
La Policía realizó durante la madrugada del domingo dos allanamientos sorpresa y detuvo a seis personas
Tres de las alternadoras que estuvieron presentes en el operativo dela Policía Federal en las whiskerías de la ruta 14 y Escriña, ratificaron que ellas nunca permanecieron en contra de su voluntad y negaron rotundamente que fueran "rescatadas" por los uniformados, víctimas dela Trata de Personas.Durante el fin de semana, personal dela Policía Federal con asiento en Concepción del Uruguay, realizó allanamientos sorpresas y simultáneos en dos whiskerías del Departamento Gualeguaychú, donde se identificaron a las mujeres que trabajaban en los lugares, y se detuvieron a seis personas."Estábamos sentadas cuando entraron los agentes, corriendo con armas y apuntándonos para que nos quedáramos quietas, a los clientes se los puso manos arriba, revisaron las piezas, la cocina, y después nos hicieron varias preguntas", relató una de las mujeres en diálogo con Diario ElDía.Esta mujer trabaja desde hace 8 años en este rubro y desde mediados de agosto lo hace en la whiskería allanada sobre la ruta 14, junto a otras siete alternadoras. "Nosotras teníamos documentación y por un largo tiempo nos retuvieron nuestros DNI, mientras nos preguntaban si estábamos secuestradas, si nos maltrataban, si nos dejaban salir", narró la entrevistada que prefirió no dar su nombre.Contó que tanto ella como sus compañeras son oriundas de Misiones, de localidades como El Dorado, Oberá o Irigoyen, lugares donde escasea el trabajo y abunda la pobreza. "Nosotras llegamos por nuestra propia cuenta", contestó a la pregunta de cómo arribaron a Gualeguaychú y aclaró que lo hizo "averiguando dónde había un boliche para trabajar".Otra de las mujeres que vinieron a la entrevista trabaja en la whiskería allanada en Escriña, donde lo hace junto a otras 10 mujeres. Este lugar es más grande al de ruta 14 y por ello el número de alternadoras es mayor, además de la clientela."No fuimos rescatadas porla Policía", fue lo primero que dijo esta joven que no alcanza a los 30 años. "En Escriña llegaron con las armas, nos agarraban de los brazos y nos empujaban para un rincón. Al baño nos llevaba un policía con un arma como si fuéramos delincuentes", relató la mujer y agregó como anécdota que al regreso de la declaración antela JusticiaFederal, "los policías nos pidieron 20 pesos para el combustible para traernos de regreso".La experimentada mujer, primera en hablar, explicó que todas llegan por su propia cuenta, "tenemos nuestros días libres, obviamente que como en todos lados si querés tener un peso tenés que trabajar, entonces no vas a salir y volver a la hora que querés, si venís de lejos necesitas plata pero nadie nos tenía atadas o sufríamos maltrato. Cuando queríamos retirarnos éramos libres, no estábamos secuestradas, estábamos por nuestra propia voluntad".Con respecto al jornal, "nosotros trabajamos como queremos, si queremos juntamos el dinero o sino al final del día te dan tu recaudación". Señaló que si prefieren tienen un día franco o una noche libre, pero aclaró que durante las horas del día están sin trabajo y pueden salir."Nosotras durante el día estamos libres, no estamos secuestradas, a nosotras no nos rescataron, eso es mentira, sino no hubiéramos vuelto", aseguró la mujer con mucho énfasis."Hasta el momento no estamos trabajando porque estamos esperando qué va a pasar. Estamos durmiendo en el mismo lugar porque habilitaron un sector pero nosotros no nos queremos ir porque queremos esperar a ver qué va a pasar con el dueño y también necesitamos el dinero", se sinceró."Allá en Misiones no hay trabajo y si lo conseguís te matan trabajando por un sueldito de 500 pesos y qué vas a comer con esa plata, no podés comer, tampoco podés tener una tele, tener luz, uno tiene que buscar su comodidad, no porque seas humilde tenés que vivir en el medio de la pobreza", finalizó.