Presentan el documental con la historia del Frigorífico
Será hoy a las 21 horas, en el Club que lleva su nombre. El film se llama "Gualeguaychú for export" y cuenta al detalle el auge y caída de una de las industrias que fue modelo en el mundo y que ahora es sólo un recuerdo.
Por Guillermo C. Navarro
[email protected] la historia del Frigorífico, sin rodeos. Contado al detalle por ex trabajadores y sus familiares en un trabajo lleno de emociones, vivencias, recuerdos y todo tipo de sensaciones.El documental se llama "Gualeguaychú for export" y será proyectado por primera vez al público esta noche en el Club Frigorífico, ubicado en calle San Martín entre Pellegrini y Chalup.El film fue realizado por la productora Nancy Rodríguez y el director Cristian Gauna, en el marco de la cuarta etapa del Programa Identidad Entrerriana, y contó con fondos del premio obtenido como guión documental, en el último concurso de video que organiza el Instituto Audiovisual de Entre Ríos (IAER).Rescata, en un material audiovisual, la memoria colectiva de los ciudadanos que trabajaron en el Frigorífico Gualeguaychú. Historias de vida, recuerdos, anécdotas, algunas heridas que aún quedan abiertas a partir de su cierre, gente que todavía tiene la esperanza de volver a faenar como los viejos tiempos. Todo, contado al detalle por sus protagonistas. "Gualeguaychú for export" es un testimonio de valor social, histórico, cultural y económico que oportunamente fue motorizado por la fuerza que tenía el Frigorífico.Un emprendimiento símbolo de la ciudad que durante décadas (más de 80 años) fue la principal actividad local, con reconocimiento mundial.El trabajo referido es un homenaje a esa gran industria cárnica que logró exportar al mundo, "y decidimos ponerle así (Gualeguaychú for export) porque mucha gente desconoce lo que fue su trascendencia", explicó a El Día Nancy Rodríguez y agregó que la idea surgió "para que exista un material que represente a la ciudad y a su vez como algo único en sus características que tuvimos en ese momento en todo el país".El objetivo principal del film es el registro de los testimonios, de las anécdotas de los trabajadores.
"Un trabajo emotivo"
Por su parte, Cristian Gauna expresó que "el documental tiene muchas imágenes históricas y su realización demandó alrededor de un año. Se comenzó a trabajar en el rodaje en octubre del año pasado, y en simultáneo a las entrevistas se elaboró el material de investigación"."El público se encontrará con un trabajo emotivo, nostálgico pero casi sin momentos tristes", destacó y aclaró que el audiovisual no es periodístico sino que "tiende a ser cinematográfico es decir, con una construcción visual más cuidada en la estética, la filmación y las fotografías".
De qué más habla
- La gente recuerda lo que significó el frigorífico para la ciudad- Pretendió ser una obra social muy importante, con escuela.- Entrar al frigorífico era tener el futuro asegurado, tener todo de por vida.- Ese "gigante dormido" tiene mucho de identidad e idiosincrasia de nuestra ciudad.- Durante varias décadas, casi 80 años, el "silbato" de la industria sonaba dos veces: a las 5 de la mañana y a la una de la tarde.
El orgullo que ya no es
No todos los años eran iguales para el desenvolvimiento de los negocios. Diversas circunstancias atribuibles a la política económica nacional o internacional podían beneficiar o perjudicar la marcha de la empresa.En otros casos los problemas estaban referidos a situaciones más allá de sus previsiones como crisis de pasturas, produciéndose faltantes de materia prima y ello llevaba a la necesidad de comprar haciendas en el mercado de Liniers para mantener el cumplimiento de los compromisos de venta en distintos mercados.La inundación del año 1959 llevó a la paralización de la empresa porque ésta había afectado su planta. Las pérdidas fueron millonarias.También se vio obstaculizada la producción por la huelga que durante un mes efectuaron los obreros de la carne. A lo largo del tiempo las desinteligencias entre gremialistas y empresarios se convirtieron en uno de los factores de crisis.La retracción experimentada durante la década del 60 en las demandas de carne del comercio exterior se mantuvo y se acentuó originando nuevas bajas en los precios de colocación de las mismas, que tuvieron repercusión en el valor del ganado y el desenvolvimiento económico de la Empresa.En la década del 70 la situación empeoraba por falta de mercados, actualización en el marco de la política exportadora, desinteligencias de gremialistas y empresarios. El Imperio económico mundial ya no daba espacios a las carnes argentinas. Tampoco había respuestas favorables de parte de las autoridades gubernamentales que permanecían indiferentes ante la delicada situación. Todas las puertas se cerraban, ya no había más crédito produciéndose la cesación de pagos a los distintos proveedores, atraso en los sueldos y jornales del personal.La última década de trabajo fue sumamente crítica. El frigorífico solo faenaba para consumo y así no servía. En 1986 dejó de trabajar.Constituyó el orgullo de Gualeguaychú que lo sentía como su obra. Su cierre aún duele.Fragmentos de la conferencia "Introducción a la historia del Frigorífico" que la profesora Nélida Teresa Veronesi realizó el 15 de octubre de 2000, en el marco del 11° Congreso de la Asociación de Profesores de Historia del Uruguay (APHU) que se realizó en Las Cañas, Fray Bentos (ROU)
Por Guillermo C. Navarro
[email protected] la historia del Frigorífico, sin rodeos. Contado al detalle por ex trabajadores y sus familiares en un trabajo lleno de emociones, vivencias, recuerdos y todo tipo de sensaciones.El documental se llama "Gualeguaychú for export" y será proyectado por primera vez al público esta noche en el Club Frigorífico, ubicado en calle San Martín entre Pellegrini y Chalup.El film fue realizado por la productora Nancy Rodríguez y el director Cristian Gauna, en el marco de la cuarta etapa del Programa Identidad Entrerriana, y contó con fondos del premio obtenido como guión documental, en el último concurso de video que organiza el Instituto Audiovisual de Entre Ríos (IAER).Rescata, en un material audiovisual, la memoria colectiva de los ciudadanos que trabajaron en el Frigorífico Gualeguaychú. Historias de vida, recuerdos, anécdotas, algunas heridas que aún quedan abiertas a partir de su cierre, gente que todavía tiene la esperanza de volver a faenar como los viejos tiempos. Todo, contado al detalle por sus protagonistas. "Gualeguaychú for export" es un testimonio de valor social, histórico, cultural y económico que oportunamente fue motorizado por la fuerza que tenía el Frigorífico.Un emprendimiento símbolo de la ciudad que durante décadas (más de 80 años) fue la principal actividad local, con reconocimiento mundial.El trabajo referido es un homenaje a esa gran industria cárnica que logró exportar al mundo, "y decidimos ponerle así (Gualeguaychú for export) porque mucha gente desconoce lo que fue su trascendencia", explicó a El Día Nancy Rodríguez y agregó que la idea surgió "para que exista un material que represente a la ciudad y a su vez como algo único en sus características que tuvimos en ese momento en todo el país".El objetivo principal del film es el registro de los testimonios, de las anécdotas de los trabajadores.
"Un trabajo emotivo"
Por su parte, Cristian Gauna expresó que "el documental tiene muchas imágenes históricas y su realización demandó alrededor de un año. Se comenzó a trabajar en el rodaje en octubre del año pasado, y en simultáneo a las entrevistas se elaboró el material de investigación"."El público se encontrará con un trabajo emotivo, nostálgico pero casi sin momentos tristes", destacó y aclaró que el audiovisual no es periodístico sino que "tiende a ser cinematográfico es decir, con una construcción visual más cuidada en la estética, la filmación y las fotografías".
De qué más habla
- La gente recuerda lo que significó el frigorífico para la ciudad- Pretendió ser una obra social muy importante, con escuela.- Entrar al frigorífico era tener el futuro asegurado, tener todo de por vida.- Ese "gigante dormido" tiene mucho de identidad e idiosincrasia de nuestra ciudad.- Durante varias décadas, casi 80 años, el "silbato" de la industria sonaba dos veces: a las 5 de la mañana y a la una de la tarde.
El orgullo que ya no es
No todos los años eran iguales para el desenvolvimiento de los negocios. Diversas circunstancias atribuibles a la política económica nacional o internacional podían beneficiar o perjudicar la marcha de la empresa.En otros casos los problemas estaban referidos a situaciones más allá de sus previsiones como crisis de pasturas, produciéndose faltantes de materia prima y ello llevaba a la necesidad de comprar haciendas en el mercado de Liniers para mantener el cumplimiento de los compromisos de venta en distintos mercados.La inundación del año 1959 llevó a la paralización de la empresa porque ésta había afectado su planta. Las pérdidas fueron millonarias.También se vio obstaculizada la producción por la huelga que durante un mes efectuaron los obreros de la carne. A lo largo del tiempo las desinteligencias entre gremialistas y empresarios se convirtieron en uno de los factores de crisis.La retracción experimentada durante la década del 60 en las demandas de carne del comercio exterior se mantuvo y se acentuó originando nuevas bajas en los precios de colocación de las mismas, que tuvieron repercusión en el valor del ganado y el desenvolvimiento económico de la Empresa.En la década del 70 la situación empeoraba por falta de mercados, actualización en el marco de la política exportadora, desinteligencias de gremialistas y empresarios. El Imperio económico mundial ya no daba espacios a las carnes argentinas. Tampoco había respuestas favorables de parte de las autoridades gubernamentales que permanecían indiferentes ante la delicada situación. Todas las puertas se cerraban, ya no había más crédito produciéndose la cesación de pagos a los distintos proveedores, atraso en los sueldos y jornales del personal.La última década de trabajo fue sumamente crítica. El frigorífico solo faenaba para consumo y así no servía. En 1986 dejó de trabajar.Constituyó el orgullo de Gualeguaychú que lo sentía como su obra. Su cierre aún duele.Fragmentos de la conferencia "Introducción a la historia del Frigorífico" que la profesora Nélida Teresa Veronesi realizó el 15 de octubre de 2000, en el marco del 11° Congreso de la Asociación de Profesores de Historia del Uruguay (APHU) que se realizó en Las Cañas, Fray Bentos (ROU)
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