LA GRAN NOCHE DE LA BICAMPEONA
Papelitos festejó en el Corsódormo el título de bicampeón del Carnaval del País

En una noche por fuera de la agenda carnavalera, la comparsa del club Juventud Unida desfiló ante los vecinos de la ciudad y sus fanáticos en el principal escenario carnavalero. Una noche calurosa en el que la fiebre del carnaval terminó levantando aún más la temperatura de todos los que se acercaron al Corsódromo.
Por Amílcar Nani
"¡La bicampeona festeja en el Corsódromo!", habían anunciado oficialmente tras la consagración en la edición 2023 del Carnaval del País desde la comparsa Papelitos, del club de Juventud Unida, y la invitación se hizo realidad este viernes a la noche, unos 15 días después de la décima noche.

“Queremos festejar junto al pueblo que tanto nos alentó noche a noche en esta edición del Carnaval del País”, habían prometido desde Papelitos, y de hecho, este viernes por la noche la pasarela se volvió a teñir de Celeste y Blanco, los colores de Juventud que este año quedaron en lo más alto del marcador, sacando una amplia diferencia a las demás comparsas y obteniendo un puntaje casi perfecto en más de una noche.

La cita fue el viernes 10 de marzo en el Corsódromo, con entrada libre y gratuita –sólo se hizo una colecta solidaria–, y por supuesto que la pasada no fue como las diez restantes que tuvieron lugar este verano. Para empezar, sólo la bicampeona salió a las pistas, y tampoco el corsódromo estaba acondicionado como las jornadas carnavaleras de enero y febrero, pero eso a nadie le importó.

Todo comenzó con una comisión de frente con legendarios integrantes de la comparsa, siendo la protagonista del grupo la tan ansiada y preciada copa 2023, pero también salió a la pista la copa del Carnaval del País 2022, que ganaron con “Pawe”.
Crédito: Joaquín García
A diferencia de las noches regulares en el Carnaval del País, esta vez todo fue más informal: los integrantes saludaron a todos los conocidos en las tribunas o tiraron puñito a todo aquel que quisiera ser parte del festejo. Inclusive varios del público invadieron la pasarela para tomarse fotos, algo impensado en una noche regular de carnaval.

Lo cierto es que el “León” de Papelitos volvió a rugir, esta vez con grito triunfal, dando nuevamente libertad a la alegría onírica ideada y creada para homenajear al gran Juancho Martínez, una auténtica leyenda carnavalera; alguien que carga sobre sus espaldas la dicha y la responsabilidad de que el espectáculo sea lo que es hoy en día.

Las escuadras pasaron, y ningún integrante ocultó su sonrisa en la cara. La sonrisa papelitera ganadora. ¿Acaso alguien puede pedir menos a la ganadora? Sin dudas, los fanáticos vibraron con cada paso, con cada quebradura de cintura, y desde la pasarela devolvieron la misma pasión.

Con el paso de la carroza de los músicos, el éxtasis fue total, e inclusive integrantes de otras comparsas que fueron a presentar respetos bailaron a rabiar.

Inclusive el mismísimo Juancho Martínez desfiló en la triunfadora Papelitos, siempre sentado en la anteúltima carroza y saludando a todos los que vitorearon su nombre. Sin dudas, el auténtico “León”.

El cierre estuvo a cargo de la batucada dirigida por el intendente Martín Piaggio, que también cedió a la presión del público y brindó una pasada más descontracturada, pero no por descontracturada menos real, porque los sonidos de los tambores sonaron más fuerte que nunca al grito de “¡Dale campeón, dale campeón!”.

Por todo esto, la alegría papelitera se hizo sentir y, por supuesto, el carnaval volvió a vivir una noche más en mano de la campeona, que festejó junto a todos los que se acercaron al alarido crudo de “Sos la alegría, Papelitos sos mi vida / Furia del oeste, te llevo en el alma que ruja el león”.
