Tras empatar con Auckland, Boca quedó eliminado del Mundial de Clubes

Boca cierra el Mundial de Clubes de la peor manera posible: quedó eliminado por la victoria de Benfica ante Bayern Múnich y, además, mostró una mala imagen en su partido ante Auckland City, un equipo semiprofesional de Nueva Zelanda al que necesitaba golear. 

El equipo de Miguel Ángel Russo se puso en ventaja a los 26 minutos de juego gracias al gol en contra de Nathan Garrow, el arquero rival, y tuvo ocasiones claras para ampliar la cuenta, incluidos dos tiros en el palo. Sin embargo, se convirtió en un equipo previsible, sin sorpresa y se repitió en centros ante un adversario que se defendió dentro de su área.

Y, para colmo de males, a los siete minutos del segundo tiempo llegó el empate de Christian Gray, quien marcó de cabeza el primer gol del conjunto neozelandés en el torneo. Previamente, había perdido 10-0 ante Bayern Múnich y 6-0 frente a Benfica, lo que expone aún más al Xeneize.

Un tiro de esquina del colombiano Jerson Lagos encontró a Gray, que le ganó de arriba a Rodrigo Battaglia y gritó el 1-1. Y los de camiseta azul, ya eliminados, lo celebraron como si ese tanto les diera la clasificación.

Gray, defensor central de 28 años que jugó toda su carrera en el fútbol neozelandés, fue fichado por Auckland City a comienzos del 2022 y tiene contrato vigente hasta fin de año.

Acumula cuatro goles en 70 partidos con el equipo. El anterior había sido en la final de la Champions de Oceanía 2024, ante el Pirae, también con la testa. Según el sitio especializado Transfermarket, su valor de mercado es de 175 mil euros y, como muchos de sus compañeros, tiene otro empleo.

¿A qué se dedica Gray? Aspira a ser maestro y ya participa activamente en la Escuela Intermedia Mount Roskill y la Escuela Primaria de Auckland. Es hijo del ex capitán de la selección nacional de Nueva Zelanda, Rodger Gray, y jefe de seguridad del club.