujer que medianamente es de igual a igual.
