Desde el año 2011 la pista del Aeródromo de Gualeguaychú espera ser reasfaltada. Desde entonces surgió un proyecto de convertirlo en aeropuerto internacional; clausuraron la pista; anunciaron una inversión millonaria y se frustró una licitación para las obras. Hoy todo sigue igual. La Provincia no puede hacerla porque es un predio privado. La Municipalidad sí.Estela GigenaLa situación del Aeródromo de Gualeguaychú, lamentablemente, sigue siendo la misma: la pista está como quedó luego de algunas reparaciones menores que se hicieron cuando en diciembre de 2012, tras una inspección de la ANAC, ante el riesgo que significa para los aviones el mal estado de la misma fue clausurada.Hoy, Nicolás Garbino, quien ha quedado a cargo de la institución desde junio, al igual que su antecesor, Jorge Garbino, repite a ElDía el diagnóstico: "la pista es utilizada, pero están restringidos los reactores de turbinas bajas, por el peligro que puede generar el levantamiento de las piedritas que permanecen sueltas en el piso de la pista". Eso significa que "las operaciones que se están haciendo con ese tipo de aviones es bajo total responsabilidad de los pilotos". RAZONES HUMANITARIASUna de las funciones que cumple este Aeródromo es harta conocida y es la razón fundamental del reclamo de los gualeguaychuenses a encontrarle una solución definitiva. Se trata de una razón humanitaria: el traslado de órganos para trasplante. Ocurre, como lo explicó Garbino, que "Incucai están utilizando otros tipos de aviones, con menor cantidad de problemas en el aterrizaje, pero que demoran el doble de tiempo, lo que complica la llegada de los órganos con el tiempo necesario para un trasplante exitoso". El responsable del Aeródromo mostró entonces su preocupación al recordar que, tal como lo indica el protocolo médico, "el órgano trasplantado dentro de las tres horas tiene una duración de diez a veinte años; en la segunda hora tiene de veinte a treinta años, y trasplantado dentro de la hora de ablación tiene una importante cantidad de años más de vida".Actualmente, y a pesar de los inconvenientes de la pista, hay un promedio de 12 traslados de órganos por año que usan el Aeródromo local, es decir, un traslado por mes. LA HISTORIA DEL OLVIDOLa pista del Aeródromo ha sido noticia desde 2011 por lo que no se ha hecho. Proyectos, anuncios de inversiones, una clausura y hasta una licitación trunca para la realización de las obras.En mayo de 2011, el entonces diputado nacional Atilio Benedetti (UCR) presentó un proyecto de ley por medio del cual se pretendía recategorizar al Aeródromo de Gualeguaychú como Aeropuerto Internacional, e incorporarlo al Sistema Nacional de Aeropuertos. Se planteaba la recategorización porque en épocas de oro lo fue, durante 30 años, con un importante tráfico aéreo hacia la República Oriental del Uruguay y a Brasil, pero perdió su categoría en 1989, seguramente por el mal estado de la pista y las instalaciones.El proyecto quedó en la nada.En diciembre de 2012 se acentuó la debacle, la pista del Aeródromo fue clausurada tras una inspección de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) ante el riesgo que significaba para los aviones el mal estado de la misma. La carpeta asfáltica estaba destrozada y significaba un serio riesgo para el despegue y aterrizaje.En ese momento, el director zonal de Vialidad provincial, Roberto Vilche, aseguró a ElDía que había "un pedido del gobernador Urribarri al director de Vialidad Provincial (Jorge) Rodríguez, para que se haga lo necesario para recuperar la pista del aeroclub", y acotó: "cuando hay una cuestión urgente como ésta, la aprobación de los trabajos sale rápidamente porque los tiempos son otros".La urgencia se esfumó.En marzo de 2013 el Gobierno provincial anunció que se dispondrían 7,5 millones de pesos para bacheo, relleno de agrietamientos y construcción de carpeta asfáltica en el Aeródromo local. Es más, se anunció que en un par de días se iba a llamar a licitación.En el anuncio se detallaba que la obra tenía un plazo de ejecución de tres meses y consistía en la ejecución de bacheo superficial, limpieza y extracción de pasto y relleno con mezcla de los agrietamientos, riego de liga y la construcción de una carpeta asfáltica de ancho y espesor variables conforme al sector que corresponda.Pero además, incluía la reposición de suelo para banquinas y también la señalización horizontal (líneas de eje, senda de advertencia de fin de calle de carreteo y cajones de advertencia de fin y principio de pista de aterrizaje) del Aeródromo con material reflectivo.En abril de 2013 se abrieron los sobres de la licitación. Se presentaron tres empresas: José E. Pitón; Covimer S.A. y Hornus y Cía S.A..La obra nunca se adjudicó.En abril de este año, la diputada provincial Mariela Tassistro (Unión Popular - Frente Renovador, Gualeguay) realizó un Pedido de Informes al Ejecutivo Provincial a los efectos de que se informen detalles de por qué no se realizó la obra de rehabilitación de calzada del Aeródromo.Ayer, consultada por ElDía acerca de si había recibido respuesta del Ejecutivo provincial sobre su presentación, la legisladora confirmó que no ha sido notificada de respuesta alguna."Tuve en forma una respuesta - de pasillo- por parte de un diputado del oficialismo, pero no es lo que corresponde en estos casos. La respuesta fue que en un lugar privado no podía ser llevada adelante una obra pública. Por supuesto, ameritó una respuesta de parte mía: ¿por qué entonces se llamó a una licitación? Esto debió haber sido pensado mucho tiempo antes. Quien me hizo esa apreciación el diputado Juan José Bahillo, que fue quien por ese entonces hizo la apertura de sobres y era el intendente de Gualeguaychú".Dijo luego que "al margen de que este Aeródromo sea de propiedad privada, la utilidad que se le ha dado históricamente ha sido pública y humanitaria" y remarcó: "hacemos hincapié fundamental en el tema humanitario, en este triángulo vital que es Concordia, Gualeguaychú y Paraná en cuanto al tema de la ablación. Además, es un punto estratégico en cuanto al tema satelital respecto del tráfico aéreo respecto de todo el tema emergentológico".La legisladora cuestionó lo sucedido al decir que "nos venimos a acordar a posteriori de que el Aeródromo de Gualeguaychú es un predio privado después de llamar a licitación". PREDIOS PRIVADOS, OBRAS PÚBLICASEl diputado provincial Juan José Bahillo, ex intendente de Gualeguaychú, consultado por ElDía confirmó que si bien se llamó a licitación y se presentaron tres empresas para realizar la obra del Aeródromo, ésta nunca se adjudicó."Cuando se iba a adjudicar llegó una objeción de los organismos de control del Estado provincial indicando que se estaba por hacer una obra pública en un inmueble privado, cuestión que está absolutamente prohibida. El Estado no puede gastar fondos públicos en un predio privado. Lo objetó el organismo de control y no se pudo realizar la obra. No se autorizó al organismo que licitaba - Vialidad Provincial - a que la adjudique y los fondos quedaron en Vialidad Provincial", explicó el jefe de la bancada del FPV. EL GRAN BONETE¿Quién lo hace?, ¿Usted señor? No señor. Lo cierto es que en esta extensa novela, todo está como era entonces, el Aeródromo sin la pista necesaria y los fondos destinados sin destino. Anunciaron obras de urgencia y la urgencia voló con las piedritas sueltas que atentan contra los aviones que trasladan personas y órganos que salvan vidas.Pero no es tan difícil de resolver. El Estado provincial no puede hacerlo, pero "la Municipalidad de Gualeguaychú sí", confió Bahillo.Es decir, es cuestión de decisión política y acuerdos entre los Gobiernos provincial y municipal. Se necesita que abogados y técnicos de la Provincia y el Municipio se pongan manos a la obra a resolver esta cuestión urgente. Porque los fondos están; los tiene Vialidad Provincial. Entonces, que esos fondos sean utilizados para lo que fueron destinados y que la Municipalidad intervenga poniendo el final esperado a la pista del Aeródromo.
