
En una entrevista con El Día, el director del Hospital de Concepción del Uruguay analiza el presente del centro asistencial y reconoce los problemas diarios que surgen en la atención. Sin embargo, asegura que "el Hospital brinda una muy buena atención" y se anima a hablar de la manera en que la política interfiere con la salud. Por A. Pino El Día de Uruguay Para Ricardo Derendinger, director del Hospital "Urquiza" de Concepción del Uruguay, este centro "es el que mejor posicionado está en el ámbito provincial". En la charla con El Día afirma que estas definiciones "no son palabras ni logros míos, sino de todos los actores que participan del Hospital y que se desprenden de los referentes de salud provinciales. Hay especialidades que no se brindan en otros lugares como el servicio de hemodiálisis, es uno de los pocos hospitales que tiene servicio de tomografía, hemodinamia, cirugía cardiovascular, y cardiovascular periférica", recuerda.Ello no implica que no existan problemas en la atención...Pero debe tenerse en cuenta que es un lugar al que concurre mucha gente, con más de 14 mil internaciones en 2009, se atendieron casi 60 mil personas en la Guardia, y más de 70 mil personas que fueron atendidas en los consultorios externos del hospital. Y se trata de personas que llegan en búsqueda de la solución de un problema. Por eso no dejo de aceptar que es un sitio en el que frecuentemente hay conflictos porque la gente viene con un problema.¿El hospital está preparado para el nivel de demanda que tienen los diferentes servicios y la guardia?Sí, actualmente en el Hospital "Urquiza" hay 834 empleados, sin contar todos los concurrentes ad honorem y adscriptos que hay. La masa profesional tanto de médicos, bioquímicos, enfermeros, kinesiólogos, etc., es la adecuada.Ahora estamos por llevar adelante una reubicación del personal para crear una unidad de cuidados intensivos coronaria, y eso requiere una cantidad de enfermeros que estamos gestionando para tratar de conseguirlos. Lo mismo ocurre con los médicos de guardia, para que tengan una figura laboral definitiva hasta que se hagan los concursos, como corresponde.¿Cuál es su percepción de la atención que brinda el Hospital actualmente, frente a las quejas de los usuarios?La atención es muy buena. Es normal y lógico que haya quejas, porque tiene que ver con las relaciones humanas, con un lugar donde transita tanta gente y la vorágine del trabajo y la monotonía sobre todo de los empleados no profesionales, sin desmerecerlos, pero eso hace que aparezcan conflictos. De todos modos, me tomé el trabajo de requerir más información acerca de las quejas que cada tanto aparecen en los medios de comunicación, enviando mails a las direcciones de correo que aparecen para que amplíen esas informaciones y no he recibido respuesta. Por eso no sé si se trata de cuestiones que obedecen a alguna cuestión política por el momento que estamos viviendo, más allá de que hay casos de quejas en los que las referencias que se hacen son ciertas, pero eso ocurre en todos los lugares donde hay relaciones humanas.¿Cuál es la situación actual respecto a la provisión de medicamentos en el Hospital?Hay un dato que no quiero dejar de mencionar que está referido a la cantidad de Medicamentos que produce el Hospital desde el Centro de Salud "Giacommotti" que funciona en el edificio del viejo Hospital. Durante 2009 se fabricaron 907.620 comprimidos de diclofenax, amoxicilina, etc. A esto hay que sumarle los medicamentos que el Hospital compra.Pero ha habido quejas por la falta de medicamentos...Es real que ha habido faltante de algunos medicamentos, porque no llegó la droga que viene de una droguería suiza desde Buenos Aires. Faltó en gran escala y no en casos puntuales, y en este momento ya se han tomado los recaudos para solucionarlo. Por supuesto que tengo que aceptar que hay ocasiones en que faltan medicamentos, pero cuando faltan y la persona tiene la prescripción médica y no cuenta con cobertura social, vía servicio social, nosotros le entregamos el medicamento.¿Qué lugar ocupan las acciones de prevención y atención primaria de la salud para evitar que la gente se enferme en vez de esperar que lleguen al Hospital?En este punto debo mencionar el trabajo que se hizo en estos años con el servicio de Atención Primaria a través de los Móviles Sanitarios. Por gestiones nuestras, la justicia nos entregó dos camionetas y se conformó una Brigada de Salud que el año pasado recorrió casi todas las escuelas del Departamento en la que se concretaban acciones de atención primaria. Se realizaron obras de teatro sobre dengue, hepatitis, diarrea; se vacunaron chicos, se aplicó el programa "Veo bien" que pretende diagnosticar problemas visuales en convenio con Rotary, que luego provee los anteojos de manera gratuita para aquellos chicos carentes de recursos. O sea que se están haciendo muchas cosas en este sentido.¿Qué evaluación hace de la situación de salud de la ciudad?Nosotros nos guiamos por las estadísticas que tenemos y nuestro Departamento cuenta con una mortalidad infantil del 5,6 por mil frente a una media provincial del 12,6 por mil y una media nacional del 13 por mil y eso quiere decir algo. A su vez, hemos hecho 52 cirugías cardiovasculares, por poner dos ejemplos de los extremos de la cadena sanitaria. Más allá de que algún día pueda faltar amoxicilina, se trata de un hospital que está en condiciones de seguir creciendo y brindar cada vez más servicios a la comunidad. Cuando la política se entromete en la salud ¿De qué manera "las cuestiones políticas" afectan el funcionamiento del Hospital?Siempre que se acercan momentos políticos, que se habla de internas partidarias o de elecciones, recrudecen las quejas. Pero yo no lo atribuyo a una cuestión interna partidaria ni que estén dirigidas hacia mi. Aunque lo que uno pretende cuando aparecen quejas sobre situaciones del Hospital es que se presenten ante la Dirección como corresponde, asumiendo el compromiso y la responsabilidad de denunciar un mal servicio o maltrato para que nosotros hagamos lo que tenemos que hacer.¿Pero la política se inmiscuye en la vida del Hospital?Sí, por supuesto. Por eso yo creo que con el tiempo, y es en lo que se está trabajando, por mi experiencia y de acuerdo a lo que establece la ley, el director del Hospital tiene que ser designado por concurso para que no sienta el peso del poder político. De esa manera, los directores podrían manejarse de otra manera de la que nos hemos tenido que manejar los que fuimos designados políticamente. Así que una de las cuestiones centrales es que el cargo de los directores de hospitales se designe por concurso, porque eso resolvería un montón de cuestiones diarias respecto al funcionamiento diario y las decisiones que toma un director de Hospital.