
Se cumplió ayer un nuevo aniversario de la desaparición de la joven de San Benito Fernanda Aguirre, quien fue vista por última vez el 25 de julio de 2004, cuando iba a llevar flores a la casa de una vecina.Por el secuestro fueron juzgadas dos personas: Mirta Cháves y Raúl Monzón. La primera recibió una condena de 17 años de prisión, pero el segundo fue absuelto.El principal sospechoso del secuestro de Fernanda, Miguel Ángel Lencina, apareció ahorcado en una celda de la comisaría quinta, en agosto de 2004, a pocos días de haber sido detenido por el hecho. Lencina era un delincuente condenado por homicidio que el día que desapareció Fernanda gozaba de una salida otorgada por un juez de Concepción del Uruguay para visitar a su familia.En 2009, la mamá de Fernanda, María Inés Cabrol (quien falleció el pasado 11 de mayo) dijo que llevaban "un año más sin saber de ella. Y llevamos cinco años de calvario. No tenemos un resultado de ninguna parte, ni de la justicia ni de otro lado. Ella sigue desaparecida como si se la hubiese tragado la tierra".Cuando empezaron a surgir las hipótesis del caso, la madre de Fernanda se inclinó por la de la trata de personas, postura que sostuvo porque siempre pensó que su hija cayó en una red de prostitución de menores.