EN LAS PLAYAS DE GUALEGUAYCHÚ
Los guardavidas salvaron de ahogarse a 28 personas durante la temporada
Luis Giménez, quien junto a Daniel Quinteros está encargado de las playas y piletas que están bajo la órbita del Estado Municipal, hizo un balance de lo que fue la temporada y resaltó que queda una guardia mínima para cuidar de la gente que se baña en las playas teniendo en cuenta la ola de calor que azota la zona.
El experimentado guardavida e instructor Luis Giménez hizo un balance de la temporada, la cual calificó como buena, y agradeció “a la Policía y al área municipal de Defensa Civil, quienes hicieron un muy buen trabajo junto a los guardavidas controlando lo que es la ingesta de alcohol, la música a volúmenes no tolerables y el control en las playas”.
“El fin de semana de carnaval las temperaturas bajaron bruscamente, razón por la que si bien la gente vino a la playa y ocupó las instalaciones, muy pocos se metieron al agua. Disfrutaron del lugar y el paisaje de una manera diferente a la que estamos acostumbrados”, rememoró.
Además, señaló que “la pileta del puente está cerrada, mientras que la de la Caja de Jubilaciones continúa funcionando, al igual que las playas, lugares donde las personas, por las altas temperaturas, concurren en horas de la mañana y de la tarde fundamentalmente”.
Rescates
“En el primer día de trabajo, los guardavidas rescataron a una persona que se arrojó en la mitad del cauce del río Gualeguaychú desde el puente Méndez Casariego, aplicando todos los conocimientos adquiridos a lo largo de entrenamientos, capacitaciones y técnica de rescate”.
Posteriormente con el transcurrir del verano se fueron efectuando rescates y salvatajes, según los cuales detalló que “los rescates son los más cercanos y los salvatajes los más lejanos, los que sobrepasan las boyas”.
“Se realizaron 19 rescates en las dos playas (Puente y Samba La Playa), además de 9 en la playa de ‘Parque del Sol’, todas sobre aguas del Gualeguaychú”
Contó que “la mayoría de las personas que fueron rescatadas eran mayores de edad, algunas presuntamente alcoholizadas y otras que se confiaron y no conocen lo que nosotros llamamos pozos, o que donde termina el boyado empieza la parte profunda, quizás piensan que es como en el mar, cuando no es así y tenemos que salir a cumplir con nuestra labor que es la de rescatar personas. Están aquellos que van nadando, sobrepasan las boyas, no saben flotar, se cansan, quedan en posición vertical y comienzan a pedir auxilio, aunque los guardavidas están atentos a esas posibles situaciones y actúan en consecuencia”.
“También está el descuido de algunos padres para sus hijos menores que mandan a los chicos al agua y se olvidan de los mismos, no teniendo en cuenta que si bien el guardavidas está atento a lo que pasa en el agua no es niñero”, manifestó.
La ola de calor
Las temperaturas extremas provocan que las personas, en un número menor pero igualmente importante, siguan concurriendo a las playas que requieren del cuidado de profesionales. Al respecto, Giménez indicó que “los vecinos, turistas concurren a playas que están limpias y ordenadas, que tienen buena sombra. Por esa circunstancia hemos dejado una guardia, no el total de los 36 guardavidas que trabajaron en la temporada, sino de 13 profesionales luego de un arduo trabajo para seleccionar a la gente que quede de guardia. Lo ideal hubiese sido que queden todos, pero se cumplió con el contrato estipulado”
“Se ha concientizado al guardavida de que se trabaje mucho con la prevención que evita los accidentes, el salir a rescatar a personas. Es así que se habla con la gente y se le explica cómo disfrutar de la playa”, concluyó.