
El delincuente de 27 años fue aprehendido durante la madrugada en la esquina de la Jefatura de Policía. Trató de ingresar a una casa en calle Borques y luego sustraer lo que había en un auto estacionado, pero un móvil que recorría la zona lo persiguió y lo atrapó.
Alrededor de las 5.30 aproximadamente, personal policial tomó conocimiento que un delincuente había tratado ingresar a un domicilio ubicado en calle Borques entre 25 de Mayo y Urquiza, y que al no lograr su cometido pretendió sustraer pertenencias de un automóvil Fiat Siena, que se encontraba estacionado frente a la vivienda.
Según informó a ElDía el subjefe Departamental, Cristian Hormachea, en el domicilio se encontraban solos dos menores de edad y uno de ellos escuchó ruidos en una de las ventanas del primer piso, vio al delincuente y lo empujó, cayendo el delincuente al piso. No conforme, el ladrón corrió hasta un auto estacionado frente al domicilio y tomó una botella, amenazando al menor que lo iba a cortar.
Un móvil policial que patrullaba la zona se percató de lo que sucedía y cuando el delincuente observó la llegada del patrullero emprendió la fuga, aunque su carrera no tuvo el final esperado porque fue interceptado en Camila Nievas y Urquiza. El joven de 27 años trató por todos los medios resistir el arresto, incluso se mostró agresivo contra los uniformados, pero al cabo de unos minutos fue reducido y trasladado a Jefatura.