El escultor ganó una medalla de oro del fondo nacional de las artes cuando tenía apenas 22 años
Es autodidacta; sólo leyó libros y visitó talleres de escultores. Actualmente tiene unas 70 esculturas en espacios públicos y contó a ElDía porqué decidió tallar al expresidente, Néstor Kirchner.
Mónica Farabello A Oscar Rébora, sus amigos lo conocen como Nito; tiene 68 años y comenzó a hacer esculturas desde los 7 cuando hizo un tallado en madera para regalar."Mucho lo hice con la práctica, nadie me enseñó, leí libros, y visité muchos talleres de escultores", comenzó a relatar. De manos fuertes y grandes, golpea sobre la mesa a cada frase, mientras se acomoda los anteojos y el pelo."Creo que todos los seres humanos nacemos para algo, yo nací para esto", confiesa Nito, quien tienen más de 70 monumentos públicos distribuidos en diferentes provincias del país.En agradecimientoCuando se conmemoró un año del fallecimiento del expresidentes, Néstor Kirchner, se inauguró un busto en su honor. El mismo había sido tallado por las manos de Rébora."Cuando ví por televisión que había muerto Néstor, me pasó lo que creo que le pasó a cientos de miles de personas. Pasan los años y uno piensa que nunca va a llegar a viejo, y cuando llegas y fuiste un changarín del arte toda la vida, no tenés una jubilación. Yo cuando cobraba un busto, ya me había gastado la plata hace un mes atrás...", asegura."Si sos empleado, te lo van descontando del sueldo, o vas haciendo tus aportes, pero mi situación no fue así. Se me pasaron los años y llegué a viejo, por suerte o por desgracia, y me di cuenta que este hombre, con esa jubilación que nos dio a los que estábamos fuera del sistema, nos sirven mucho", confiesa Nito mientras busca el consentimiento en la mirada."Esos pesos me sirven para poder ir al médico, o para recibir mis pastillas gratis, y yo soy un hombre agradecido", cuenta, quien al comenzar la obra llamo a Pemo Guastavino, quien fue con Juan José Bahillo a su taller: "Lo vieron y les gustó", asegura.Su idea era regalárselo a la Presidenta de la Nación, "pero no importa donde esté, yo ya tuve la satisfacción de realizar la obra", expresó.[youtube]Nfm1Y3u_t3Y[/youtube] Al curita GauchoEl padre Jeannot fue un ejemplo de vida, así lo define Rébora. "Hice una estatua de 2.50 metros de alto, que actualmente está en el vía crucis; él se enteró y se enojó muchísimo y dijo que si la hacía pública, se iba de Gualeguaychú"."Yo tenía la escultura en mi taller, la terminé y la llevé al vía crucis donde quedó tapada por años. Cuando él se enfermó, yo fui a visitarlo y mucha gente me decía que se la muestre, pero yo no me animaba. Cuando el padre vivía en el asilo y estaba muy enfermo, fui y le dije: "Si yo me muero antes, se termina el problema, pero si usted muere ¿yo qué hago con la escultura?"Luego de estar durante años tapada, la estatua del padre, esta descubierta y es un regalo para la ciudad. El dato"Oscar Rébora tiene 70 esculturas en La Pampa, Buenos Aires, en el Sur argentino, en muchas localidades entrerrianas, en el túnel subfluvial y muchos lugares más". ¿Dónde está Ramírez?Al monumento de Pancho Ramírez lo iban a llevar a Costanera Sur, lo iban a reparar "pero nunca más supe qué pasó", dice Nito, quien además cuenta que "tenía un mármol tallado y la figura central era Ramírez que murió románticamente por una mujer". Rébora había tallado una frase del poeta Antonio Machado, de donde se inspiró: "Cae del cielo y solitario, riega con sangre caliente la rosa azul de su canto" y la figura muerta de Pancho Ramírez.
