“No somos fiscales, ni jueces, ni abogados; sólo ciudadanos”

Son familiares de víctimas de homicidios y de accidentes de tránsito no esclarecidos. Pertenecen a la Asociación Civil por Verdad y Justicia (A.Ci.Ver.Jus), que reúne a vecinos que se identifican con la causa. Fátima Pereyra, presidenta de la entidad, y uno de sus miembros, Adriana Gómez (operadora psicosocial), explicaron a EL DIA qué espíritu moviliza al grupo. Por Marcelo Lorenzo - Antes de avanzar en cuestiones de actualidad, cabría preguntar cuándo y por qué nació A.Ci.Ver.Jus...Fátima Pereyra:- Se gestó a partir de la movilización de familiares de víctimas de homicidios. Se pedía el esclarecimiento de varias causas que se sucedieron en un lapso corto de tiempo, en el año 2009. Como no veíamos y no vislumbrábamos respuestas concretas, comenzamos a proyectar una marcha que se realizó el 19 de junio del 2009, en horas del mediodía, con concentración en 25 de Mayo y España, y que se dirigió hasta el edificio de Tribunales. Tres rostros de víctimas de homicidios, que habíamos logrado pintar, presidían la marcha. Así nació todo (...) Se lograron exponer ante la sociedad nuestras causas judiciales no resueltas. La mayoría de ellas estaba estancada. Se logró que la marcha fuera declarada de interés municipal. Fue la primera y emblemática marcha contra la impunidad, por seguridad, por justicia y por verdad (...) Eso fue en junio de 2009. En agosto del mismo año conformamos una asociación, durante una asamblea constitutiva realizada en el salón del Concejo Deliberante. Ahí nación la Asociación Civil por Verdad y Justicia. - Sin embargo, la asociación no sólo está integrada por los familiares de las víctimas. ¿Es así?Adriana Gómez:- En principio son ellos el núcleo de la asociación. Porque son víctimas en cierto punto. Y esto, si se quiere, por la omisión del Estado en cuanto al desarrollo de las causas. Pero también se fue sumando gente identificada con esta causa. Ése es mi caso. Yo no tengo un familiar víctima de homicidio o de accidente de tránsito. Pero tengo hijos y pienso en ellos y en el futuro. Es decir, nadie está libre de, en algún momento, convertirse en víctima de la inseguridad. Hay dos colegas míos, Cecilia Recalde y Víctor Hugo Lapido, que se han sumado también a esta lucha. Y así se fueron sumando otros que se identifican con esta causa por verdad y justicia, que existe porque pide algo que no se está dando. Aparte de algunos crímenes no resueltos en Gualeguaychú, cuyas causas no han avanzado lo suficiente, se suma la problemática de los accidentes de tránsito seguidos de muerte, que afecta a familias que tampoco encuentran respuestas en su reclamo ante la justicia. "No vamos al choque"
- El servicio de seguridad y justicia es proporcionado, en teoría, por el Estado. Que haya ciudadanos que se movilicen para exigir que se garanticen estos valores, habla de un déficit estatal...A.G.:- Pero hay también una maduración de la sociedad. Esto tiene que ver también con que hay gente que dejó de ser espectadora, dejó de mirar las cosas como ante una vidriera, para ejercer sus derechos, para hacerlos efectivos. Aquí el famoso "a mí nunca me va a pasar" juega mucho. Sabemos que esto no es así, y por eso la presencia de gente en la asociación, que no es víctima directa de homicidios o de accidentes de tránsito. Hay signos de que un sector de la sociedad dejó de mirar para otro lado, y ahora busca respuestas y las exige donde debe exigirlas. Y esto con una actitud muy tranqui. Esto hay que resaltarlo. A.Ci.Ver.Jus no es una asociación que vaya a ir al choque, que al actuar falte el respeto, y por tanto que caiga en el doble discurso. Acá hay hechos que son reales. Hay un duelo. Hay un dolor. Hay una pérdida. Hay una ausencia F.P.:- Tenemos una actitud constructiva. Agotamos todas las vías del diálogo, y siempre llevamos una propuesta. Sabemos que tenemos que interiorizarnos de muchas cosas y vamos a que nos expliquen. Porque también esto es un camino de aprendizaje. Siempre decimos que estamos en el lugar del ciudadano. No somos ni fiscales, ni jueces, ni abogados. Entonces somos simples ciudadanos que hemos tenido que transitar por este camino, obligados por las circunstancias. Por terribles circunstancias que nos han hecho madurar. Que nos han hecho ver que tenemos derechos. Derechos que tenemos que hacer valer por el solo hecho de ser personas, nada más. Desgraciadamente, muchas veces no nos damos cuenta de esta dimensión ciudadana. Creemos que nuestros derechos están siendo amparados. Pero no es así. Nosotros tuvimos que pasar por circunstancia terribles para darnos cuenta que no se respetaron los derechos de nuestros seres queridos. Y que a nosotros, sus familiares, nos pasa lo mismo. - Al respecto, conmocionó recientemente a la opinión pública local el caso del joven Nicolás Bellolo, víctima de un accidente de tránsito. ¿Qué lectura hacen ustedes? ¿Ven que se encadena con otros hechos similares?F.P.:- Claro que hay vinculación. Esto es algo que se viene arrastrando desde hace ya hace mucho tiempo. De hecho, un poco el logro nuestro ha sido hacer visible esta problemática. Antes los accidentes de tránsito se tomaban como algo que ocurría y seguía su curso. Nadie se preguntaba por ellos. Al ponernos a investigar, al querer saber más sobre estos hechos, nos dimos cuenta que había que hacer foco en esta problemática, y que había otras asociaciones movilizadas por la seguridad vial. El caso Bellolo se suma a otros que han ocurrido en el pasado. Nosotros hemos recibido resultados terribles para familiares de víctimas, que no encuentran una respuesta a su reclamo ante la Justicia. Se han emitido dictámenes judiciales que ni siquiera han sido comunicados a los propios damnificados, pese a que éstos tenían sus abogados, sus representantes legales. Ahí vemos un ejemplo más de mala praxis, que revela una vez más un mal desempeño del servicio de justicia. - A veces la Justicia es vista como una burocracia alejada de los problemas cotidianos de las personas. Lo cual invita quizá a la resignación...A.G.:- Es así. De hecho sus funcionarios hablan un discurso, desde el marco legal, que no se entiende. Como si uno supiera, o debiera saber, de lo que están hablando. Sin embargo, sí se pueden llegar a leer estos dictámenes. Es posible hacerlos comprensibles. Traducirlos, como quien diría, a un lenguaje criollo, para que la persona entienda de lo que se trata y pueda actuar en consecuencia. Muchas veces, en este ámbito, no se sabe qué hay que hacer. No se sabe adónde recurrir. F.P.:- A veces la información está retaceada. Nosotros, por ejemplo, por el tema de la asociación, nos enteramos que teníamos el derecho de los familiares de la víctima a ser querellantes en una causa, y que esto está contemplado en el Código Procesal Penal. La víctima de homicidio, de abuso, de lo que sea, tiene derecho de acceso a esa causa, a seguirla y a ser informada. Yo lo he hecho en mi caso personal. Esto me ha permitido acceder incluso hasta al vocabulario que emplea el sistema judicial, que nosotros simple ciudadanos no entendemos, y que hace que muchos de ellos se confundan y se cansen. Nosotros hemos tenido que salir a preguntar, a empaparnos, a asesorarnos. - Gracias a este aprendizaje ustedes, desde la asociación, están en condiciones de ayudar a otras personas. ¿Ese es el objetivo también de A.Ci.Ver.Jus?A.G.:- Sí. En ese caso siempre dejamos las puertas abiertas. Recibimos a las personas si ellas creen que somos el lugar donde pueden sentirse acompañados. Y como decía Fátima, cuando uno es querellante tiene derecho a leer los expedientes y desde el juzgado no se los pueden negar, ni para sacarles fotocopia. Uno cree, erróneamente, que el único que tiene acceso a estas cosas es un abogado, un letrado. No, como querellante tiene acceso (...) Con respecto al caso Bellolo, nosotros fuimos invitados como asociación a la marcha que se hizo frente al juzgado. Comprendemos lo que está pasando esa familia. El dolor, la impotencia y la frustración que tiene. Pero nosotros simplemente acompañamos. No estamos interiorizados en el caso (...) Este caso, como dice Fátima, vuelva a poner sobre el tapete las falencias, los baches que hay en la justicia. Se perdió la vida de un joven. Y quizá se dicte una "probation", que entre comillas es una seudo reparación a nadie. Y aquí está uno de los mayores pedidos que está haciendo la Asociación. "Probation", figura cuestionada
- ¿En qué consiste, básicamente?F.P.:- Hablamos de accidentes de tránsito evitables. El punto es que muchos familiares de víctimas por estos sucesos no llegan ni siquiera a tener un juicio por la muerte de sus seres queridos. El imputado entre por una puerta y sale por otra, después de haber atropellado y matado. Estamos luchando para que la probation sea eliminada. Nosotros no queremos cárcel y más cárcel. Somos conscientes que nosotros en algún momento podemos estar en la vereda de enfrente. Pero la justicia tiene que ser ejemplificadora y equitativa (...) Yo siempre digo que hay daños causados que no se pueden resarcir. Y no hay dinero que pueda compensar la pérdida de una vida (...) Por ahí nosotros nos conformaríamos con que el imputado esté un tiempo encerrado, no importa si 15 días o 4 meses, para que medite sobre el dolor que provocó. Y no que esté, por ejemplo, escondido en una escuelita haciendo "servicio comunitario" que nadie controla. Porque en eso consiste la probation, en obras comunitarias. Y el imputado además tiene que ceñirse a una serie de reglas, como no consumir drogas o alcohol. El tema es que nadie controla que esto se cumpla. Y los familiares no están en condiciones de controlar. - Ustedes piden, directamente, que esta figura o instituto desaparezca...F.P.:- Y que se investigue el homicidio culposo, si es que es culposo o con dolo eventual. En algunos casos pasa a ser homicidio simple. Nosotros siempre tenemos que estar con lo que dicen los jueces, cuando afirman que no hubo intención. Pero también sabemos que en estos casos se suelen violar las normas de tránsito. Se olvida muchas veces que el auto es un arma. Y que somos por tanto potenciales homicidas. Pesa el estatus social
- ¿Cómo creen que el sector político percibe la acción de ustedes? ¿La verá como un auxilio o como una piedra en el zapato?A.G.:- Depende del político que sea. Convengamos que hacer política no significa dejar de ser persona como cualquiera. Lo que cambia es que en la cancha juega en otro lugar. Y esto es lamentable a veces decirlo: todo depende también del caso con el que nosotros salimos al ruedo. Es decir, hay casos que van a molestar más que otros, tanto al político como a la gente de tribunales. Aquí, aunque somos en teoría todos iguales ante la ley, pesan las características socioculturales del caso. Hay causas que generan revuelo, y otras, por su escasa implicancia social, que no joden a nadie. - Aquí entra a tallar, entonces, lo que se conoce como "tráfico de influencias". ¿Es así?A.G.:- Ocurre que hay que poner en la balanza el tema del estatus social de las personas y las familias involucradas en la historia (...) Para decirlo de una manera que se entienda: no es lo mismo que esté en problemas el hijo de un doctor que el de un obrero. No juegan igual (...) En realidad, no estamos diciendo nada que no se comente en cualquier hogar. La función de las "estrellas"
 - La asociación ha tenido mucho protagonismo a partir de la campaña vial de "estrellas amarillas". ¿Cómo nace esto?F.P.:- Surgió luego de un pedido de una jueza correccional, Alicia Vivian. Nunca me voy a olvidar de la audiencia que tuvimos con ella. Fue a partir de un caso resonante, el de Gustavo Toledo, que fue atropellado y abandonado junto a su señora en calle Nágera y Urquiza. Fue una probation muy cuestionada por nosotros. Y bueno, la doctora Vivian nos citó a una audiencia a la que concurrieron jueces, periodistas, el obispo de Gualeguaychú, el intendente Bahillo, diputados, vecinos y familiares de víctimas. Allí nos explicó qué era el instituto de la probation y qué caminos teníamos que seguir nosotros como ciudadanos. Porque ellos (los jueces), desde su lugar, no podían cambiar un instituto fijado por la ley. Nos sugirió que los ciudadanos debemos apuntar a la concientización y a la educación. De esa manera conseguiríamos lo que estábamos buscando. Entonces, empezamos la búsqueda. Y dimos, a través de Internet, con esa campaña de concientización vial. Ahí hice contacto con Teresa Mellano, que es la presidente de la Red de Familiares de Víctimas de Tránsito, quien fue la que inició de campaña de estrellas amarillas, pintando un día en Avenida Libertador una estrella para recordar a su hijo fallecido en una picada. Ella me contaba que sintió un impulso de salir a pintar esa estrella con un molde de papel de diario. Porque algo quería hacer por la muerte de su hijo. Quería que no fuera invisible. - Es decir las estrellas quedan como testimonio de que ahí hubo un accidente de tránsito...F.P.:- Mal llamado accidente. Porque todo lo que se puede evitar no lo es. Esa es la concepción que anima la campaña: que esos hechos pueden ser evitables. Es una herramienta de la memoria. Por eso se apela al símbolo de la estrella. Y es concientización porque uno tiene que apelar a los valores. Al valor de la vida. De la propia y de la del prójimo. Todo esto se ha ido perdiendo. Después está la integridad física de aquellas víctimas de choques, que han quedado postradas de por vida (...) Argentina tiene una estadística espantosa en este sentido. - ¿Cuál es el factor más revelante que incide en los accidentes viales?F.P.:- Es un mix. Aunque está comprobado que el 99% es achacable al error humano. A lo que se deben sumar otros elementos, como factores climáticos, problemas de infraestructura, y demás. Después está la normativa no internalizada. Los ciudadanos somos ignorantes de la Ley Nacional de Tránsito. A eso estamos apuntando: a la educación. A.G.:- En otros países son más severos ante las infracciones viales. Hace poco nos enteramos que del caso de la actriz Julia Roberts, que había hecho una publicidad arriba de una moto sin casco. En España se sancionó a la empresa, para la cual se hacía la promoción, con una multa sideral. En algunas películas, además, hemos visto cómo funciona la probation en otros países. El involucrado cumple las horas comunitarias en parques o lugares públicos. Y están identificados con un color determinado. Para que la sociedad vea está respondiendo por una falta que ha cometido (...) Evidentemente somos hijos del rigor. - ¿No creen ustedes que transitamos por la vía pública como vivimos?F.P.:- Sin duda. Por eso hay muchas cosas por hacer. Por ejemplo, nosotros participamos, junto con otras ONGs, del primero Foro contra la violencia vial, que fue el 7 y 8 de octubre de este año. En la ocasión fue invitado un fiscal español, Bartolomé Vargas. En su opinión, a la Argentina le faltan fiscalías temáticas. Es decir tendría que haber un fiscal, con dos ayudantes, que se aboque al área de seguridad vial. Porque se necesitan especialistas en el tema. Porque son claves esa primeras horas tras el accidente. Para determinar si fue un hecho fortuito, y por tanto le pudo pasar a cualquiera, o hubo incumplimiento de la norma, en cuyo caso al responsable hay que caerle con todo el peso de la ley. A.G.:- La actual legislación se base en los derechos humanos. Pero esto hay que entenderlo íntegramente. Se piensa primero en aquel que aparece sospechado de algún ilícito. Ahora bien, ¿y los derechos humanos de los que están del otro lado? ¿Dónde están los derechos humanos de los familiares de las víctimas? ¿Dónde están los derechos humanos de ese hijo que perdió a su papá o a su mamá? ¿O los de esa señora que quedó quizá postrada o que dejó de ser una persona activa, normal, por un accidente? Cuando hablamos de derechos humanos, no tenemos que mirar sólo para un lado. - ¿A.Ci.Ver.Jus viene impulsando iniciativas en el Concejo Deliberante local?F.P.:- Sí, presentamos un proyecto de ordenanza el 21 de diciembre de 2009, el cual fue aprobado hace más o menos un mes. Es sobre el control de seguridad en los boliches bailables. Vemos que hace falta un control para esta actividad, por lo que significan nuestros jóvenes. Esto está inspirado en el caso de Martín Castelluci, el joven de 20 años que fue asesinado a golpes, en 2006, por un patovica de un local bailable. Su padre Oscar luchó mucho para que se hiciera una ley nacional al respecto. Esto demuestra todo lo que uno puede lograr a partir de una pérdida. Volcarlo en algo constructivo, en algo positivo, para que a otros no les pase. Porque es así. Es terrible. Uno ve que Gualeguaychú está en crecimiento y la vida en todo sentido es más compleja. Y muchos valores están cambiando. De lo que se trata es de aportar un grano de arena para que podamos cuidarnos entre nosotros. Tenemos que ayudar en la prevención. A veces a nosotros nos preguntan: con todo lo que están haciendo, ¿ven que están disminuyendo los accidentes de tránsito? Y por ahí, efectivamente, no disminuyen. Nosotros hacemos lo que podemos. Y el Estado sabrá lo que tiene que hacer. Pero hay una responsabilidad individual, de ciudadano, para lograr que las cosas mejoren (...) - La asociación hace el seguimiento de las causas de homicidios no esclarecidos...A.G.:- Claro, necesitamos que los procesos avancen. Porque cuando más se prolonga el cierre de estas causas, más se prolongan el dolor y la angustia. F.P.:- Tenemos que decir que a la asociación llegan casos de abuso de menores. Lo que hacemos es asistir al familiar y orientarlo sobre lo que tiene que hacer. Solemos derivar estos casos. - ¿Cómo se puede contactar con la asociación?F.P.:- En mi casa, 1° de Mayo 385 o al teléfono 427101. También está la página web: www.aciverjus.com - En Entre Ríos funcionan otras entidades de este tipo (VIDAER en Paraná, APERJUS en Concepción del Uruguay, por ejemplo). ¿Trabajan en común?F.P.:- Estamos conectados. Aunque perseguimos los mismos objetivos, cada una tiene su forma de proceder, según su idiosincrasia (...) No hace mucho VIDAER vino acá, y se entrevistó con el intendente Bahillo, con un proyecto que nosotros acompañamos. Se trata de la creación de una oficina de atención a la víctima. Nos gustaría que la víctima, que puede ser de homicidio o abuso, tenga de inmediato el auxilio de un equipo interdisciplinario de profesionales (...)