Tranquilos asambleístas y tranquilos todos nosotros también
Los últimos anuncios oficiales sobre la convocatoria del tribunal de La Haya para dar a conocer su fallo el 20 de abril, han motorizado la ansiedad colectiva de Gualeguaychú.Seguramente otros sectores de extramuros, también por qué no, tienen un cierto grado de ansiedad. Pero todos nosotros, aquí, tenemos que administrar hoy como nunca los deseos de que nuestra verdad, la de cada uno, es la única verdad.Son los asambleístas que han permanecido "montando guardia" en el seno de la originaria Asamblea Ciudadana Ambiental de Gualeguaychú, quiénes con sus errores, equivocaciones, y a veces hasta excesos, pero también con lo que es mucho más importante para la lucha que este pueblo decidió llevar adelante, los que han tenido aciertos, fortaleza, y muchísimas veces perseverancia, que en este largo camino de resistencia ciudadana ante el engaño y los hechos consumados, son claros valores que se reconocen y respetan.Sin temor a equivocarnos, decimos que es imprescindible mantener y aumentar los valores positivos, los que a través de conductas firmes y sólidas, respetuosas de otros pensamientos y actitudes diferentes, renueven el reconocimiento masivo, absolutamente masivo, a la Asamblea Ciudadana Ambiental de Gualeguaychú.Así ha sido, como decimos, con sus más y con sus menos, que aquí se plantó e instaló una novedosa expresión social con la Asamblea, ante el atropello de sectores económicos y políticos que hasta ahora aparecían como invencibles.Pero no. Después de la Asamblea Ambiental, no cabe duda a nadie que los seres humanos hemos despertado aún más, oponiéndonos al problema.Quiénes somos amigos del progreso, la transformación y mejoras de ciertos recursos naturales por supuesto que hemos aprendido también que con la naturaleza no se juega. Que se la debe respetar a ultranza. Preservar sus virtudes a toda costa.A cada momento hoy día, tenemos la posibilidad de ver los resultados cuando el hombre con su afán desmedido, ilimitado, inmoral, provoca de manera irremediable trágicos resultados.Todo ésto y mucho más a favor de la vida, de la salud y de los derechos que nos asisten al goce de la naturaleza, es que sólo los extraviados, los mal intencionados o los déspotas, todos los demás queremos vivir junto a una realidad justa y feliz.Esperemos todos tranquilos el fallo de La Haya. Comprendamos a los demás que piensan deferente, como queremos que a cada uno de nosotros nos comprendan también, Y que nos respeten de igual manera.Por ejemplo, el Obispo Jorge Lozano sólo hizo una solicitud para levantar por unas jornadas el Corte. Lo respaldó, creemos, en su trayectoria de Pastor. La Asamblea contestó con elocuencia y mucho respeto, a través de una nota esa solicitud. Esa es la forma.Y aún más en esta caso. Observamos la presencia de algunos asambleístas que concurrieron a la sede del Obispado en las últimas horas en buen gesto. Y sabemos que pese al "no" de la dolorosa contestación, ambas partes tendieron su mano. Y sumaron fuerzas otra vez, como debe ser.De la misma manera es necesario repetir acciones inteligentes buscando la re-concientización de algunos otros actores sociales.Ella, -la nueva comunicación- debe estar apuntada a aquéllos que se han olvidado de la amenaza imparable de la contaminación.Con el mega emprendimiento pastero Botnia-UPM, los intereses poderosos de la economía deshumanizada, actúan con las más diversas estrategias.Sus tentáculos abrazan medios de comunicación masivos, nacionales e internacionales. Periodistas incautos o venales, realizan operaciones muy inteligentes sobre un público desprevenido o desinteresado por el problema, que por ahora no los agrede en carne propia.Cómo llegar a ellos antes que llegue el 20 de abril?. Creemos que con agentes propios de la Asamblea. Determinando una política comunicacional bien establecida. Una vez más.Tiene que tener la agresividad y contundencia que sólo respalda el conocimiento y la versación plena, de la problemática.Es fundamental desembarcar en todos los medios de prensa posibles otra vez. Es necesario que hablen y se expongan en este mes que nos queda por delante, figuras de relieve personal, que contundentemente enfrenten y debiliten los terremotos de mentiras que en cataratas, muy bien sincronizadas, derraman su desinformación, su mala información, sobre un público que debe volver a apoyarnos.Tranquilos asambleístas, y tranquilos todos nosotros, los demás. Tranquilos también los que a lo mejor no comparten algunos métodos, pero sí valores fundamentales de la vida como ya destacamos. A sumar. A sumarnos.La sexta Marcha del 25 de abril al puente San Martín, une toda esta comunidad. Nadie quiere para sí mismo, para sus hijos, nietos y generaciones venideras, una ciudad, una región, una provincia, una nación, ni un planeta, agredido en su naturaleza, depredado y rumbo a una tragedia irremediable.Gualeguaychú, su Asamblea Ciudadana Ambiental, tiene que seguir de pie. Con tranquilidad, con capacidad inteligente, con decisión, eligiendo sus mejores comunicadores, renovándolos, experimentados para explicar una y otra vez, el por qué de esta lucha justa y digna.Muy lejos de ser "piquetera", como de manera simplista y mal intencionada, algunos la catalogan.Tranquilos asambleístas. El 25 de abril nos convoca a todos. Nos une a todos. Todos tranquilos estaremos allí.
ESTE CONTENIDO COMPLETO ES SOLO PARA SUSCRIPTORES
ACCEDÉ A ÉSTE Y A TODOS LOS CONTENIDOS EXCLUSIVOSSuscribite y empezá a disfrutar de todos los beneficios
Este contenido no está abierto a comentarios