
El ingeniero en Producción Agropecuaria, Francisco Peragallo, además de ser docente de una escuela agrotécnica en Colón y Coordinador de prácticas de la Tecnicatura Superior en Enología y Fruticultura de la ciudad de San José, donde enseña Climatología Agrícola, aseguró que "la sojización es un gran problema".
"Cuando éramos chicos nuestra región tenía las cuatro estaciones definidas y un régimen de lluvias definido. Así como hacía más calor en verano y más frío en invierno, también llovía más en otoño y en primavera. Las temperaturas, incluso, estaban mucho más marcadas y establecidas. Esa estabilidad climática se rompió por el cambio de la temperatura global. Empezó un cambio hacia otra situación de estabilidad que puede llegar dentro de mil años, cien o cincuenta. Este lío climático que estás viendo es la transición entre lo que conociste cuando eras chica y el próximo estadio de estabilidad, que quien sabe cuándo va a ser. En este caos es impredecible el clima", indicó el especialista.
Explicó que "nuestro cambio responde a lo que ocurre en el mundo, el cual está cambiando climáticamente y eso provoca un desorden que no permite hacer predicciones ni siquiera a dos o tres meses". Agregó: "En el campo nos manejamos con un promedio anual; sabemos que al año en nuestra región llueven 1.200 mm, concentrados principalmente en primavera y otoño, por eso plantamos en esas estaciones. Después, está el karma, ese concepto budista de que todos de alguna forma en el mundo estamos vinculados. La muerte de una mariposa en el sudeste asiático trae alguna consecuencia donde vivís, como si todo estuviese en equilibrio e interconectado de alguna u otra forma. Este efecto del niño es una prueba clarísima de esto".
-¿Cuánto tenemos que ver los humanos en los fenómenos climatológicos que vivimos actualmente?
-Todo. Esta alteración se llama antropización, los seres humanos estamos cambiando nuestro ambiente y al hacerlo cambiamos el clima. Una de las cosas que ha hecho este cambio es acelerar y radicalizar los fenómenos climáticos. Por ejemplo, la corriente del Niño -que es la que nos está afectando ahora a nosotros- tiene más de mil años; antiguamente se daba cada diez, quince o veinte años y ahora cada dos o tres años. Es un fenómeno que consiste en el calentamiento de las aguas de la costa del Perú, en diciembre (se llama del Niño porque viene con el Niño Jesús). El calentamiento de esas aguas hace que la circulación cambie en los vientos alisios del Pacífico, lejos de nosotros, pero hace que acá llueva un montón. Antes, tanto el Niño como la Niña eran suaves y ahora son fuertes. Todos los fenómenos climáticos han empezado a ser más extremos y frecuentes. Cuando tengamos seca va a ser tremenda.
¿Qué hicimos mal para todo esto?
-Lo peor que se ha hecho es el calentamiento global. El sol manda rayos de calor y luz, una parte queda en la Tierra, la otra rebota y se va. La atmosfera tiene una composición que sería como el nylon de un invernadero (por eso se lo llama también efecto invernadero), retiene parte de ese calor. Lo que los hombres hemos hecho al cambiar la composición de la atmósfera con tanto dióxido de carbono más -es decir, desbalanceando el dióxido que emitimos cuando quemamos combustible- es como si hubiésemos hecho más gruesa la capa del nylon que nos protege, entonces, parte del calor que debería salir al espacio permanece en la Tierra.
- ¿influyó la deforestación?
-Claro, todo está hecho de carbono (las plantas, nosotros) pero había un balance en el cual había carbono fijado como el de la madera, carbono en el oxígeno. Resulta que el hombre descubrió que había un montón de carbono debajo de la tierra en forma de petróleo, empezó a extraerlo, quemarlo y generar más dióxido de carbono que calienta el aire, al mismo tiempo que empezó a cortar a los únicos organismos de la Tierra capaces de chupar carbono y generar oxígeno. Para combatir el calentamiento global hay que quemar menos petróleo y plantar más árboles.
-¿Llevaría mucho tiempo revertir esto?
-Se está avanzando mucho en la conciencia ciudadana. La solución es sencilla: la búsqueda de energías alternativas y forestar más. Hay países como Francia, donde hacen descuento por la madera que tenés en tu casa.
-¿Qué está pronosticado a mediano plazo para el río Uruguay?
-Está avisado que el nivel promedio del río será más alto y que tendremos consecuencias concretas y reales del cambio climático. De esto vamos a tener mucho más. Seguirá habiendo inestabilidad, fenómenos climáticos sorpresivos y extremos.
-¿Qué hay sobre la responsabilidad que se le adjudica a las plantaciones de soja en las inundaciones?
-Lo peor que podés hacerle a la tierra es sacarle su cobertura vegetal, porque esta no solo absorbe agua para vivir, sino que amortigua muchísimo la caída de agua sobre la tierra evitando que la erosione. Si la dejas descubierta o le pones una capa menor de cobertura vegetal, haces que el agua corra más rápido y el suelo se degrade. La sojización es un gran problema. Cualquier monocultivo intensivo, sin cuidado y sin reparos es tremendamente nocivo para la tierra y los cursos de agua. El Entre Ríos